tag:blogger.com,1999:blog-14444457722695385802024-03-13T12:34:48.768+01:00China - Reflexiones Orientales 东方深思Los habitantes de lo que ahora es la República Oriental del Uruguay fueron y son conocidos también como “orientales”. Este oriental, después de 17 años de vida en Uruguay y Argentina, aterrizó en China en 1975 y desde entonces sigue relacionado a ese “otro” Oriente, donde residió casi un cuarto de siglo y al que sigue vinculado activamente. Esta página pretende reflexionar, contar, compartir pensamientos, historias y experiencias de China, de ayer y del presente.Unknownnoreply@blogger.comBlogger230125tag:blogger.com,1999:blog-1444445772269538580.post-830906591320442402024-02-08T16:32:00.002+01:002024-02-08T16:32:32.629+01:00Mi primer Año del Dragón en China, año 1976. Lindo haberlo vivido....<p>Después de haber llegado a Beijing en julio de 1975, al poco tiempo de haber entrado el nuevo año, tuve la ocasión de conocer una de las tradiciones culturales más importantes de la civilización china: la Fiesta de la Primavera, que en ese año de 1976, marcaba el comienzo del llamado "Año del Dragón". Desde entonces han pasado ya 48 años y este 10 de febrero pasaré mi quinto Año del Dragón relacionado con China.</p><p>Entonces yo vivía con mis padres y una de mis hermanas, Laura, en el "Hotel de la Amistad". Con Laura ya habíamos comenzado nuestras clases de chino, ibamos y veníamos entre el Hotel y el Instituto (ahora ya es una Universidad) en bicicleta, disfrutado como niños al ver la nieve por primera vez en nuestras vidas y poco a poco nos íbamos adaptando a vivir del otro lado del mundo sin contar con todos los avances tecnológicos que tiene actualmente la humanidad. </p><p>En enero de 1976 cumplí mi mayoría de edad en Beijing. Apenas estábamos empezando a "luchar" para aprendernos los cuatro acentos de la pronunciación en chino, a que nuestra lengua hiciera movimientos particulares y a soplar o no al pronunciar diferentes palabras. No llevábamos muchos caracteres aprendidos, o los aprendidos se nos olvidaban, cuando de pronto empezaron a aparecer en las entradas a los edificios faroles rojos y carteles con dos palabras que aprendimos, no sé si a escribir bien, por lo menos a reconocer:<span style="font-family: inherit;"> <b>春节</b></span> (Fiesta de la Primavera).</p><p>¿Qué era eso de la "Fiesta de la Primavera"? Ni idea. Es verdad que viniendo de Uruguay habíamos empezado a vivir las cuatro estaciones del año "al revés". O sea que esa "primavera" equivaldría a nuestro otoño uruguayo...pero en la escuela habíamos aprendido que el otoño en Uruguay empezaba el 21 de marzo. ¿Por qué en China iban a celebrar una fiesta que llamaban "de la primavera" un 31 de enero en medio de un frío invernal?</p><p><br /></p><div class="separator" style="clear: both; text-align: center;"><a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEj8mkqVC1oK7vhnzaEbPtdrigpbOsZRTa1ZKjdZzivGHdw1rd7qTMzaeMznF8t14MBxJBGb9HXJCTagkFdm_2hC9jTO7enlgYz76_QUVbb8sTGo-MvixzAdmfrS6UJd6fdZVB20END-Te9mp9vQPIZQM4QIT-EmBAJUR1qpgkqxp_6sSFHxmwyjQvJEGHq-/s512/Faroles.jpg" imageanchor="1" style="margin-left: 1em; margin-right: 1em;"><img border="0" data-original-height="288" data-original-width="512" height="225" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEj8mkqVC1oK7vhnzaEbPtdrigpbOsZRTa1ZKjdZzivGHdw1rd7qTMzaeMznF8t14MBxJBGb9HXJCTagkFdm_2hC9jTO7enlgYz76_QUVbb8sTGo-MvixzAdmfrS6UJd6fdZVB20END-Te9mp9vQPIZQM4QIT-EmBAJUR1qpgkqxp_6sSFHxmwyjQvJEGHq-/w400-h225/Faroles.jpg" width="400" /></a></div><br /><p>En un país en el cual se trabajaba seis días a la semana (¿quién utilizaba entonces el término <b style="font-size: small;">周末 </b>-fin de semana-?), y los únicos feriados del año eran el 1 de enero, 1 de mayo y 1 de octubre, ésta tenía que ser una ocasión muy especial ya que mis padres -al igual que los demás trabajadores chinos- iban a tener cinco días de vacaciones.</p><p>En esos años sin Internet, lo poco o mucho que fuimos aprendiendo sobre este acontecimiento tan importante en la vida del país fue a través de los que nos comentaban los colegas de trabajo de mis padres, los funcionarios del llamado "Buró de Expertos", y algunos profesores chinos, todo ello por supuesto en español, ya que nuestro nivel de chino no daba para más que intercambiar algunos saludos.</p><p>El único libro que teníamos como referencia era la Guía Nagel´s sobre China, en francés, publicada en 1975, un verdadero tesoro que aún se conserva en la casa de mi familia en Montevideo.</p><p>El 1 de enero habíamos celebrado el año nuevo, y entonces los dos caracteres chinos que aparecían en las calles decían <span style="font-family: inherit;"><b>元旦</b></span> y ahora "descubrimos" que íbamos a pasar otro, esta vez según un llamado "Calendario Agrícola" <b style="font-size: small;">农历 </b>con miles de años de historia, relacionado con las fases de la luna y también con la posición de la Tierra en relación con el Sol, y que tenía una importancia fundamental tanto en la cultura del país como en sus actividades agrícolas.</p><p>La Fiesta de la Primavera marcaba el fin del invierno y el comienzo de la primavera para las actividades agrícolas, aunque obviamente debido a la extensión territorial de la China del siglo XX, no en todas las partes del país iba a ser igual.</p><p>Nos explicaron que había doce animales en ese calendario, y que el dragón era el único mitológico de ellos, y también las características de la gente que había nacido en un año determinado y relacionado con uno de esos doce animales. Cada doce años, se volvía a repetir el ciclo. A diferencia de nuestro horóspoco que tenía relación con el mes en el cual habíamos nacido, en China era diferente, y lo que determinaba el caracter de una persona era el año del nacimiento. </p><p>En la China de 1976, sin embargo, ningún medio de prensa hizo referencia al "Año del Dragón". Eso era algo que sólo se mencionaba a nivel popular. A veces, en lugar de preguntar la edad, lo que se quería era saber el animal correspondiente al año en el que uno había nacido. Esto era también muy importante a la hora de concertar un matrimonio; los nacidos en el año del animal X no se llevan bien con los nacidos en el año Y, o viceversa. </p><p>El del dragón, nos dijeron, era un año muy importante, ya que era un "animal" muy relacionado con la civilización china. Y por eso muchas parejas querían tener un "hijo dragón". Entonces, la política de planificación familiar permitía tener dos hijos por matrimonio, no sólo uno como ocurrió años más tarde. Pero para mantener esa política, en esos días se incrementaba la propaganda sobre la planificación familiar y los métodos anticonceptivos.</p><p>En esa época había matrimonios que vivían todo el año separados, y la "Fiesta de la Primavera" era la única ocasión que tenían para estar juntos, y por eso las brigadas de planificiación familiar se encargaban de recordarles cuál era la política del gobierno al respecto y les "asesoraban" y "aconsejaban" sobre el uno de diferentes métodos anticonceptivos.</p><p>Aparte de esos matrimonios que se reecontraban, la tradición marcaba que en esa "Fiesta de la Primavera" las familias tenían que reunirse para entrar juntos a ese "año nuevo" y por eso, todos aquellos que podían hacerlo, con el permiso de sus instituciones de trabajo, intentaban regresar a sus <b style="font-size: small;">老家 </b>(la tierra natal de sus antepasados) Y ya entonces, en una China que tenía poco más de 900 millones de habitantes, se producía el fenómeno conocido como <span><span style="font-family: inherit;"><b>春运 </b>(los viajes con ocasión de la Fiesta de la Primavera) </span></span><span>el mayor desplazamiento en el mundo de seres humanos en tan poco espacio de tiempo, fenómeno que se mantiene hasta la actualidad, aunque con mejores y más modernas infraestructuras y medios de transporte.</span></p><p><span>Mis padres, al igual que todos los extranjeros que trabajaban en organismos estatales chinos, fueron invitados a un "banquete" en el Gran Palacio del Pueblo, y los organismos donde trabajaban nos invitaron a una o dos casas de sus compañeros de trabajo para cenar o almorzar juntos. </span></p><p><span>Fue para nosotros la primera vez que íbanos a entrar en la vivienda de un ciudadano chino. La cena fue en apartamento de un edifico de cinco pisos, sin ascensor, donde nos esperaban -aparte de los dueños de casa- otros compañeros de trabajo. Allí tuvimos que participar en "la ceremonia" de hacer <span style="font-family: inherit;"><b>饺子</b> <i>jiaozi</i></span>,una especie de empanadilla o raviol. Con una mano teníamos que agarrar una porción redonda de masa de harina y con la otra, ayudados por los palillos, había que agregarle el relleno y luego cerrar la empanadilla, y cerrarla bien era lo más importante. Confieso que no se me dio nada bien este experimento. Pero era un acto de "unión" entre todos los que estábamos en la casa.</span></p><p><span>Pero los <i>jiaozi </i>eran sólo una parte de una cena que incluía todo tipo de platos (entradas frías, platos calientes con carne, verduras y <i>doufu</i>) y durante la cual se bebía mucho y siempre brindando entre todos. Otra de las cosas que aprendimos fue que la cena tenía que terminar con un pescado, debido a un juego de palabras que querían decir que tenía que ser un año de abundancia.</span></p><p><span>También "aprendimos" entonces que durante la Fiesta de la Primavera era el período del año durante el cual la gente comía más y mejor. En algunos casos, era la única oportunidad que tenían de comer carne, como lo recordó el actual presidente, Xi Jinping, hablando de sus años de juventud en el campo. También era la época del año en la cual la gente se acostaba más tarde y la televisión y la radio extendían sus horarios de emisión para transmitir la "velada nocturna de la Fiesta de la Primavera", un programa especial con cantos, danzas, y los famosos diálogos comicos<span style="font-family: inherit;"> <b>相声</b></span> que tanto hacían reir a la gente. </span></p><p><span>En una China muy convulsionada por movimientos políticos (el primer ministro Zhou Enlai acababa de fallecer el 8 de enero), la Fiesta de la Primavera era el momento del año "menos político" y más divertido y lúdico.</span></p><p><span>En las universidades, fábricas y organismos estatales, se donaban o vendían a bajo precio, huevos de gallina u otros alimentos que normalmente no eran tan fáciles de conseguir y también se regalaban a vendían entradas de cine, de teatro, o de otros espectáculos.</span></p><p><span>Además los dirigentes máximos del Partido tenían que "visitar a las masas", a los héroes de la guerra, y lo mismo hacían los dirigentes de cada institución. Así los j</span>efes y compañeros de trabajo de nuestros padres nos visitaron en el Hotel de la Amistad.</p><p>A medida que, como consecuencia de la apertura al exterior de China, la globalización y la aparición de modernas técnicas de comunicación, la "Fiesta de la Primavera" es cada vez más conocida, y celebrada en diferentes países del mundo, no dejo de asombrarme al ver, en nuestro mundo de habla hispana, expresiones como las de "Año del Dragón de Madera"; será por mi torpeza, pero no llego a entender por qué desde el exterior -incluídas algunas personalidades y entidades amigas y muy relacionadas con China- utilizan expresiones que no veo ni en China, ni en los países o regiones con gran influencia china -como por ejemplo Singapur-. .... En fin, como dice el refrán "doctores tiene la Iglesia"... </p><p>Nuestra primera Fiesta de la Primavera fue un maravilloso descubrimiento sobre aspectos de la cultura china que desconocíamos por completo, y desde hace más de 48 años no he dejado de aprender y de "descubrir" cosas muy interesantes sobre la misma. Lo lindo fue aprenderlo <i>in situ,</i> observando, escuchando, como tantas de las cosas que he aprendido y sigo aprendiendo del país.</p><p>Casi ya medio siglo después, y a punto de entar en mi quinto Año del Dragón, las cosas han cambiado mucho como consecuencia del rápido y espectacular desarrollo económico y social que ha vivido China; pero aún hay fenómenos o acontecimientos que me recuerdan a ese año 1976, como por ejemplo las visitas de los dirigentes a "las masas" o lo del <span style="font-size: x-small; font-weight: bold;">春运 -</span><span>a pesar de los grandes avances en las infraestructuras del país - </span>al tiempo que han surgido -o resurgido- costumbres que no existían entonces como por ejemplo la de regalar "sobres rojos", con dinero, a familiares y amigos.</p><p>En todo caso, como dice la canción: "lindo haberlo vivido pa´poderlo contar". O como dijo el maestro, "vivir para contarlo". </p><p>@PabloRovetta </p><p><br /></p>Unknownnoreply@blogger.com1tag:blogger.com,1999:blog-1444445772269538580.post-15764796858501261192024-02-01T07:31:00.000+01:002024-02-01T07:31:04.982+01:00Un libro imprescindible sobre la literatura latinoamericana en China<span style="font-size: large;">¿Cuál fue la primera obra de un escritor latinoamericano que se publicó en la República Popular China? Desde entonces, ¿cuántas obras de autores de la región se han publicado en chino? ¿Cuántos escritores, y cuántas obras, han visto la luz en el país asiático? ¿Cuáles fueron los más traducidos? ¿De qué países?<br /><br />Las respuestas a éstas y otras preguntas las da la Doctora Mónica Lou Yu en su libro “Paisajes exóticos-Un recorrido gráfico de la literatura latinoamericana en China” (异乡的风景-图说拉美文学在中国), editado por Blossom Press (朝华出版社) y presentado el pasado lunes 29 de enero en Beijing.<br /><br />Pero el libro de Lou Yu -en edición bilingüe chino/español- no es sólo es una fría recopilación de estadísticas, sino un estudio académico, con muy interesantes datos, información y análisis y reflexiones sobre la historia de las publicaciones en chino de escritores de América Latina y el Caribe.</span><div><span style="font-size: large;"><br /></span></div><div><div class="separator" style="clear: both; text-align: center;"><a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEiAvvGxgJUuvVi7G6UxojOYNIMS3ssA8l8XZKKnpbddzfQc2_HYAah2FFesaPZ8YGR0pJShOaFDouxNuFCua4fqCRxBqHFzg4MHQeEIrVHd40lWybGxI5p6IUpmHCTMYoDr3DAyEN5jctSudZJyfrVcVqa_agVnAfneQtz0kRyRC_WjHYKSTkf4WbVv7ZtJ/s3023/Libro%20Lou%20Yu.PNG" imageanchor="1" style="margin-left: 1em; margin-right: 1em;"><img border="0" data-original-height="3023" data-original-width="3023" height="640" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEiAvvGxgJUuvVi7G6UxojOYNIMS3ssA8l8XZKKnpbddzfQc2_HYAah2FFesaPZ8YGR0pJShOaFDouxNuFCua4fqCRxBqHFzg4MHQeEIrVHd40lWybGxI5p6IUpmHCTMYoDr3DAyEN5jctSudZJyfrVcVqa_agVnAfneQtz0kRyRC_WjHYKSTkf4WbVv7ZtJ/w640-h640/Libro%20Lou%20Yu.PNG" width="640" /></a></div><br /><span style="font-size: large;"><br />No es la primera vez que Lou Yu -doctorada en Literatura Latinoamericana e investigadora del Instituto de Estudios Latinoamericanos de la Academia China de Ciencias Sociales- se adentra en este campo. Ya en el 2016 había publicado un informe titulado “La presencia de la literatura latinoamericana en China (1949-2016)”.</span><div><span style="font-size: large;"><br /></span></div><div><span style="font-size: large;">Esta vez el libro presentado es más que un “informe”, y abarca el período 1949-2019, o sea los primeros 70 años de vida de la República Popular China. La autora -que aparte de China estudió en España y México- es ella misma traductora -por ejemplo se encargó de la versión en chino de “Respiración Artificial” de Ricardo Piglia- y ha publicado decenas de artículos y traducciones en revistas académicas tanto chinas como extranjeras.<br /><br />Uno de los primeros datos interesantes que encontramos en su obra es que en el período estudiado se publicaron en China 1.037 libros de más de 300 escritores, entre lo cuales no sólo se incluyen aquellos de habla hispana, sino también de países como Haití o Guyana.<br /><br />Lou Yu analiza diferentes aspectos de la presencia de la literatura latinoamericana en China.<br /><br />Lo que hace en primer lugar es dividir en tres períodos los 70 años estudiados. El correspondiente a 1949-1978 (cuando muchas de las obras no fueron traducciones directas, sino del inglés o el ruso); el que va de 1979 -una vez comenzadas las reformas y apertura al exterior de China- a 1999, y por último el que abarca desde el comienzo del siglo XX hasta el 2019.<br /><br /> Al mismo tiempo desglosa cómo a partir de que China se va abriendo al exterior hasta la actualidad las preferencias de las editoriales y de los lectores se van diversificando y cambiando, pasándose de los “clásicos” como Pablo Neruda, Nicolás Guillén o Jorge Amado en los primeros años, al “descubrimiento” de Jorge Borges en la década de los 90 - destaca "la conmoción" que este escritor causó entre los lectores chinos- y a autores del “boom” del “realismo mágico” como Gabriel García Márquez o Mario Vargas Llosa.</span></div><div><span style="font-size: large;"><br /></span></div><div><span style="font-size: large;"><br /></span></div><div><br /><div class="separator" style="clear: both; font-size: x-large; text-align: center;"><a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEi5o_DjmbMj8ikaPUK-LIw-TUR7diLGnvipRNTtyCE9WVKfpL9pMiwDoSv0AQSyA38prZJuP3SZPBSFSDGtv_DJOXtpcBNKZbBj8XoK7xApxJID3yCiyMTmJ0yqogzyn6IY2JPc7X0eMDzZTOHPK793cajWOe36FtIquccJLBN8qdiV4Ca7aO0zDa7rH0VA/s1280/Monica.JPG" imageanchor="1" style="margin-left: 1em; margin-right: 1em;"><img border="0" data-original-height="960" data-original-width="1280" height="300" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEi5o_DjmbMj8ikaPUK-LIw-TUR7diLGnvipRNTtyCE9WVKfpL9pMiwDoSv0AQSyA38prZJuP3SZPBSFSDGtv_DJOXtpcBNKZbBj8XoK7xApxJID3yCiyMTmJ0yqogzyn6IY2JPc7X0eMDzZTOHPK793cajWOe36FtIquccJLBN8qdiV4Ca7aO0zDa7rH0VA/w400-h300/Monica.JPG" width="400" /></a></div><div style="text-align: center;"> La Dra. Lou Yu en el acto de presentación del libro</div><div style="text-align: center;"> (Foto tomada del canal de WeChat de CECLA)</div><div style="font-size: x-large; text-align: center;"><br /></div></div><div><span style="font-size: large;">Como dice la autora, “en las últimas dos décadas, en especial desde 2013, la publicación de la literatura latinoamericana ha transcurrido entre lo ‘antiguo` y lo ‘nuevo’”, y pone como ejemplo la traducción de obras de escritores “nuevos” o hasta entonces desconocidos para el público chino, como es el caso de Eduardo Galeano o Roberto Bolaño.<br /><br />Por último, llama la atención sobre cómo ha aumentado entre los libros publicados la proporción de escritores jóvenes y de mediana edad, “voces de la literatura latinoamericana contemporánea”, como Alejandro Zambra, Samanta Schweblin, Valeria Luisello o Paulina Flores.<br /><br /> Otro aspecto interesante de la obra de Lou Yu es el análisis que hace sobre la influencia que tuvieron en escritores chinos la literatura latinoamericana en general, y el “realismo mágico” en particular. Cita en concreto a Mo Yan -Premio Nobel de Literatura en el 2012- y a Yan Lianke, quienes han reconocido la influencia que el “realismo mágico” tuvo en sus carreras literarias.<br /><br />Pero aparte del análisis sobre las traducciones, el libro dedica un espacio especial a analizar y proporcionar información sobre los estudios publicados en China sobre la literatura latinoamericana en general y sobre algunos autores concretos, incluyendo en algunos casos biografías de estos (Gabriel García Márquez, Jorge Luis Borges, Juan Rulfo o Mario Vargas Llosa entre otros).<br /><br />El estudio es tan completo que hace una reseña de los principales traductores chinos, las editoriales del país que han publicado obras latinoamericanas, los autores más publicados, los países con más publicaciones de sus escritores y un largo etcétera y toca temas tan interesantes como el de los derechos de autor.<br /><br />Por último, pero no menos importante en absoluto, es que aparte de toda una serie de interesantes gráficos, el libro dedica nada más y nada menos que 270 páginas a un “Catálogo bibliográfico de la literatura china latinoamericana publicada en China”, que incluye, ordenados por países, los nombres del autor, el título original, el traductor, la editorial, el año de publicación y … las portadas en color de todos y cada uno de esos libros.<br /><br />En diálogo con este autor, Lou Yu reconoce que la parte más difícil de su trabajo fue la de encontrar las tapas de todos y cada uno de los libros, “sobre todo los publicados en los años 50, 60 y 70”. Esas 270 páginas a color son como para hacer un mosaico colorido sobre la literatura latinoamericana en China.<br /><br />Otro anexo interesante es el “Catálogo bibliográfico de las obras de autores chinos sobre la literatura latinoamericana”.<br /><br />En definitiva, creo que es un libro imprescindible para todas aquellas personas e instituciones (Embajadas, Institutos de Enseñanza, Bibliotecas, Institutos de Investigación, etc.) interesadas en los intercambios culturales entre China y América Latina.<br /><br />Por ahora, y lamentablemente, el libro sólo puede adquirirse en China y en las páginas web de 当当 (en el enlace <a href="https://product.dangdang.com/29680984.html">https://product.dangdang.com/29680984.html</a>) y de 京东, aunque en esta última hay que registrarse.<br /><br />Ojalá, bien por los esfuerzos de editoriales y/o instituciones chinas o latinoamericanas, este libro de gran valor pueda estar al alcance de los lectores en América Latina, España, y en aquellos lugares del mundo donde haya personas o instituciones interesadas en el tema de la literatura latinoamericana en China.<br /><br />Y para terminar, volvemos al comienzo: la primera obra de un escritor latinoamericano que se publicó en la República Popular China fue “Que despierte el leñador” de Pablo Neruda, traducida del inglés y publicada en 1950, cuando la República Popular China acababa de nacer. Detalles tan interesantes como éste son los que el lector encontrará con facilidad en esta importante obra. </span></div></div><div><span style="font-size: large;"><br /></span></div><div><span style="font-size: large;"><br /></span></div><div><span style="font-size: large;"><br /></span></div><div><span style="font-size: large;"><br /></span></div><div><span style="font-size: large;"><br /></span></div><div><span style="font-size: large;"><br /></span></div>Unknownnoreply@blogger.com0tag:blogger.com,1999:blog-1444445772269538580.post-72409220134280463872024-01-27T03:27:00.033+01:002024-01-28T05:52:08.855+01:00"Año del Dragón", o "Año del Dragón de Madera" <p><span style="font-family: arial; font-size: x-large;">Se acerca la Fiesta de la Primavera en China, y según el Calendario Agrícola, el país entrará en "el Año del Dragón". Y en páginas y textos de organizaciones y personas interesadas por China y su cultura fuera del país, ya estamos viendo referencias al "Dragón de Madera".....</span></p><p><span style="font-family: arial; font-size: x-large;">Todos los años pasa lo mismo; fuera de China -por lo menos en nuestro mundo de habla hispana- detrás de cada uno de los 12 animales que componen el calendario agrícola es normal ver que se agrega un "de metal, de fuego, de madera, de agua, de tierra".</span></p><p><span style="font-family: arial; font-size: x-large;">No me considero un experto en China pero llevo 48 años relacionado con China, donde ya en 1976 pasé mi primera Fiesta de la Primavera -precisamente cuando entró un Año del Dragón- y ahora estoy a punto de entrar en mi quinto año de este animal mitológico tan relacionado con la cultura china.</span></p><p><span style="font-family: arial; font-size: x-large;">Muchas cosas de este país de cultura milenaria son "complicadas" y difíciles de entender para quienes venimos de América Latina y España. Pero a veces se trata de tener sentido común y aplicar aquello de "donde fueres, haz lo que vieres" y no complicar más las cosas.</span></p><p><span style="font-family: arial; font-size: x-large;">Llevo algunos días en Beijing, y todas las referencias que veo sobre este año nuevo sólo hablan de "龙年", "Año del Dragón" o "Year of the Dragon". Antes de llegar a Beijing estuve en Singapur y las referencias eran las mismas que en la República Popular.</span></p><p><span style="font-family: arial; font-size: x-large;">La palabra 龙年 , y sólo 龙年, es la aparece en los discursos, en los artículos, en los carteles de la calle, en los programas de radio y televisión, en las tiendas, en la publicidad, en los mensajes de felicitación, en los calendiarios y un largo etcétera. Y "Año del Dragón" es la palabra que aparece en las ediciones en español de publicaciones como "El Diario del Pueblo", "China Hoy" u otras publicaciones oficiales.</span></p><p><span style="font-family: arial; font-size: x-large;">En ningún lado, en ninguna ocasión de las citadas, he visto una sola referencia al "Año del Dragón de Madera".</span></p><p><span style="font-family: arial; font-size: x-large;">Entonces, eso del "Año del Dragón de madera" ¿es un "invento"? No, en realidad, sí existe una relación entre este Año del Dragón y los llamados cinco elementos (metal, madera, fuego, agua y tierra), que son parte de la filosofía china y tienen relación con la astrología o la medicina china.</span></p><p><span style="font-family: arial; font-size: x-large;">Y efectivamente el año que empieza el 10 de febrero tiene uno de los 10 troncos ( 十干), una de las 12 ramas ( 十二支) y uno de los cinco elementos (五行), en este caso la madera. </span></p><p><span style="font-family: arial; font-size: x-large;">Lo que pasa es que eso no se usa a la hora de hablar del año que empieza o de felicitar, sino más bien para definir el destino (命) de la persona que nacerá este año. Por eso se puede hablar de <span style="background-color: white;">木龙命</span><span style="background-color: white;"> (el "destino" del dragón de madera), pero no se habla del </span><span style="background-color: white;">木龙年. O sea, lo del elemento madera sí es importante para la gente que crea en los "horóscopos chinos", incluidos millones de habitantes del país; pero no a la hora de denominar el año y celebrarlo. </span></span></p><p><span style="background-color: white;"><span style="font-family: arial; font-size: x-large;">Pero, como hemos dicho, la cultura china es "complicada", y el tema de los troncos, las ramas y los elementos exigiría una explicación mucha más profunda y detallada.</span></span></p><p><span style="background-color: white;"><span style="font-family: arial; font-size: x-large;">Al igual que hacemos con las fiestas de otras civilizaciones y culturas de nuestro ancho mundo, llamémoslas como lo hacen los pueblos de las mismas. ¿Por qué tenemos que utilizar expresiones que no usan los pueblos de esas civilizaciones para hablar de sus fiestas tradicionales? Sin pretender ofender a nadie, ¿no es un poco una posición de "superioridad" el querer decirle a los chinos -de todo el Planeta- qué es lo que ellos festejan?</span></span></p><p><span style="background-color: white;"><span style="font-family: arial; font-size: x-large;">Espero no haber ofendido con este comentario a tanta gente e instituciones que con mucha buena voluntad hacen esfuerzos para acercar la cultura china a nuestro mundo de habla hispana. </span></span></p><p><span style="font-family: arial; font-size: x-large;"><span style="background-color: white;">No me considero "dueño" de la verdad absoluta y lo que pretendo -no sé si con acierto o no- es aclarar -desde mi muy modesto punto de vista y desde mi experiencia- un tema tan importante en la cultura china. </span></span></p><p><span style="background-color: white;"><span style="font-family: arial; font-size: x-large;">Por supuesto estas páginas están abiertas para cualquier comentario o crítica. </span></span></p>Unknownnoreply@blogger.com0tag:blogger.com,1999:blog-1444445772269538580.post-86889277357210446502024-01-02T20:14:00.007+01:002024-01-02T20:17:57.492+01:00In Memoriam Dong Yansheng<p><span style="font-size: x-large;">Con profundo dolor acabo de recibir la noticia del fallecimiento de Dong Yansheng. La lista de adjetivos para calificar a este Gran Hombre (sí, con mayúsculas) sería interminable, y por eso prefiero, como desde el día que le conocí hace ya casi medio siglo llamarle "el tío Tom".</span></p><p><span style="font-size: x-large;">Era 1975, yo acababa de llegar a Beijing con mi familia, y fue uno de los primeros ciudadanos chinos que conocí -junto también a la prestigiosa profesora Cen Chulan- que hablaban español, algo que a mí me pareció "normal". Yo tenía solo 17 años, nunca había salido del Río de la Plata y por eso no me resultó extraño encontrar gente que lo hablase, aunque yo estuviese al otro lado del mundo.</span></p><p><span style="font-size: x-large;">Desde el primer día descubrí una persona muy simpática y con mucho sentido del humor, ese mismo sentido del humor con el cual nos decía que le llamásemos "el tío Tom". </span></p><p><span style="font-size: x-large;">Y así le llamé siempre cuando hablaba con él o le escribía ya por WeChat durante las décadas en las cuales estuve en contacto con él. Además era una de las pocas personas con las cuales yo no pronunciaba una sola palabra en chino.</span></p><p><span style="font-size: x-large;">¿Qué voy a contar de Dong Yansheng que cualquier persona relacionada con los mundos de habla hispana y china no sepan? ¿Qué fue uno de los pioneros en la enseñanza de la lengua de Cervantes en China? ¿Que fue quien hizo una traducción directa de "El Quijote" ? ¿Que escribió tantos manuales? </span></p><p><span style="font-size: x-large;">Fueron muchos los premios y condecoraciones que recibió, pero como los verdaderos sabios -sí, sin comillas- siempre fue una persona modesta, sencilla. Si coincidía con él en algún acto oficial en España o China siempre podíamos charlar un ratito, y siempre me contaba algún chiste.</span></p><p><span style="font-size: x-large;">Aún conservo en el WeChat un mensaje "Me acaban de enviar un chiste que casi me mata de risa"...y terminaba diciendo "No te rías solo...pásalo a tus grandes amigos".</span></p><p><br /></p><p></p><div class="separator" style="clear: both; text-align: center;"><a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEgb4PRgWgzND9pzoUOqqp0_58HXTk9xGb_-38_iSjxpMxJUKE0_sqdIT72hvfZh2hx3M3ITDIb4CHWWGCh-b4Mr8cQjRAbkzI0u-lxg6q0WXHa0U-mLOieei0Qhjpjz_ULBN-qKsKL-KCYTsimpeL0mlWNznB9IdMiydrVNyVloEjtqCuoBDEXar88inDrn/s2048/Tio%20Tom.jpg" style="margin-left: 1em; margin-right: 1em;"><img border="0" data-original-height="1536" data-original-width="2048" height="300" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEgb4PRgWgzND9pzoUOqqp0_58HXTk9xGb_-38_iSjxpMxJUKE0_sqdIT72hvfZh2hx3M3ITDIb4CHWWGCh-b4Mr8cQjRAbkzI0u-lxg6q0WXHa0U-mLOieei0Qhjpjz_ULBN-qKsKL-KCYTsimpeL0mlWNznB9IdMiydrVNyVloEjtqCuoBDEXar88inDrn/w400-h300/Tio%20Tom.jpg" width="400" /></a></div><div style="text-align: center;">Años atrás en el Instituto Cervantes de Beijing</div><span style="font-size: large;"><br /></span><p></p><p><span style="font-size: x-large;">No buscaba fama ni riquezas y por eso cuando se jubiló tuvo el gran gesto de crear una Fundación para "la excelencia docente y la investigación". </span></p><p><br /></p><p></p><div class="separator" style="clear: both; text-align: center;"><a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEg_FnNz7CVOS5gMo84WoVXB388K959wKHKI-pxajkPoDVOYYcwWs4dffrSzRCTbKvu9yo49f1P1DzZjZ708VLboqUCbjrjUSAQ3vShyTeW8u56JITllImy8Ve4C6yjxpOBACps2GrwtNKWzypTPGH3g5f_hZYefp5N82Km8q_L9yAxXsejdaFHL0AB-fUM7/s1440/Fundaci%C3%B3n.JPG" style="margin-left: 1em; margin-right: 1em;"><img alt="Junto a la profesora Cen Chulan, otra de las pioneras en la enseñanza del español en China" border="0" data-original-height="1080" data-original-width="1440" height="300" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEg_FnNz7CVOS5gMo84WoVXB388K959wKHKI-pxajkPoDVOYYcwWs4dffrSzRCTbKvu9yo49f1P1DzZjZ708VLboqUCbjrjUSAQ3vShyTeW8u56JITllImy8Ve4C6yjxpOBACps2GrwtNKWzypTPGH3g5f_hZYefp5N82Km8q_L9yAxXsejdaFHL0AB-fUM7/w400-h300/Fundaci%C3%B3n.JPG" width="400" /></a></div><div style="text-align: center;">Junto a la profesora Cen Chulan, otra de las pioneras</div><div style="text-align: center;"> en la enseñanza del español en China</div><div style="text-align: center;"><br /></div><div style="text-align: left;"><br /></div><span style="font-size: x-large;">El periodista uruguayo Eduardo Delgado, del canal de televisión TV-Ciudad de Montevideo, tuvo el gran privilegio de entrevistarlo en el 2022 en su casa de Beijing, en lo que fue la última entrevista que concedió a un medio de prensa.</span><p></p><p><span style="font-size: x-large;">Hoy Eduardo Delgado ha vuelto a poner en las redes el enlace de esa entrevista, con la cual me emociono hoy al verla, y que dejo a disposición de los lectores en <a href="https://m.youtube.com/watch?si=KJtuvEFnKQ8tikyb&v=GnGWJ7fLLyE&feature=youtu.be" target="_blank">este enlace</a></span></p><p><span style="font-size: x-large;">¿Por qué se nos tienen que ir los buenos?</span></p><p><span style="font-size: x-large;">Descansa en paz, querido tío Tom. Ya nos encontraremos en algún momento, en otro lugar, y disfrutaré hablando contigo y escuchando tus chistes.</span></p><p><br /></p>Unknownnoreply@blogger.com2tag:blogger.com,1999:blog-1444445772269538580.post-81315199527387501262023-11-28T19:18:00.012+01:002023-11-28T19:49:05.641+01:00Uruguay y China: un sano ejemplo para la diplomacia mundial<p>Después de varios meses de "parón" regreso a estas páginas para comentar la reciente visita a China del presidente uruguayo Luis Lacalle Pou. Al fin y al cabo éstas son unas "Reflexiones Orientales" y el viaje del presidente de la República Oriental a la República Popular en el Oriente no podía faltar en este espacio.</p><p>Empezando por el final, me gustaría decir que la visita del mandatario uruguayo fue muy exitosa en todos los aspectos y muy necesaria ya que habían pasado siete años desde la anterior visita presidencial, del Dr. Tabaré Vázquez. Además puede considerarse como un broche de oro a un año en que se está celebrando el 35º aniversario del establecimiento de relaciones diplomáticas entre ambos países.</p><p>Las cosas han cambiado mucho -para mejor- en los últimos siete años, y hemos visto un gran salto adelante en las relaciones a todos los niveles, desde el punto de vista cuantitativo pero, más importante, en lo cualitativo.</p><p><br /></p><div class="separator" style="clear: both; text-align: center;"><a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEghTkdiWJBhvKVQiXhAReHFCahnTZAPdePVBWy1VQNgzxpuNoHynRayswvMHmxus5Sk1ZR8EoaGPqHeXOxqSn3zJ04WIwin_O22jNpUVjHW0iHve3qODxUo3O5n9ER7gm8rmsggDmVZ-kgiLERvw8tshEKZwqRaAIim9ocbM7gCSaqhryMzfz3uyPbpsnLZ/s1080/Foto%20Lacalle%20Xi.JPG" style="margin-left: 1em; margin-right: 1em;"><img border="0" data-original-height="720" data-original-width="1080" height="266" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEghTkdiWJBhvKVQiXhAReHFCahnTZAPdePVBWy1VQNgzxpuNoHynRayswvMHmxus5Sk1ZR8EoaGPqHeXOxqSn3zJ04WIwin_O22jNpUVjHW0iHve3qODxUo3O5n9ER7gm8rmsggDmVZ-kgiLERvw8tshEKZwqRaAIim9ocbM7gCSaqhryMzfz3uyPbpsnLZ/w400-h266/Foto%20Lacalle%20Xi.JPG" width="400" /></a></div><br /><p><br /></p><p>Uruguay cuenta ahora con una mayor presencia oficial en China gracias a la inauguración de los consulados en Guangzhou en el 2019, y en Chongqing un año más tarde. Hasta entonces, y desde el 2003, sólo contaba con el consulado de Shanghai en la parte continental de China. Entre otras, también hay una Oficina del INAC (Instituto Nacional de Carnes), recién inaugurada en la capital del país. </p><p>La embajada uruguaya en la capital china y sus tres consulados han realizado en estos últimos años una brillante labor de promoción, en especial, pero no sólo, con un muy inteligente y activo uso de las redes sociales chinas, para que en China se conozca más nuestro país, su arte y cultura, su gastronomía y sus atractivos turísticos entre muchas otras cosas.</p><p>Puedo decir que Uruguay, y en especial su embajador Fernando Lugris, tiene una presencia en los medios de comunicación chinos mucho superior a lo que es nuetro país demográficamente -un barrio de Beijing- y en comparación con muchos de nuestros vecinos continentales con una historia mucho más dilatada de relaciones oficiales con la República Popular.</p><p>En lo comercial, aparte de producos ya tradicionales de los últimos años como carne o los lácteos -CONAPROLE ya había abierto una Oficina de China en el año 2013- en los últimos años se está trabajando seriamente para que otros productos uruguayos sean conocidos en el país, entre ellos los vinos. En lo oficial, China ha ido habitando paultinamente la entrada de otros productos tradicionales de las exportaciones uruguayas -uno de los últimos ejemplos ha sido el sorgo este mismo año- al tiempo que, aparte de la carne o soja, es de destacar el importante papel que juega la celulosa o la leche en polvo en las ventas al país</p><p>Tampoco debemos olvidarnos que el fútbol es el "arma mágina" para que diversos aspectos de Uruguay y sus productos sean conocidos hasta en el último rincón del país. Esta "arma márgina" ha sido utilizada con inteligencia por la embajada de Uruguay durante la participación en ferias especializadas o en viajes institucionales por el interior del país. Recuerdo con orgullo, que cuando llegué a China con 17 años de edad en 1975, al decir que era uruguayo, la gente relacionaba el nombre de "Wulagui" con el fúlbol.</p><p>Para terminar este breve resumen, no podemos dejar de mencionar un aspecto político muy importante: la adhesión de Uruguay en el 2018 al proyecto de "La Franja o la Ruta" (o para simplicar "la nueva Ruta de la Seda") una inciciativa del presidente Xi Jinping.</p><p>En este contexto, la visita de Lacalle Pou podríamos decir que era algo "imprescindible" y sus positivos resultados marcan el comienzo de una nueva etapa en las relaciones bilaterales, que han subido un gran escalón en lo político, económico y comercial, cooperación científica y educativa, entre tantos otros.</p><p>Uno de los resultados más importantes de la visita es la decisión de ambos gobiernos de establecer una Asociación Estratégica Global. Este proceso había comenzado en el año 2016, como consecuencia de la visita del Dr. Tabaré Vázquez a China, cuando se decide establecer una Asociación Estratégica y que ahora ambas partes deciden "elevarla" y llevarle al campo de lo global. No se trata de un simple cambio de palabras, ya que la ahora acordada Asociación Estratégica Global es el máximo nivel que pueden alcanzar las relaciones diplomáticas entre China y otros países. </p><p>En el aspecto comercial bilateral, entre otras cosas, se logró ampliar la gama de productos qiue van a poder entrar al mercado chino y se decidió reducir los plazos administrativos para la exportación de ciertos productos. Esto tendrá un importante efecto paras incrementar el valor de las ventas uruguayas.</p><p>Como es sabido, el presidente Lacalle Pou ha sido y es un firme defensor del libre comercio, y en el caso concreto de China se ha propuesto casi desde la asunción de su mandato la concreción de un Tratado de Libre Comercio (TLC) con la República Popular, pero ha tenido y tiene que enfrentarse a la oposición de Argentina y Brasil que desde el Mercosur pretenden aferrarse -en mi modesta opinión- a un modelo de integración obsoleta y que en la práctica no ha tradido muchos beneficios al país. Y, lo que es para mí peor, a las críticas de una oposición que parece que pensara en ello de "estaré en contra de todo aquello en lo cual esté a favor el presidente". Como si lo del TCL no hubiese sido algo de lo cual se empezó a hablar durante el gobierno del Dr. Tabaré Vazquez del, ahora en la oposición, Frente Amplio.</p><p>Mientras que en el Comunicado Conjunto se menciona que ambas partes "se congratulan por la finalización del Estudio Conjunto de Factibilidad sobre un posible Tratado de Libre Comercio Uruguay-China" -es importante que esto se haya reflejado en los documentos firmados- se reafirma la disposición a promover la construcción de una "asociación de libre comercio" al tiempo que se reafirma que están dispuestas a "promover el diàlogo en materia de libre comercio entre el Mercosur y China". Una fórmula diplomática, en mi opinión, de apoyo a Uruguay en sus asperaciones, pero sin ofender a los dos socios de Mercosur que también mantienen buenas relaciones diplomáticas con Beijing: Argentina y Brasil. Un detalle no menor al respecto es que Paraguay, miembro de Mercosur, no tiene relaciones diplomáticas con China lo cual, entre otros muchos factores, podría retrasar, no se sabe hasta cuándo, la concreción de ese acuerdo. Es interesante que se habla de Mercosur-China y no de diálogo en materia de libre comercio entre los miembros del Mercosur y China.</p><p>Como resultado de la visita se firmaron más de veinte acuerdos, algunos de ellos muy destacados como el incremento del número de becas para que jóvenes uruguayos estudien en China; la cooperación en el ámbito de la agricultura, y de la ciencia y tecnología agrícola.</p><p>La mención al "libre comercio" estuvo presente en muchos de los discursos del presidente uruguayo, y en este sentido ambas partes destacaron la importancia del mismo en el escenario internacional.</p><p>Aparte de los miembros del gobierno que formaron parte de la delegación oficial, el presidente Lacalle Pou estuvo acompañado por empresarios y destacados investigadores, y en su estancia en Beijing tuvo oportunidad de contacatar con representantes de empresas uruguayas en China así como de la cada vez mayor colonia oriental en el país.</p><p>En un mundo cada vez más dividido en extremos, donde parece que existiera sólo el negro y el blanco, y en cual China es una fiel partidaria de la multipolaridad en las relaciones internacionales, el caso de Uruguay y China merece una mención especial como una muestra de que países con diferencias demográficas, territoriales, culturales, históricas y sobretodo de sistemas políticos, pueden "llevarse bien" y llegar a acuerdos en beneficio mutuo. </p><p>Las relaciones entre Uruguay y China desmontan la teoría de algunos medios de prensa, gobiernos y organismos occidentales que sin tapujos hablan de que China estaría "colonizando" América Latina. Por cierto son muchos de esos gobiernos y organismos internacionales, como la Unión Europea, quienes cierran las puertas a la entrada de productos latinoamericanos que sin embargo sí se pueden exportar a China.</p><p>Desde el establecimiento de relaciones diplomáticos hace ya 35 años, todos los presidentes de las tres principales fuerzas politicas que han gobernado y gobiernan Uruguay han visitado China. Las relaciones con China han favorecido a Uruguay en todos y cada uno de esos gobiernos. </p><p>Es una pena que, dentro de un marco cada vez más radicalizado en la política interna uruguaya, desde la oposición se haya criticado desde el principio la iniciativa del presidente Lacalle Pou de "abrirse al mundo", al tiempo que no se hayan celebrado -más bien al contrario- los logros obtenidos por esta visita.</p><p><br /></p>Unknownnoreply@blogger.com0tag:blogger.com,1999:blog-1444445772269538580.post-33713896747316076172023-06-10T08:34:00.020+02:002023-06-10T08:40:15.159+02:00In Memorian Fernando Pastrano<p><span style="font-family: inherit; font-size: large;">Fue un verdadero golpe para mí enterarme de la muerte súbita de Fernando Pastrano. En los años que llevo relacionado con España me di cuenta que su nombre era desconocido para la gran mayoría de los sinófilos y observadores de China.</span></p><p><span style="font-family: inherit; font-size: large;">Nunca lo vi en ninguna de las tantas conferencias que en las últimas décadas se vienen realizando sobre temas relacionados con el país asiático y nunca vi que se hiciera referencia a su nombre cuando se hablaba de los "expertos" de Asia en general y China en particular.</span></p><p><span style="font-family: inherit; font-size: large;"><br /></span></p><p></p><div class="separator" style="clear: both; text-align: center;"><a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEj24FM9hgL73Vly1jpmGLxqXEhLaQndLWBgLVmlNV3XIkeTO6AIQOCQtZ2Nl0SAPdYmHV1mG63bwAfdLWNe8nIrkbHh_bv9RO0zoIwYJ-57_jpQZRYByUtCJWRqsBzr0wfKBwt3LW11LVMpMxInfeGIteX7SazMKrbARk9CgPdVXJmuuJpmPSF6h5wN0A/s1682/Con%20Fernando%20Pastrano.jpg" style="margin-left: 1em; margin-right: 1em;"><img border="0" data-original-height="1170" data-original-width="1682" height="279" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEj24FM9hgL73Vly1jpmGLxqXEhLaQndLWBgLVmlNV3XIkeTO6AIQOCQtZ2Nl0SAPdYmHV1mG63bwAfdLWNe8nIrkbHh_bv9RO0zoIwYJ-57_jpQZRYByUtCJWRqsBzr0wfKBwt3LW11LVMpMxInfeGIteX7SazMKrbARk9CgPdVXJmuuJpmPSF6h5wN0A/w400-h279/Con%20Fernando%20Pastrano.jpg" width="400" /></a></div><p></p><p><span style="font-family: inherit; font-size: large;"><br /></span></p><p><span style="font-family: inherit; font-size: large;">Sin embargo era un enamorado, seguidor desde hace más de medio siglo, y conocedor de China y Asia en general, en especial de su historia y aspectos culturales.</span></p><p><span style="font-family: inherit; font-size: large;">En enero del 2019 en mis Reflexiones Orientales escribí un artículo titulado <a href="http://www.pablo-rovetta.com/2019/01/pioneros-de-la-prensa-espanola-en-asia.html" target="_blank">Pioneros de la prensa española en Asia</a> donde recordaba lo siguiente:</span></p><p><span style="font-family: inherit; font-size: large;"><i><span style="background-color: white; color: #434343; text-align: justify;">"...el caso de </span><b style="background-color: white; color: #434343; text-align: justify;">Fernando Pastrano</b><span style="background-color: white; color: #434343; text-align: justify;"> es bastante "especial", y no sé si lo suficientemente conocido. Ya en el año 1972 hizo su tesis de carrera sobre China, titulada </span><b style="background-color: white; color: #434343; text-align: justify;">"China, tercera potencia en juego"</b><span style="background-color: white; color: #434343; text-align: justify;">. Seguro que más de uno pensó que estaba loco, y él confiesa que "fue criticado" por esa tesis. Lo que está claro es la visión que tuvo hace ya </span><b style="background-color: white; color: #434343; text-align: justify;">47 años</b><span style="background-color: white; color: #434343; text-align: justify;"> y que como reconoce, se "quedó corto". Aunque entra a trabajar en ABC en 1971 es recién a partir de 1978 cuando empieza a escribir sobre China y Asia en general. En concreto el 16 de Junio de 1978, un ABC que ese día sacó una edición de 110 páginas -algo impensable en el mundo actual- dedicó más de dos a la visita de los Reyes a China. Fernando Pastrano escribe </span><b style="background-color: white; color: #434343; text-align: justify;">"Cuatro siglos de mutuo desconocimiento"</b><span style="background-color: white; color: #434343; text-align: justify;"> -algo que en mi opinión sigue siendo válido- y en el periódico se habla de las relaciones históricas bilaterales así como de </span><b style="background-color: white; color: #434343; text-align: justify;">las primeras empresas españolas</b><span style="background-color: white; color: #434343; text-align: justify;"> que a principios de los años setenta, en concreto</span><b style="background-color: white; color: #434343; text-align: justify;"> Spanish East Asia Lt</b><span style="background-color: white; color: #434343; text-align: justify;">. y </span><b style="background-color: white; color: #434343; text-align: justify;">Spanish Trading Comp. Ltd,</b><span style="background-color: white; color: #434343; text-align: justify;"> comienzan desde Hong Kong a dedicarse al comercio entre España y China."</span></i></span></p><p><span style="font-family: inherit; font-size: large;">Tuve el privilegio de conocer a Fernando, y a su esposa Pilar Arcos, en el año 1985 en el "Hotel de la Amistad" de Beijing. Gracias a un acuerdo entre "ABC" y la entonces llamadas "China Reconstruye" (hoy conocida como "China Hoy"), Pastrano se convirtió en el primer corresponsal de un diario español en China.</span></p><p><span style="font-family: inherit; font-size: large;">Eran años de telex (no sé si los más jóvenes saben qué era), y muchas veces compartía con Fernando el ómnibus que todos los días por la tarde salía del Hotel hasta la Tienda de la Amistad. Él se bajaba en una parada que había en Radio Pekín y se dirigía a "la torre de las comunicaciones", en la avenida principal de la capital china, desde donde enviaba a ABC los artículos que escribía.</span></p><p><span style="font-family: inherit; font-size: large;">Todos los que tuvimos la oportunidad de conocer a Fernando y Pilar esos años tenemos un muy grato recuerdo de ellos; gente buena, amable, y siempre con una sonrisa en la boca.</span></p><p><span style="font-family: inherit; font-size: large;">Las vueltas de la vida nos separaron físicamente, pero gracias a las redes sociales (algo bueno sí que tienen) volvimos a establecer un muy fluido contacto y coincidimos muchas veces en actos sociales.</span></p><p><span style="font-size: large;">Cuando en el año 2009 deja la redacción de ABC comienza a dedicarse al periodismo de viaje. Yo seguía su blog "Mamá, quiero ser turista", y cuando sabía que iba a salir un reportaje de él en "ABC Viajar" iba a un kiosco para comprar la edición en papel y leer su artículo, muchas veces acompañados por fotos de Pilar.</span></p><p><span style="background-color: white; color: #050505; white-space-collapse: preserve;"><span style="font-family: inherit; font-size: large;">Sabía mucho, muchísimo, sobre China y Asia, y como buen "sabio" era modesto y no intentaba destacar. </span></span></p><p><span style="font-size: large;">Hace sólo pocos meses, en abril, viajó a Uzbequistán y publicó unos maravillosos reportajes sobre Samarcanda. Días atrás escribía en FaceBook <i>"</i></span><span style="font-family: inherit; font-size: large;"><span style="background-color: white; color: #050505; white-space-collapse: preserve;"><i>Justo hace cuatro años, un día como hoy (31 de mayo), volaba a Shanghái. Desde entonces no he vuelto y ya va siendo hora. Como decía Mecano "¿Cuándo podré ir a Shanghái. Ay?" (¡O era a Bombay? Bueno, es lo mismo)"</i></span></span></p><p><span style="color: #050505; font-size: large;"><span style="background-color: white; white-space-collapse: preserve;">Este año se cumple medio siglo desde el establecimiento de relaciones diplomáticas entre España y la República Popular China. La tesis de graduación de Fernando Pastrano, sobre China, fue publicada en 1972 o sea que su relación y conocimiento del país asiático es anterior.</span></span></p><p><span style="color: #050505; font-size: large;"><span style="background-color: white; white-space-collapse: preserve;">Ojalá que el nombre de Fernando Pastrano y su trayectoria periodística puedan ser más conocidas, reconocidas y recordadas en este mundo desmemoriado, donde ya todo es rápido y corto. ¡Cuánto te vamos a extrañar!</span></span></p><p><span style="color: #050505; font-size: large;"><span style="background-color: white; white-space-collapse: preserve;">Mis sinceras condolencias a Pilar y a toda su familia, amigos y compañeros de trabajo. Descance en paz. </span></span></p><p><span style="color: #050505; font-size: large;"><span style="background-color: white; white-space-collapse: preserve;">@PabloRovetta</span></span></p>Unknownnoreply@blogger.com0tag:blogger.com,1999:blog-1444445772269538580.post-2290851713601138542023-03-08T22:54:00.017+01:002023-03-19T12:53:23.329+01:00Medio siglo de relaciones diplomáticas entre España y China<p><span style="font-family: inherit; font-size: large;">Este mes se cumplen cincuenta años desde el establecimiento de relaciones diplomáticas entre España y la República Popular China. Y de ese medio siglo, llevo cuarenta años de mi vida profesional dedicado principalmente a las relaciones entre ambos países.</span></p><p><span style="font-family: inherit; font-size: large;">Como decimos en el encabezamiento de este blog: "esta página pretende reflexionar, contar, compartir pensamientos, historias y experiencias de China, de ayer y del presente"; y por eso no podía dejar pasar por alto este aniversario, y hacer algunas reflexiones.</span></p><p><span></span></p><a name='more'></a><p></p><p><span style="font-family: inherit; font-size: large;"><span>Concentrándonos en el aspecto económico y comercial, es un hecho que, con el paso de los años, el entusiasmo que algunas empresas e instituciones y la sociedad en general en España mostraron por China y su mercado, en especial desde la década de los años 80 del siglo pasado, ha ido desapareciendo </span>de forma paulatina en los últimos años. Ya no vemos como antes titulares hablando de la "conquista del mercado chino".</span></p><p><span style="font-family: inherit; font-size: large;">Y en cierta medida, ese entusiasmo se ha transformado en un sentimiento de animadversión en la prensa en general, en algunas instituciones y entre algunos llamados "expertos" que hasta hace algunos años atrás apoyaban con entusiasmo el proceso que estaba viviendo la República Popular así como las posibilidades de negocios.</span></p><p><span style="font-family: inherit; font-size: large;">Si me permiten una expresión popular podríamos decir que la República Popular ha pasado a ser para algunos "el malo de la película" y un país que estaría "contra el mundo" y con una política exterior "menos acorde con las normas del orden internacional".</span></p><p><span style="font-family: inherit; font-size: large;"><br /></span></p><p></p><div class="separator" style="clear: both; text-align: center;"><a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEgvKGXbGeFLGkdy5xLM-uCbxcmtuFfAZAKg0B4mt8rT6TsvlyakivFKUNyPLq8vSq-Zhp0wa7Q1prkSx5vx9BUKuOQoQqCgwNOe7VHrc3PJ_buHW56Dp3K5e8THz6vX1eYw2wTh0VVE05CVTnCETNsneXo48DN37fh9rOdJA0DlgvxqeGqYkXoIkU_6zg/s275/bandera-espa%C3%B1a-china.jpg" style="margin-left: 1em; margin-right: 1em;"><img border="0" data-original-height="135" data-original-width="275" height="157" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEgvKGXbGeFLGkdy5xLM-uCbxcmtuFfAZAKg0B4mt8rT6TsvlyakivFKUNyPLq8vSq-Zhp0wa7Q1prkSx5vx9BUKuOQoQqCgwNOe7VHrc3PJ_buHW56Dp3K5e8THz6vX1eYw2wTh0VVE05CVTnCETNsneXo48DN37fh9rOdJA0DlgvxqeGqYkXoIkU_6zg/w320-h157/bandera-espa%C3%B1a-china.jpg" width="320" /></a></div><br /><span style="font-family: inherit; font-size: large;"><br /></span><p></p><p><span style="font-family: inherit; font-size: large;">Es verdad que la crisis de la Covid-19, y el tratamiento dado por gran parte de la prensa internacional, ha sido una de las causas de esta situación. Tampoco podemos dejar de indicar que los medios de comunicación chinos han fallado, y lo siguen haciendo, en la tarea de explicar al mundo, en un lenguaje comprensible para los habitantes de diferentes países y regiones, la situación de China y sus políticas.</span></p><p><span style="font-family: inherit; font-size: large;">Sin embargo, y a pesar de eso, creo que dos han sido los motivos principales de este cambio de actitud hacia el país asiático.</span></p><p><span style="font-family: inherit; font-size: large;">En primer lugar, el gran desarrollo económico y social experimentado por China en las últimas décadas, y en especial en los últimos años, la han transformado en un estado fuerte, con una industria muy avanzada. Eso ha hecho que cada vez dependa menos de tecnologías y bienes extranjeros, y por eso la estructura de sus importaciones ha ido cambiando a lo largo de los años. La República Popular ahora fabrica y exporta cosas que en los primeros años de la reforma tenía que comprar del exterior.</span></p><p><span style="font-family: inherit; font-size: large;">Para el mundo en general y España en particular, al tiempo que se fueron cerrando oportunidades de negocio con China, se fueron abriendo otras. La calidad y capacidad de muchas compañías chinas fueron y son, en parte, las verdaderas "trabas" que encontraron muchas empresas españolas para seguir trabajando en ese mercado, o para empezar a hacerlo.</span></p><p><span style="font-family: inherit; font-size: large;">En segundo lugar están los factores políticos. El fortalecimiento de China ha hecho que Estados Unidos y muchos de sus aliados, la vean como una "amenaza" para sus intereses geopolíticos. </span></p><p><span style="font-family: inherit; font-size: large;">Siendo China ya la segunda economía y la primera potencia comercial del mundo, no debería resultar extraño que el país y sus empresas estén muy activos en los mercados internacionales, y en lugares considerados por algunos países desarrollados casi como sus "mercados propios", como puede ser el caso de Africa y América Latina.</span></p><p><span style="font-family: inherit; font-size: large;">Las críticas que se le hacen a China son tan fuertes que ha sido acusada de "colonizar" países de esos continentes. Además, se le critica prácticamente todo: desde el donar vacunas contra la Covid hasta dar becas de estudio. </span></p><p><span style="font-family: inherit; font-size: large;">Lo más "cómico" es que algunos "expertos" critican a China por adoptar en su política comercial internacional instrumentos y formas que la misma España usó en los años 80 y 90 para abrir el mercado chino a sus empresas, como por ejemplo la financiación concesional o la influencia política de las visitas de Estado. Herramientas que España sigue utilizando, con lógica, en otros mercados.</span></p><p><span style="font-family: inherit; font-size: large;">Es también interesante la "preocupación" que muestran EE.UU. y sus aliados por los "derechos humanos" y las "libertades" de la población china y sus acusaciones al Partido Comunista. ¿Acaso en los años 80 o 90, épocas en las cuales los dirigentes occidentales y sus empresas "hacían cola" por entrar a China, el país no estaba dirigido por el Partido Comunista? El sistema político era el establecido en 1949 y es el mismo que se mantiene hasta el presente. Pero en esos años, eso no importaba porque lo principal era el mercado chino y hacer negocios con un país que entonces estaba necesitado de financiación, tecnologías y equipos avanzados.</span></p><p><span style="font-family: inherit;"><span style="font-size: large;">En esos años un ciudadano chino no tenía la libertad de viajar como turista por el mundo. Es más, si hubiese podido hacerlo, se habría encontrado con una serie de trabas por parte de las autoridades españolas y europeas en general para proporcionarle un visado. </span></span></p><p><span style="font-family: inherit; font-size: large;">Incluso los que sí estaban autorizados por el gobierno chino a viajar al exterior, por ejemplo empresarios, tenían no pocas dificultades para obtener visados. ¿Alguien se quejaba entonces de la falta de "libertad" de un ciudadano chino para salir de su país? Al contrario, en cierto modo era Occidente quien impedía esa "libertad".</span></p><p><span style="font-family: inherit; font-size: large;">Y hablando de la libertad para salir del país ¿cuántos cientos de millones de ciudadanos chinos estuvieron viajando libremente por todo el mundo antes de la crisis de la Covid, habiendo regresado a China tras terminar sus viajes? </span></p><p><span style="font-family: inherit; font-size: large;">En todo caso, y volviendo al tema de las relaciones económicas bilaterales, todas esas críticas y comentarios negativos sobre China, ¿quieren decir que el panorama para las exportaciones españolas es sombrío y negativo? Las hechos demuestran que no. </span></p><p><span style="font-family: inherit; font-size: large;">La evolución de las exportaciones españolas a China y su peso en el comercio exterior español han mantenido en general una tendencia creciente. </span></p><p><span style="font-family: inherit; font-size: large;">Si hace justo 20 años atrás las ventas españolas no llegaban a los mil millones de dólares (en concreto fueron 796), hace una década, en el 2012, se multiplicaron por más de cuatro alcanzando los 3.785 millones. Y el año pasado llegaron a los 8.013 millones. O sea que en un período de dos décadas se multiplicaron por diez.</span></p><p style="text-align: center;"><span style="color: #2b00fe; font-size: large;"><b>Las exportaciones españolas a China se multiplicaron por diez en los últimos veinte años</b></span></p><p><span style="font-size: large;">La República Popular no es, ni mucho menos, uno de los principales mercados para la exportación española. Sin embargo, y al contrario de lo que se dice y escribe muchas veces, tampoco lo es América Latina. </span></p><p><span style="font-size: large;">China representa solo el 2 % en el total de las exportaciones españolas. Siendo así, sin embargo, <b>ese porcentaje es mayor que el de cualquier país latinoamericano.</b> En concreto, las ventas españolas a sus dos principales mercados de la región -México y Brasil- representaron, respectivamente, el 1,5 % y el 1,1 % el pasado año.</span></p><p><span style="font-size: large;"><br /></span></p><p style="text-align: center;"><span style="color: #2b00fe; font-size: large;"><b>China representa en las exportaciones españolas en general una posición más importante que la de cualquier país de América Latina</b></span></p><span style="font-size: large;">Si con el paso de los años muchas empresas españolas tuvieron que hacer frente a dificultades e incluso abandonar el mercado chino, al mismo tiempo, para otras se comenzaron a abrir las puertas de ese gran mercado.<br /></span><div><span style="font-size: large;"><br /></span></div><div><span style="font-size: large;">Como indica la excelente página web de la <a href="https://spain-china-foundation.org/">Fundación Consejo España-China</a> <i>"Si en 1995 las principales exportaciones españolas eran maquinaria específica y equipo de oficina, en los últimos años han pasado a ser los productos cárnicos, especialmente desde que, en 2007, China aprobó la importación de carne de cerdo española."</i></span><p><span style="font-family: inherit; font-size: large;">El espectacular desarrollo económico y en especial social que ha experimentado China en las últimas décadas, y la mejora en las condiciones de vida de su población, han abierto desde hace años oportunidades comerciales muy importantes para sectores como la carne de cerdo, el vino, el aceite de oliva o el jamón. </span></p><p><span style="font-family: inherit; font-size: large;">Podemos decir que las perspectivas de crecimiento en las ventas de productos de consumo y agroalimentarios son positivas y por eso el Instituto Español de Comercio Exterior (ICEX) junto con otras instituciones oficiales y privadas están desarrollando en China activas campañas de promoción comercial, entre otros sectores, para los vinos o el jamón.</span></p><p><span style="font-family: inherit; font-size: large;">Si, como hemos demostrado, China es, por lo menos como mercado para las exportaciones, más importante que México y Brasil, y las perspectivas de crecimiento de las ventas son positivas, no podemos olvidarnos de lo que podríamos llamar "la joya de la corona" en las relaciones entre ambos países, y nos estamos refiriendo concretamente al tema del turismo.</span></p><p><span style="font-family: inherit; font-size: large;">Aquí se puede dar la combinación perfecta de España como segundo país más visitado en el mundo, y China como primer emisor de turistas antes de la Covid.</span></p><p><span style="font-family: inherit;"><span style="font-size: large;">Según Jennifer Zhang -CEO de AsialinkSpain- "</span><span color="rgba(0, 0, 0, 0.9)" style="background-color: white;"><span style="font-size: large;"><i>Los turistas chinos son el mercado que más viaja al exterior y lideran el ranking de gasto por estancia, situándose siete veces por encima del gasto turístico medio del europeo." </i>En este sentido instituciones públicas y privadas de ambos países ya han comenzado a prepararse activamente para el regreso de los turistas chinos.</span></span></span></p><p><span style="font-family: inherit;"><span color="rgba(0, 0, 0, 0.9)" style="background-color: white;"><span style="font-size: large;">A las exportaciones y el turismo podríamos agregar el tema de las inversiones y el de la cooperación en terceros países, por lo cual los márgenes para ampliar la cooperación mutua siguen siendo grandes. </span></span></span></p><p><span style="font-family: inherit;"><span color="rgba(0, 0, 0, 0.9)" style="background-color: white;"><span style="font-size: large;">Dicho esto, el creciente olor a "guerra fría" que se respira en el mundo, y que poco a poco va afectando no solo a la política sino a la cultura en general, es ya un elemento que puede incidir negativamente en las relaciones económicas y comerciales entre España y China. </span></span></span></p><p><span style="font-family: inherit;"><span color="rgba(0, 0, 0, 0.9)" style="background-color: white;"><span style="font-size: large;">Como ya lo hicieron en la década de los 60 y 70, cuando el Presidente Mao aún estaba vivo, Alemania y Francia están mostrando un cierto grado de independencia en su política hacia China, para enfado de Estados Unidos y algunos de sus aliados.</span></span></span></p><div><span style="font-family: inherit;"><span color="rgba(0, 0, 0, 0.9)" style="background-color: white;"><span style="font-size: large;">Ya en noviembre del año pasado el </span></span></span><span style="font-family: inherit; font-size: large;">canciller alemán, Olaf Scholz, de alguna manera rompió el bloqueo no declarado a China y viajó a Beijing acompañado de importantes empresarios. Por su parte, el presidente francés, </span><span style="font-family: inherit; font-size: large;">Emmanuel Macron ya ha anunciado un viaje a la República Popular y un encuentro con Xi Jinping el próximo mes de abril.</span></div></div><div><span style="font-family: inherit; font-size: large;"><br /></span></div><div><span style="font-size: large;">No son ni serán días fáciles para la diplomacia española en lo relacionado con China. Como se quiso hacer ya hace muchos años atrás, España no puede "venderse" a China como puerta de entrada en América Latina y/o el norte de África. Las políticas lingüisticas en parte del territorio español dificultarán la llegada del creciente número de jóvenes chinos interesados en estudiar la lengua de Cervantes. Y, por si fuera poco, la posición de algunos de los socios nacionalistas del gobierno español en relación a temas muy sensibles como el de el Tibet o Hong Kong no ayudarán a que el camino sea fácil.</span></div><div><span style="font-size: large;"><br /></span></div><div><span style="font-size: large;">(Continuará)</span></div><div><span style="font-size: large;"><br /></span></div><div><span style="font-size: large;">@PabloRovetta</span></div><div><span style="font-family: inherit; font-size: large;"><br /></span></div><div><span style="font-family: inherit; font-size: large;"><br /></span></div>Unknownnoreply@blogger.com1tag:blogger.com,1999:blog-1444445772269538580.post-29311332936019014072023-02-02T20:55:00.025+01:002023-03-19T12:54:24.172+01:00Uruguay y China celebran 35 años de relaciones diplomáticas<p><span style="font-family: inherit; font-size: large;">Este viernes 3 de febrero se celebran los 35 años desde el
establecimiento de relaciones diplomáticas entre la República Oriental del
Uruguay y la República Popular China. Si ya en el 2018, al cumplirse tres
décadas de esas relaciones, los lazos políticos, institucionales, económicos y
culturales entre ambos países habían alcanzado niveles que podríamos calificar
como de espectaculares, ahora, cinco años más tarde, éstos han subido un
escalón más. Y todo ello en un contexto en el cual en los últimos tres años el
mundo entero tuvo que hacer frente a dificultades y retos inimaginables debido a
la pandemia de la Covid.</span></p><p><span style="font-family: inherit; font-size: large;"><br /></span></p><p></p><div class="separator" style="clear: both; text-align: center;"><a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEgfqe8Xem_yS2eoYngDBdsYbcmapVMXnQ6z8nYmzqQ1PjKrtku2njvRMb8nEx2RsAUTuCH7CEkJh05gKNm3lJQpU4cQOiaqBQi6q_yGRLaxvG9qI3TOEm9bXHosY-98sjHl_THgscRDmLQi1Uc7r2IrOdY_lEUKYbp4kDLRAURotV77HKez24pf9Gcveg/s1284/35%20aniversario.JPG" style="margin-left: 1em; margin-right: 1em;"><img border="0" data-original-height="1135" data-original-width="1284" height="283" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEgfqe8Xem_yS2eoYngDBdsYbcmapVMXnQ6z8nYmzqQ1PjKrtku2njvRMb8nEx2RsAUTuCH7CEkJh05gKNm3lJQpU4cQOiaqBQi6q_yGRLaxvG9qI3TOEm9bXHosY-98sjHl_THgscRDmLQi1Uc7r2IrOdY_lEUKYbp4kDLRAURotV77HKez24pf9Gcveg/s320/35%20aniversario.JPG" width="320" /></a></div><br /><span><a name='more'></a></span><p class="MsoNormal"><span style="font-family: inherit; font-size: large;">La crisis sanitaria mundial fue una prueba de fuego para las
relaciones bilaterales. En este sentido hay que recordar cómo en febrero de 2021 llegó a
Montevideo el primer lote de vacunas chinas contra la Covid-19, como resultado de
las gestiones al más alto nivel realizadas por el presidente Luis Lacalle Pou y
su homólogo chino Xi Jinping, así como de las gestiones de las representaciones
diplomáticas de ambos países en Beijing y Montevideo, encabezadas
respectivamente por los embajadores Fernando Lugris y Wang Gang.</span><o:p></o:p></p><p class="MsoNormal"><span style="font-family: inherit; font-size: large;">Aparte obviamente del dolor por las víctimas causadas por
esta pandemia, la Covid generó también enormes dificultades en el comercio
mundial, en especial en la logística y el transporte marítimo, lo cual originó un incremento de los costes y grandes retrasos
en los plazos de entrega. Las estrictas medidas tomadas por las autoridades
chinas para salvaguardar la vida de su población agravaron aún más esos
problemas y los principales puertos del país asiático quedaron “atascados”
hasta hace sólo unos meses atrás.<o:p></o:p></span></p><p class="MsoNormal">
</p><p class="MsoNormal"><span style="font-family: inherit; font-size: large;">La imposibilidad de realizar viajes de negocio a China o de
tener una participación presencial en importantes ferias del país, fueron
también efectos negativos de la pandemia a los que debemos agregar el enfriamiento en el crecimiento de la segunda economía más grande del mundo.</span><o:p></o:p></p><p class="MsoNormal"><span style="font-family: inherit; font-size: large;">Después de una caída de las ventas de bienes uruguayos a China en
el 2020 como consecuencia de esos efectos adversos, hemos visto, sin embargo, un incremento
continuo en el 2021 y 2022, años éstos también de muchas dificultades. <b>El año pasado las exportaciones uruguayas a
China crecieron un 12 % en relación con 2021 y por primera vez rompieron
la barrera de los 3.500 millones de dólares, </b>según datos de <b>Uruguay </b><i><b>XXI</b>.</i><b><o:p></o:p></b></span></p><p class="MsoNormal">
</p><p class="MsoNormal"><span style="font-family: inherit; font-size: large;"><br /></span></p><h3 style="text-align: center;"><span style="color: #2b00fe; font-family: inherit; font-size: x-large;">China es desde el 2013 el principal cliente de las exportaciones uruguayas </span></h3><p class="MsoNormal"><span style="font-family: inherit; font-size: large;"><br /></span></p><p class="MsoNormal" style="text-align: left;"><span style="font-family: inherit; font-size: large;">Con solamente mencionar que la <b>República Popular China es
desde hace ya una década el principal socio comercial de Uruguay y el destino número
uno de nuestras exportaciones</b> ya sería suficiente para demostrar la importancia
que tienen para nuestro país las relaciones con el país asiático.<o:p></o:p></span></p><p class="MsoNormal" style="text-align: left;"><span style="font-family: inherit; font-size: large;"><span>Con el fin de resaltar a qué nivel se ha llegado en tan poco espacio de tiempo, podemos citar al embajador chino en Montevideo, Wang Gang, quien ha declarado que "</span><span style="background-color: white; color: #333333; text-align: justify;">el volumen comercial bilateral ascendió a 7.441 millones de dólares en 2022, batiendo un nuevo récord histórico, 60 veces mayor al de 1988, año del establecimiento de nuestras relaciones diplomáticas." Según fuentes chinas, además, desde el año 2017 hasta la actualidad, el comercio sino-uruguayo creció en un 50 %.</span></span></p><p class="MsoNormal" style="text-align: left;"><span style="font-family: inherit; font-size: large;">Por último para darnos cuenta de la dimensión de esto vamos a recordar que el porcentaje de lo vendido a China (28 %) el año pasado supera a
todos los bienes exportados por Uruguay a Brasil y Argentina juntos (14 % y 9%
respectivamente), así como a toda la Unión Europea (15 %). </span></p><p class="MsoNormal" style="text-align: left;"><span style="font-family: inherit; font-size: large;">También es motivo de satisfacción el ver cómo paulatinamente
se va diversificando la oferta uruguaya a China. Cuando en 1988 se
establecieron las relaciones diplomáticas, y durante años posteriores, la lana era el principal rubro de nuestras exportaciones que entonces apenas superaban la cifra de los cien millones de dólares.</span></p><p class="MsoNormal" style="text-align: left;"><span style="font-family: inherit; font-size: large;"><o:p></o:p></span></p>
<p class="MsoNormal" style="text-align: left;"><span style="font-family: inherit; font-size: large;">En la actualidad, y desde hace años, la carne es el
principal producto de las ventas uruguayas. El año pasado representó un 40 % de las
exportaciones, seguida por la soja. En la canasta de productos exportados
también destacan los lácteos, la madera o la celulosa. </span><o:p></o:p></p><p class="MsoNormal" style="text-align: left;"><span style="font-family: inherit; font-size: large;"><br /></span></p><h3 style="text-align: center;"><span style="color: #2b00fe; font-family: inherit; font-size: x-large;">El desarrollo económico y social de China como catalizador de las exportaciones uruguayas</span></h3><div><p class="MsoNormal"><span style="font-family: inherit; font-size: large;"><br /></span></p><p class="MsoNormal"><span style="font-family: inherit; font-size: large;">El desarrollo económico, y en especial social, que ha
experimentado China en las décadas recientes, y principalmente en los últimos diez
años es algo reconocido por los principales organismos internacionales e
incluso por aquellos más críticos con el país asiático.<o:p></o:p></span></p>
<p class="MsoNormal"><span style="font-family: inherit; font-size: large;">El 25 de febrero del año 2021, el presidente chino Xi Jinping indicó en el Gran Palacio del
Pueblo de Beijing: "Hoy declaramos
solemnemente (...) un completo éxito en la lucha contra la pobreza en el país".<o:p></o:p></span></p>
<p class="MsoNormal"><span style="font-family: inherit; font-size: large;">El espectacular incremento en la demanda china de carne, lácteos, frutas, aceite de oliva, vinos y otros productos
agroalimentarios de todas partes del mundo son una prueba de cómo ha mejorado de forma creciente el nivel de vida de sus ciudadanos. Son muchos los ejemplos de
países con altas tasas de crecimiento económico, en algunos casos superiores a
las de China, pero donde sus ciudadanos siguen viviendo en condiciones de
extrema pobreza.<o:p></o:p></span></p>
<p class="MsoNormal"><span style="font-family: inherit; font-size: large;">Lo destacable en el caso de la República Popular, en comparación con muchos otros países (podríamos poner como ejemplo a India) es que su desarrollo económico se ha visto reflejado de forma palpable y general en la mejora de las infraestructuras del país y de muchos aspectos relacionados con su sociedad. La mejora del nivel de vida de millones de ciudadanos chinos
es lo que ha generado una demanda creciente de productos que países como
Uruguay pueden aportar al país asiático. </span></p><p class="MsoNormal"><span style="font-family: inherit; font-size: large;">Por decirlo de forma sencilla, sin el desarrollo social alcanzado no veríamos en los supermercados o restaurantes chinos carne uruguaya o productos de Conaprole</span></p><p class="MsoNormal"><span style="font-family: inherit; font-size: large;"><br /></span></p><h3 style="text-align: center;"><span style="color: #2b00fe; font-family: inherit; font-size: x-large;">El importante papel jugado por la embajada de Uruguay en China</span></h3><p class="MsoNormal"><br /></p><p class="MsoNormal"><span style="font-family: inherit; font-size: large;">Ese desarrollo social alcanzado por China ha sido pues una condición necesaria para transformar al país en un gran consumidor de carne y productos agroalimentarios, pero no suficiente para que Uruguay se haya convertido en uno de sus principales proveedores en este campo.</span></p><p class="MsoNormal"><span style="font-family: inherit; font-size: large;">La existencia de una gran demanda china, siendo algo bueno, hace al mismo tiempo que la competencia dentro del mercado sea muy fuerte. Muchos han sido y son los esfuerzos que ha tenido y tiene que realizar Uruguay en este sentido para haber alcanzado esos niveles espectaculares de ventas a la República Popular.</span></p><p class="MsoNormal"><span style="font-family: inherit; font-size: large;">En comparación con cualquiera de sus competidores Uruguay fue el país que más tarde estableció relaciones diplomáticas con China. Argentina o Australia, por ejemplo, lo hicieron en 1972, quince años antes. Incluso Estados Unidos, gran exportador de carne, soja y cereales a China, las estableció en 1979, nueve años antes.</span></p><p class="MsoNormal"><span style="font-family: inherit; font-size: large;">Aparte de esto, países como Australia o Nueva Zelanda pueden competir mejor que Uruguay ya que además de las ventajas geográficas tienen los beneficios de aranceles más bajos debido a acuerdos comerciales firmados hace ya muchos años atrás con la República Popular.</span></p><p class="MsoNormal"><span style="font-family: inherit; font-size: large;">Al mismo tiempo, el chino es un mercado donde hay que
conocer y acatar muy bien todas las normas sanitarias relacionadas con productos
alimentarios, y donde los consumidores están cada vez mejor informados y son
muy exigentes.<o:p></o:p></span></p><p class="MsoNormal"><span style="font-family: inherit; font-size: large;">Hacer que la calidad y características de nuestros productos
puedan ser conocidos y apreciados en el país más poblado del planeta, el
tercero más grande del mundo, no es una tarea fácil. Si tenemos en cuenta estos
dos factores -demográficos y geográficos- realizar labores de promoción
comercial o cultural en China es el equivalente a hacerlo en todo el continente
europeo. Eso es algo que pocas veces se tiene en cuenta cuando se ve el mercado chino desde afuera.<o:p></o:p></span></p><p class="MsoNormal"><span style="font-family: inherit; font-size: large;">El trabajo realizado por la embajada de Uruguay y sus consulados
en Shanghai, Guangzhou (Cantón) y Chongqing, aparte
obviamente del de Beijing, ha sido fundamental para la promoción de nuestro país, nuestros productos, nuestra cultura. Eso ha sido así desde el principio en 1988 cuando se estableció la embajada en Beijing y de forma más destacada en los últimos años debido a los cambios que se han ido produciendo en China y en las relaciones bilaterales. <o:p></o:p></span></p><p class="MsoNormal"><span style="font-family: inherit; font-size: large;">Debido a la crisis sanitaria, prácticamente durante tres años no pudieron realizarse visitas, y por eso gran parte del trabajo de promoción y apoyo al comercio con China fue realizado por la embajada uruguaya. Ésta ha sido y es muy activa y creativa en
el uso de las redes sociales chinas y muy cuidadosa en la utilización del idioma
chino, prestando también mucha atención a las relaciones con la prensa y
participando de forma presencial o virtual en infinidad de actividades.</span></p><p class="MsoNormal"><span style="font-family: inherit; font-size: large;"><o:p></o:p></span></p><p class="MsoNormal">
</p><p class="MsoNormal"><span style="font-family: inherit; font-size: large;">El auge del estudio del español en China ha sido también un
factor que ha posibilitado esas labores de promoción a todos los niveles: organismos
públicos centrales y regionales, universidades, institutos de investigación,
academias de ciencias, bibliotecas y museos, llegando también hasta el mundo del
deporte, en especial del fútbol.<o:p></o:p></span></p><p class="MsoNormal">
</p><p class="MsoNormal"><span style="font-family: inherit; font-size: large;">Tampoco podemos olvidar las excelentes relaciones con la
Embajada de la República Popular China en Montevideo y que la cooperación recibida
de ésta y en particular de su embajador Wang Gang, han sido también claves para
los éxitos alcanzados.</span><o:p></o:p></p><p class="MsoNormal"><span style="font-family: inherit; font-size: large;"><br /></span></p><h3 style="text-align: center;"><span style="color: #2b00fe; font-family: inherit; font-size: x-large;">Los retos del futuro</span></h3><div><span style="color: #2b00fe; font-family: inherit; font-size: x-large;"><br /></span></div><p style="text-align: left;"><span style="font-size: large;">Si bien nunca ha sido fácil -para bien o para mal- hacer previsiones sobre China, en la situación actual del mundo -parafraseando a Mao podríamos decir que "hay un gran desorden bajo los cielos"- aún es más complicado.</span></p><p style="text-align: left;"><span style="font-size: large;">En este "desorden bajo los cielos" tenemos, entre otros, los problemas del Mercosur y las relaciones con la Unión Europea y los Estados Unidos. Pero ese será tema de otras reflexiones.</span></p><p style="text-align: left;"><span style="font-size: large;">Centrándonos en el tema de las relaciones bilaterales creo que hay razones para el optimismo, en especial después del fin de los confinamientos en China y de la apertura de las fronteras del país.</span></p><p style="text-align: left;"><span style="font-size: large;">Con el riesgo que tiene esta afirmación, todo hace pensar que los niveles de vida y de consumo de los ciudadanos chinos no sólo no caerán sino que por el contrario podrían ir regresando a los niveles pre-pandemia e incluso superarlos.</span></p><p style="text-align: left;"><span style="font-size: large;">Las grandes empresas de artículos de lujo, las líneas aéreas y el turismo internacional ya se están preparando para ello. Durante las últimas vacaciones por la Fiesta de la Primavera en China, se volvió a vivir por primera vez en años el fenómeno de turistas chinos en el exterior, siendo Tailandia y Singapur los principales destinos de los viajeros.</span></p><p style="text-align: left;"><span style="font-size: large;">Las principales exportaciones uruguayas están directamente relacionadas con esos niveles de vida y de consumo y por eso los riesgos son menores que en otros sectores como por ejemplo la industria.</span></p><p style="text-align: left;"><span style="font-size: large;">Al mismo tiempo, siempre teniendo en cuenta a esos millones de ciudadanos con un poder adquisitivo cada vez mayor, a Uruguay se le abren, o ya se le han abierto, nuevas oportunidades de negocios. Un ejemplo de ello es el de los vinos.</span></p><p style="text-align: left;"><span style="font-size: large;">Una gran oportunidad para Uruguay, a mediano plazo, es el turismo chino. El país cuenta con condiciones naturales atractivas pero, al igual que pasó en Europa años atrás, el sector del turismo deberá aprender a conocer más y mejor las características de los visitantes que lleguen de la República Popular, y a adaptarse a nuevas costumbres y formas de trabajo.</span></p><p style="text-align: left;"><span style="font-size: large;">Uno de los grandes problemas a resolver es el de los traspasos trasnacionales. Si un ciudadano uruguayo, argentino o brasileño tiene muchas veces que esperar horas para cruzar una frontera o pasar un control de inmigración y aduanas si viaja en barco, no esperemos que un turista chino haga lo mismo después de haber dado la vuelta al mundo para llegar a Uruguay.</span></p><p style="text-align: left;"><span style="font-size: large;">En este sentido Brasil o Argentina serían los que saldrían ganando. Su gran extensión geográfica les permite tener una oferta muy variada aparte de que tienen buenas conexiones aéreas.</span></p><p style="text-align: left;"><span style="font-family: inherit; font-size: large;">El embajador chino en Uruguay, Wang Gang, propuso ya en junio del 2021 la creación de "una ruta transnacional que integre los destinos de Argentina, Brasil, Uruguay y Antártida, dirigida a un sector de alta gama de la sociedad china que aún no conoce la región." Me parece una propuesta con mucho sentido, muy acertada y muy interesante .... si se pudiera materializar. Me temo, sin embargo, que lamentablemente no será tarea fácil debido al tema de los visados y de los cruces transnacionales.... y ojalá que me equivoque.</span></p><p style="text-align: left;"><span style="font-size: large;">En todo caso, creo que Uruguay y China pueden estar satisfechos, después de 35 años, por el nivel alcanzado en sus relaciones bilaterales y podrán mirar el futuro con optimismo esperando festejar con más fuerza aún los 40 años de lazos diplomáticos.</span></p><p style="text-align: left;"><span style="font-size: large;"><b>Pablo Rovetta Dubinsky</b></span></p><p style="text-align: left;"><span style="font-size: large;"><b>@PabloRovetta</b></span></p></div><p class="MsoNormal"><o:p></o:p></p>Unknownnoreply@blogger.com0tag:blogger.com,1999:blog-1444445772269538580.post-21779260224898825312022-11-08T18:05:00.017+01:002023-03-19T12:55:33.954+01:00Era 1889 y un emisario chino de la dinastía Qing pasó por Montevideo<p style="text-align: left;"><span style="font-size: large; text-align: justify;">Es muy posible que aún no figure en
la lista de visitantes ilustres de <b>Montevideo</b>, y por eso nos gustaría rescatar
la historia del primer representante oficial chino que estuvo en <b>Uruguay</b> hace
ya más de 130 años y que dejó constancia por escrito de su paso por la capital,
con una detallada descripción del país.</span></p><p class="MsoNormal" style="text-align: left;"><span style="font-size: large; line-height: 107%;">Nos estamos refiriendo a <b>Fu Yunlong</b>, “emisario
en viaje al exterior” del emperador chino Guangxu de la dinastía Qing quien, en
una misión por el continente americano, llegó al puerto de Montevideo un 2 de marzo
de 1889, proveniente de Valparaíso y de paso hacia Brasil.<o:p></o:p></span></p><p class="MsoNormal" style="text-align: left;"><span></span></p><a name='more'></a><p></p><p class="MsoNormal" style="text-align: left;"><span><span style="font-size: large;"><span style="line-height: 107%;">En realidad, en el año 2018 ya tuvimos
oportunidad de mencionar los detalles generales de esta historia en la entrada <a href="http://www.pablo-rovetta.com/2018/04/la-historia-apasionante-del-primer.html" target="_blank">La historia apasionante del primer emisario de una Dinastía china que viajó a América Latina en el Siglo XIX</a> </span><span style="line-height: 107%;">cuando el profesor Wang Xiaoqiu, después de veinte
años de trabajo, hizo público el resultado de su investigación sobre un tema
prácticamente desconocido en las relaciones entre China y América Latina (</span><span style="line-height: 107%;">Nota 1</span></span><span style="line-height: 107%;"><span style="font-size: large;">) Esta vez, sin embargo, vamos a centrarnos en su paso por Uruguay.</span><span style="font-size: medium;"><o:p></o:p></span></span></span></p><p class="MsoNormal" style="text-align: left;"><span style="font-size: 12pt; line-height: 107%;"><br /></span></p><p class="MsoNormal" style="text-align: justify; text-justify: inter-ideograph;"></p><div class="separator" style="clear: both; text-align: center;"><a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEiExn7d1T8dcpDN3s1y-piP--iFLFECJXXulftEqrkEG4mjcy2G-8LRwBTfgq2sXaQFtXMJwZ2WhN3xeRM4l4Dm84FMRN94d8qvKv9oBgBAjN4mfvDsjOa-oZkzniXzXsa2OrA8NZJni0HxEn5HT86GIeqMAXVtNyS9_5QS9nS-oipac9lqrdXmrokWJg/s317/Fu%202.jpg" style="margin-left: 1em; margin-right: 1em;"><img border="0" data-original-height="303" data-original-width="317" height="303" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEiExn7d1T8dcpDN3s1y-piP--iFLFECJXXulftEqrkEG4mjcy2G-8LRwBTfgq2sXaQFtXMJwZ2WhN3xeRM4l4Dm84FMRN94d8qvKv9oBgBAjN4mfvDsjOa-oZkzniXzXsa2OrA8NZJni0HxEn5HT86GIeqMAXVtNyS9_5QS9nS-oipac9lqrdXmrokWJg/s1600/Fu%202.jpg" width="317" /></a></div><br /><div class="separator" style="clear: both; text-align: center;"><span style="font-size: medium;">Retrato de Fu Yunlong tomado de la página china "Baidu"</span></div><br /><span style="font-size: 12pt; line-height: 107%;"><br /></span><p></p><p class="MsoNormal" style="text-align: left;"><span style="font-size: large; line-height: 107%;">Todo comenzó a finales de la década
de los 80 del siglo XIX cuando el gobierno Qing decidió enviar a un grupo de
emisarios itinerantes por diversas regiones del mundo con el propósito de
conocer y dejar constancia por escrito de todos los detalles de los países que
visitaban. <o:p></o:p></span></p><p class="MsoNormal" style="text-align: left;"><span style="font-size: large; line-height: 107%;">Entre ellos, Fu Yunlong, un
funcionario de bajo nivel pero muy interesado en la geografía y la historia,
fue seleccionado mediante exámenes para realizar un viaje oficial a Japón, EE
UU, Cuba, Perú, Brasil y Canadá. <o:p></o:p></span></p><p class="MsoNormal" style="text-align: left;"><span style="font-size: large; line-height: 107%;">En total estuvo tres meses y medio en
América Central y del Sur, y aprovechó también para visitar países y lugares
que no estaban incluidos en su misión, pero por los cuales pasó durante su
viaje. Es el caso de Uruguay a donde llegó después de haber cruzado el Estrecho
de Magallanes en el buque “Sorata” de la Compañía del Pacífico (Pacific
Steam Navigation Company PSNC).<o:p></o:p></span></p><p class="MsoNormal" style="text-align: left;"><span style="font-size: large; line-height: 107%;">La nave británica llegó a Montevideo
en la madrugada del 2 de marzo de 1889 y tuvo que esperar al amanecer para atracar
en el puerto. El funcionario chino estuvo dos días en la ciudad, regresando por
las noches para dormir en el barco, antes de partir el 4 con destino a Río de
Janeiro. <o:p></o:p></span></p><p class="MsoNormal" style="text-align: left;"><span style="font-size: large; line-height: 107%;"><span>Fu Yunlong dejó registro de muchas
cosas relacionadas con Uruguay y Montevideo. Como indicó en el año 2004 uno de
sus descendientes, <a name="_Hlk115695047">Fu Xuncheng</a>, “de su paso por
Uruguay las pequeñas notas de unos 300 caracteres que escribió fueron suficientes
para que la gente tuviese una idea general del país”.</span><o:p></o:p></span></p><p class="MsoNormal" style="text-align: left;"><span style="font-size: 12pt; line-height: 107%;"><br /></span></p><p class="MsoNormal" style="text-align: justify; text-justify: inter-ideograph;"></p><div class="separator" style="clear: both; text-align: center;"><a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEgSlhuANHhf9u9zgUuMpHMssgTrLi9gDzRCvux3Et82fsI_fUZls3KGzhgd2YBW9nTw8BEtDgH1mwM27DuSigp-vPO1xQaAvUYFCi4AxMhhL5tcaiZrynwBl2iVDzTjN_DdQqwGdzbGNwS2wGT750bpk_h_W3S6d3KhVNO0DxfpuhahEbXw74iLpinbNw/s612/Mapa.jpg" style="margin-left: 1em; margin-right: 1em;"><img border="0" data-original-height="612" data-original-width="555" height="320" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEgSlhuANHhf9u9zgUuMpHMssgTrLi9gDzRCvux3Et82fsI_fUZls3KGzhgd2YBW9nTw8BEtDgH1mwM27DuSigp-vPO1xQaAvUYFCi4AxMhhL5tcaiZrynwBl2iVDzTjN_DdQqwGdzbGNwS2wGT750bpk_h_W3S6d3KhVNO0DxfpuhahEbXw74iLpinbNw/s320/Mapa.jpg" width="290" /></a></div><p></p><p align="center" class="MsoNormal" style="text-align: center;"><span style="line-height: 107%;"><span style="font-size: medium;">Segmento ampliado del mapa donde se
destaca, en rojo, su ruta en América del Sur</span><o:p style="font-size: 12pt;"></o:p></span></p><p class="MsoNormal" style="text-align: left;"><span style="font-size: large;">No hay constancia de que haya tenido
ningún encuentro con autoridades uruguayas, si no lo hubiese reflejado,
teniendo en cuenta lo detallista que era en sus apuntes de viaje. En todo caso,
el año de su llegada la República Oriental estaba presidida por el general
Máximo Tajes.</span></p><p class="MsoNormal" style="text-align: left;"><span style="font-size: large; line-height: 107%;">Llama la atención toda la información
que dejó escrita sobre nuestro país, a pesar de que no era uno de los objetivos
que le había planteado el emperador. Algo similar ocurrió en el caso de Chile.<o:p></o:p></span></p><p class="MsoNormal" style="text-align: left;"><span style="font-size: large; line-height: 107%;">Lo primero que hace es citar correctamente la ubicación de Montevideo (latitud 34º 53’ S y longitud 56º
05’ O) y de Uruguay. <b>“El país está situado al Sureste del continente de
América del Sur. Va desde la latitud 30º 15’ S, al sur de la línea del Ecuador,
a la 35º 15’ S.”<o:p></o:p></b></span></p><p class="MsoNormal" style="text-align: left;"><span style="font-size: large; line-height: 107%;">Para ubicar la posición de Uruguay en
el eje Oeste-Este de la Tierra, sin embargo, toma como referencia el meridiano
que pasa por Beijing y no el de Greenwich, decisión que parece lógica ya que su
objetivo era posicionar a Uruguay en relación con China. De esta forma,
considerando a la capital china como “latitud 0”, al mencionar el ancho de
Uruguay indica que <b>“Su longitud va, partiendo de Beijing hacia el Oeste, desde
el meridiano 169º 15’ hasta el meridiano 174º 15’ ”.</b> La medición que hace
es exacta. (A los 116º de latitud Este de Beijing, le suma respectivamente, los
53º y 58º de latitud Oeste de Uruguay).<o:p></o:p></span></p><p class="MsoNormal" style="text-align: left;"><span style="font-size: large; line-height: 107%;">Aunque las cifras que registra sobre
la población no parecen muy exactas (habla de 300.000 habitantes), sí hace
mención a una realidad, y es el gran número de extranjeros que existía entonces
en Uruguay, lo cual lo “asombra” (los cifra en 110.000) destacando que son <b>“en
su mayoría italianos.”</b> <b>“No hay
ningún chino” </b>-escribe-<b> “pero sí un solo japonés”, </b>aunque aclara que
es parte de la tripulación de un buque de guerra de los Estados Unidos, y<b>
“no es un residente extranjero”.<o:p></o:p></b></span></p><p class="MsoNormal" style="text-align: left;"><span style="font-size: large; line-height: 107%;">Explica a continuación que el país
formaba parte del Virreinato del Río de la Plata (él dice simplemente <b>“el
país pertenecía a La Plata”</b>), y que Brasil intentó conquistarlo, sin éxito,
y al final se constituyó en un estado independiente. También deja constancia de que el idioma que
se habla es el español y de que en Uruguay hay productos agrícolas frescos y
ganado.<o:p></o:p></span></p><p class="MsoNormal" style="text-align: left;"><span style="font-size: large;"><b><span style="line-height: 107%;">“El río Uruguay es el más grande del
país.”</span></b><span style="line-height: 107%;"> <b>“Al norte del puerto hay una colina
redonda, de pocos cientos de metros de altura, … , sin picos ni barrancos”</b>
escribe refiriéndose al Cerro de Montevideo a quien compara con un <i>mantou,</i>
un panecillo redondo chino hecho al vapor.<o:p></o:p></span></span></p><p class="MsoNormal" style="text-align: left;"><span style="font-size: large; line-height: 107%;">Relata que al Noreste hay arena y que
las construcciones están concentradas en el Este. Parece que la ciudad le gustó
ya que escribe que su aspecto es “mucho, mucho mejor” que el de Valparaíso. <o:p></o:p></span></p><p class="MsoNormal" style="text-align: left;"><span style="font-size: large; line-height: 107%;">También destaca que ve mucha
actividad en el puerto. En la zona donde está atracado su barco dice que los
mástiles forman una especie de “bosque”. <b>“Hay muchas naves amarradas, nueve
de ellas son de vapor, mientras los buques pequeños van y vienen.”</b> <o:p></o:p></span></p><p class="MsoNormal" style="text-align: left;"><span style="font-size: large; line-height: 107%;">La primera noche <b>“las nubes se volvieron
negras como tinta y las olas llegaron a tocar el cielo” </b>mientras que la luz
de los relámpagos se reflejaba en los buques amarrados. La tormenta dura toda
la noche y la mañana del segundo día. Por la tarde sale a dar un paseo, dejando
constancia de que ve un faro en una pequeña isla, a la cual dice que llaman “islote”. <o:p></o:p></span></p><p class="MsoNormal" style="text-align: left;"><span style="font-size: large; line-height: 107%;">Fu Yunlong está considerado como la
primera persona que investigó para China, <i>in situ</i>, el continente
americano. Es muy probable -aunque difícil de probar- que haya sido el primer
ciudadano chino en visitar Uruguay. Sin embargo, en todo caso, sí fue el primer
funcionario gubernamental del lejano país asiático que lo hizo. Además, sus
registros, publicados en el año 1901 tras su regreso a China, fueron los
primeros que se escribieron sobre Uruguay en el país asiático.<o:p></o:p></span></p><p class="MsoNormal"><span style="font-size: large; line-height: 107%;"><span>En el año
2004, uno de sus descendientes, Fu Xuncheng, fue el encargado de poner en
limpio el “Diario de viaje de Fu Yunlong”. El profesor Wang Xiaoqiu, por su
parte, en el año 2018, hizo pública la historia de su viaje por América Latina
después de haber estudiado y puesto en orden los 23 volúmenes de diarios de
viaje, reflexiones personales e información obtenida.</span><o:p></o:p></span></p><p class="MsoNormal"><span style="font-size: 12pt; line-height: 107%;"><br /></span></p><p class="MsoNormal"><span style="font-size: 12pt; line-height: 107%;">----</span></p><p class="MsoNormal"><span style="font-size: medium; line-height: 107%;">Fuentes:<o:p></o:p></span></p><p class="MsoNormal"><span style="font-size: medium;"><span style="line-height: 107%;"><b>Reflexiones
Orientales</b>: </span><a href="http://www.pablo-rovetta.com/2018/04/la-historia-apasionante-del-primer.html"><span style="line-height: 107%;">http://www.pablo-rovetta.com/2018/04/la-historia-apasionante-del-primer.html</span></a></span></p><p class="MsoNormal"><span style="font-size: medium;"><span style="line-height: 107%;">(Nota 1 )<b>19</b></span><b><span lang="ZH-CN" style="font-family: DengXian; line-height: 107%;">世纪中拉文明的一次相遇与互鉴</span><span style="line-height: 107%;">
</span><span lang="ZH-CN" style="font-family: DengXian; line-height: 107%;">清朝外游历使傅云龙的拉丁美洲之行</span><span lang="ZH-CN" style="line-height: 107%;"> </span><span lang="ZH-CN" style="font-family: DengXian; line-height: 107%;">作者</span><span lang="ZH-CN" style="line-height: 107%;"> </span><span lang="ZH-CN" style="font-family: DengXian; line-height: 107%;">王晓秋</span><span lang="ZH-CN" style="font-family: DengXian; line-height: 107%;">拉丁美洲研究</span></b><span lang="ZH-CN" style="line-height: 107%;"> </span><span style="line-height: 107%;"> (El viaje a América
Latina de Fu Yunlong, emisario en viaje al extranjero del gobierno de la
Dinastia Qing – El primer encuentro y conocimiento entre las culturas de China
y América Latina en el s XIX. Wang Xiaoqiu. Revista América Latina. <i>Artículo
escrito en chino</i>)</span></span></p><p class="MsoNormal"><span style="font-size: medium;"><span lang="ZH-CN" style="font-family: DengXian; line-height: 107%; mso-ascii-font-family: Calibri; mso-ascii-theme-font: minor-latin; mso-fareast-theme-font: minor-fareast; mso-hansi-font-family: Calibri; mso-hansi-theme-font: minor-latin;"><b>傅云龙日记</b></span><span style="line-height: 107%;"> </span><span lang="ZH-CN" style="font-family: DengXian; line-height: 107%; mso-ascii-font-family: Calibri; mso-ascii-theme-font: minor-latin; mso-fareast-theme-font: minor-fareast; mso-hansi-font-family: Calibri; mso-hansi-theme-font: minor-latin;">浙江古籍出版社</span><span lang="ZH-CN" style="line-height: 107%;"> </span><span style="line-height: 107%;">(“Diario de Fu Yunlong”. Editorial de
libros antiguos de Zhejiang. </span><i><span lang="EN-US" style="line-height: 107%; mso-ansi-language: EN-US;">Libro escrito en chino</span></i><span lang="EN-US" style="line-height: 107%; mso-ansi-language: EN-US;">)<o:p></o:p></span></span></p><p class="MsoNormal"><span style="font-size: medium; line-height: 107%;">
</span></p><p class="MsoNormal"><span lang="EN-US" style="font-size: medium; line-height: 107%; mso-ansi-language: EN-US;"><b>The Montevideo Independent and Rive Plate Daily News</b><o:p></o:p></span></p><p class="MsoNormal" style="text-align: justify; text-justify: inter-ideograph;"><span style="font-size: medium; line-height: 107%;">
</span></p><p class="MsoNormal"><span style="font-size: medium; line-height: 107%;"> </span></p><p class="MsoNormal"><span style="font-size: 12pt; line-height: 107%;">@PabloRovetta</span></p><p><span style="font-size: 12pt; text-align: justify;"><br /></span></p><p><span style="font-size: 12pt; text-align: justify;"><br /></span></p>Unknownnoreply@blogger.com0tag:blogger.com,1999:blog-1444445772269538580.post-11465110996765380882022-10-15T20:12:00.009+02:002023-03-19T12:57:01.127+01:00Reflexiones antes del XXº Congreso del Partido Comunista de China<div style="text-align: left;"><span style="font-size: large;">El domingo 16 de octubre se inaugurará en Beijing el XXº Congreso Nacional del Partido Comunista de China. Los medios de prensa y las redes sociales de nuestro mundo de habla hispana se han llenado de todo tipo de comentarios y notas periodísticas sobre un acontecimiento que indudablemente tendrá repercusiones mundiales. </span></div><div style="text-align: left;"><span style="font-size: large;"><br /></span></div><div style="text-align: left;"><span style="font-size: large;">Y las tendrá, porque como ya decía este servidor en el año 2007.... -y perdón por la autocita- <a href="http://www.pablo-rovetta.com/2017/12/a-los-10-anos-de-china-nos-importa.html" target="_blank">China nos importa, China nos afecta</a> y en gran medida el futuro del país asiático para los próximos años se definirá estos días en el Gran Palacio del Pueblo.</span></div><div style="text-align: left;"><span><a name='more'></a></span></div><div style="text-align: left;"><span style="font-size: x-large;">A horas de que comience pues el Congreso me gustaría hacer algunas reflexiones sobre algunas de las cosas que he leído y escuchado de forma reiterada en los últimos días.</span></div><div style="text-align: left;"><span style="font-size: large;"><br /></span></div><div style="text-align: left;"><span style="font-size: large;"><br /></span></div><div style="text-align: left;"><div class="separator" style="clear: both; text-align: center;"><a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEidEqiFXclPuIuHvxP57NFjSjjvwTclEASz0TvksOaVAdnUGaY6GKLN79vtjKoGhSicCo4nnTeBeQ4NrTjPbuOffz8oKfdzrAgpq3B93LpRC2dJbcUlWaaidyKWCoKP40fstSKqAn1SYA-H2aAIJCKRW59uWDqpyMojw9p37AccCbiJzeEYTRg8n7axlw/s750/XX%20Congreso.jpg" style="margin-left: 1em; margin-right: 1em;"><img border="0" data-original-height="466" data-original-width="750" height="249" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEidEqiFXclPuIuHvxP57NFjSjjvwTclEASz0TvksOaVAdnUGaY6GKLN79vtjKoGhSicCo4nnTeBeQ4NrTjPbuOffz8oKfdzrAgpq3B93LpRC2dJbcUlWaaidyKWCoKP40fstSKqAn1SYA-H2aAIJCKRW59uWDqpyMojw9p37AccCbiJzeEYTRg8n7axlw/w400-h249/XX%20Congreso.jpg" width="400" /></a></div><br /><span style="font-size: large;"><br /></span></div><div style="text-align: left;"><span style="font-size: large;">Es bueno aclarar que la misión más importante del Congreso será la de estudiar y aprobar el informe de trabajo que Xi Jinping presentará la mañana del domingo en Beijing. También, como ha ocurrido en todos los Congresos, se aprobarán las nuevos <b>estatutos</b> del Partido Comunista (que, por cierto, no sé por qué desde algunos medios, incluso chinos, se empeñan en llamarlos "constitución"), y se eligirán a los miembros y miembros suplementes del nuevo Comité Central del Partido.</span></div><div style="text-align: left;"><span style="font-size: large;"><br /></span></div><div style="text-align: left;"><span style="font-size: large;">Aparte del uso continuo de la palabra "constitución", este año no hay un sólo artículo que no mencione el término "<b>mandato</b>". Esto es algo nuevo, por lo menos para mí. Como decía una experta de verdad en un foro serio sobre temas de China, ¿alguna vez se habló de "mandatos" en los casos de Mao Zedong o Deng Xiaoping, por ejemplo?</span></div><div style="text-align: left;"><span style="font-size: large;"><br /></span></div><div style="text-align: left;"><span style="font-size: large;">¿Cuáles fueron los "mandatos" de Mao? Fue el máximo líder de la República Popular China desde el 1 de octubre de 1949 hasta el 9 de septiembre de 1976. <b>¿Cuáles fueron los "mandatos" de Deng Xiaoping después de su última rehabilitación tras la muerte de Mao? </b></span></div><div style="text-align: left;"><span style="font-size: large;"><b><br /></b></span></div><div style="text-align: left;"><span style="font-size: large;">La persona que está considerada tanto dentro como fuera de China como el líder máximo de la República Popular entre 1978 hasta su muerte en 1997 <b>no tuvo ningún "mandato" </b>(salvo un relativamente breve paso por la Comisión Militar) ni dentro ni fuera del Partido. Tanto es así que para referirse a Deng Xiaoping, una de las expresiones que utilizaba la prensa en español era la de "el hombre fuerte de China".</span></div><div style="text-align: left;"><span style="font-size: large;"><br /></span></div><div style="text-align: left;"><span style="font-size: large;">No fue Presidente de la República, ni Primer Ministro, ni Presidente o Secretario General del Partido Comunista. Es más, mientras Deng era el "hombre fuerte de China" y viajaba a Estados Unidos recibiendo los honores de un Jefe de Estado, desde el punto de vista técnico la persona jerárquicamente con más poder en China era Hua Guofeng. <b>Incluso, teóricamente, Hua llegó a tener más "poder" que Mao ya que también fue primer ministro del Consejo de Estado.</b></span></div><div style="text-align: left;"><span style="font-size: large;"><b><br /></b></span></div><div style="text-align: left;"><span style="font-size: large;">En una gran mayoría de los artículos que he podido leer también se habla de que Deng era un partidario de una "dirección colectiva". Sin embargo, en realidad él mismo estuvo por encima de esa "dirección colectiva". Es más, habría que recordar que los dos candidatos de Deng Xiaoping para asumir tareas de máxima responsabilidad en el Partido y en el Gobierno fueron Hu Yaobang y Zhao Ziyang y que, como todos saben, no terminaron muy bien sus carreras políticas y tuvo que ser el mismo Deng quien tomó las decisiones claves.</span></div><div style="text-align: left;"><span style="font-size: large;"><br /></span></div><div style="text-align: left;"><span style="font-size: large;">Obvia decir que los Estatutos del Partido Comunista no hacen ninguna mención a los años del "mandato" del Secretario General y otros miembros del Buró Político....como tampoco estipula cuántos deben ser los integrantes del Buró Político y de su Comité Permanente. ¿Serán siete, como ahora? ¿Más? ¿Menos? ¿Pares? ¿Impares? Teóricamente todo es posible y hemos tenido ejemplos de todo tipo en la historia del Partido.</span></div><div style="text-align: left;"><span style="font-size: large;"><br /></span></div><div style="text-align: left;"><span style="font-size: large;">Lo que sí es un hecho es que en la Constitución (en este caso sí, Constitución) de la República Popular se eliminó hace cuatro años la cláusula que limitaba a dos mandatos seguidos el puesto de presidente de China lo que permitiría a Xi Jinping continuar como Presidente del país a partir del año próximo ¿Es eso bueno o malo? ¿Lo es -bueno o malo- para China, para el mundo? </span></div><div style="text-align: left;"><span style="font-size: large;"><br /></span></div><div style="text-align: left;"><span style="font-size: large;">En la historia reciente de la humanidad podemos encontrar ejemplos para todos los gustos, incluso dentro de las mismas democracias de Europa occidental. En todo caso es un tema interno de China. El mundo cambia, y lo está haciendo a una velocidad de crucero; las situaciones cambian y las normas y políticas de los gobiernos también están cambiando para adaptarse a nuevas situaciones. Y eso lo estamos viendo todos los días, y en menos de tres años hemos sido testigos de los grandes cambios -en algunos casos impensables hasta hace muy poco- que se están dando en la geopolítica mundial, en la economía, en la vida diaria de los ciudadanos, por la crisis del Covid y la invasión rusa de Ucrania.</span></div><div style="text-align: left;"><span style="font-size: large;"><br /></span></div><div style="text-align: left;"><span style="font-size: large;">Desde hace décadas las autoridades de la República Popular China han estado administrando su país en base <b>a decisiones propias</b>, al tiempo que tuvieron que hacer frente a muchos y muy graves problemas internos y externos. Hasta ahora han sido capaces de superar las dificultades, beneficiar a su población gracias al desarrollo económico y social, y crear un Estado cada vez más fuerte y avanzado.</span></div><div style="text-align: left;"><span style="font-size: large;"><br /></span></div><div style="text-align: left;"><span style="font-size: large;">No hay razones para pensar que en este nuevo ciclo que comenzará en los próximos días, las cosas no sigan siendo así.</span></div><div style="text-align: left;"><span style="font-size: large;"><br /></span></div><div style="text-align: left;"><span style="font-size: large;">Desde fuera de China, creo que lo más importante en estos momentos es seguir de cerca el desarrollo del Congreso, y más importante aún las primeras decisiones que tome a partir del sábado, el XX Comité Central. Y por supuesto ver qué puede pasar en los próximos cinco o más años, y prepararse ya para los diferentes escenarios que se puedan dar.</span></div><div style="text-align: left;"><br /></div><div style="text-align: left;"><span style="font-size: large;">@PabloRovetta</span></div>Unknownnoreply@blogger.com0tag:blogger.com,1999:blog-1444445772269538580.post-81715719485017769582022-07-30T19:54:00.012+02:002023-03-19T12:58:13.512+01:00Cuando en China no se comía carne vacuna - Serie TLC Uruguay-China <div style="text-align: left;"><span style="font-family: arial; font-size: large;"><b>La semana pasada reflexionábamos sobre la posibilidad de un Tratado de Libre Comercio (TLC) entre Uruguay y China, poniéndo énfasis en si las relaciones con la República Popular habían sido y eran o no beneficiosas para Uruguay.</b></span></div><div style="text-align: left;"><span style="font-family: arial; font-size: large;"><b><br /></b></span></div><div style="text-align: left;"><span style="font-family: arial; font-size: large;"><b>Hoy, continuando con el mismo tema, vamos a recordar a una China en la cual prácticamente no se comía carne vacuna hasta unas pocas décadas atrás. Recordando ese pasado no tan lejano de China podremos apreciar mejor cómo el espectacular resurgimiento del país asiático y su gran desarrollo económico y social han supuesto una verdadera revolución en el sector agroalimentario mundial, favoreciendo en este caso a países como Uruguay.</b></span></div><div style="text-align: left;"><span style="font-family: arial; font-size: large;"><span><a name='more'></a></span></span></div><div style="text-align: left;"><b style="font-family: arial; font-size: x-large;">En la década los años setenta, cuando empecé a vivir en China, la palabra carne (肉) era en la práctica un sinónimo de "carne de cerdo", y estaba considerado un producto de lujo; estaba racionado, y sólo se comía en situaciones muy especiales, como por ejemplo para la entrada del Año Nuevo según el calendario agrícola chino.</b></div><div style="text-align: left;"><b><span style="font-family: arial; font-size: large;"><br /></span><span style="font-family: arial; font-size: large;">Algunos de los platos de la comida china más populares, como el famoso "cerdo agridulce", se conocía, y aún se conoce con el nombre de 古老肉, lo mismo que el plato preferido del presidente Mao, 红烧肉, u otros como el 木须肉 o el 回锅肉. En todos los casos sólo aparece el caracter carne, sin indicar de qué animal es, aunque se da por sentado que es de cerdo. </span></b></div><div style="text-align: left;"><b><span style="font-family: arial; font-size: large;"><br /></span><span style="font-family: arial; font-size: large;">Si alguien preguntaba o pregunta aún de qué estaban rellenos los famosos <i>jiaozi </i>饺子<i> </i>(que a mí me gusta traducir como "ravioles chinos"), y le respondían 肉馅的, querian decir que lo estaban de carne (por supuesto de cerdo).</span></b></div><div style="text-align: left;"><b><span style="font-family: arial; font-size: large;"><br /></span><span style="font-family: arial; font-size: large;">Para los médicos, la carne (肉) "era mala para la salud", y le decían a los pacientes con problemas de hipertención o colesterol, que no la comieran.</span></b></div><div style="text-align: left;"><b><span style="font-family: arial; font-size: large;"><br /></span><span style="font-family: arial; font-size: large;">El cerdo era tan importante en la cultura y la sociedad de China que la palabra "casa" o "familia" (家) está representada por un cerdo debajo de un techo. "Allí donde había cerdos, había una casa o una familia", nos decía el profesor.</span></b></div><div style="text-align: left;"><b><span style="font-family: arial; font-size: large;"><br /></span><span style="font-family: arial; font-size: large;">En "Los años setenta en China-Recuerdos de un Oriental en Oriente" recuerdo cómo más de una vez ví cómo en la parrilla trasera de una bicicleta, encima de unas maderas horizontales, se transportaba a un cerdo vivo.</span></b></div><div style="text-align: left;"><b><span style="font-family: arial; font-size: large;"><br /></span><span style="font-family: arial; font-size: large;">Lo que no cuento es cómo, durante un período de estancia en una Comuna Popular, en una clase de secundaria se dio una clase en la cual los alumnos aprendían, "en vivo y en directo", a castrar a un cerdo, en medio de los chillidos del animal.</span></b></div><div style="text-align: left;"><b><span style="font-family: arial; font-size: large;"><br /></span><span style="font-family: arial; font-size: large;">La China de antes de 1949 era un país arrasado por décadas de guerras y calamidades naturales, con frecuentes hambrunas. Tras el establecimiento de la República Popular, la producción de alimentos era deficitaria y con el objetivo de poder garantizar un mínimo de suministros a toda la población, se estableció un sistema de racionamiento para los cereales, el aceite...y la carne. Este sistema se regía por el uso de los llamados "cupones", y en el caso concreto de la carne, éstos eran distribuidos entre los ciudadanos en los niveles locales, y además tenían fecha de caducidad.</span></b></div><div style="text-align: left;"><span style="font-family: arial; font-size: large;"><b><br /></b></span></div><div style="text-align: left;"><b><span style="font-family: arial; font-size: large;">Los cupones de carne eran para la de cerdo, y para que no quedara duda de ello, en muchos aparecía un dibujo del animal, como en el siguiente:</span></b></div><p><span style="font-size: large;"><br /></span></p><p></p><div class="separator" style="clear: both; text-align: center;"><a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEjeqJniSB90osxKRE8ky9VbWkCNg5nJMAFREXkq8GxUlMLNClkIpaEqcxnWkAKVlKI2qQH5S36hYFfE-5E3M8i_m363hkWUXQ9jumolccKFk61fod7wxI_gHRwsYZsG7albfZOgJvwj16yHCLyNA0ix6iWyS7s489Y6JColXQ7eHrZx71Ub6PuWToVWew/s350/Cup%C3%B3n%20de%20carne%20de%20cerdo%20de%20Shanghai.jpg" style="margin-left: 1em; margin-right: 1em;"><img alt="Cupón para 250 gramos de carne de cerdo, para ser usado en el primer trimestre de 1964 en el municipio de Shanghai" border="0" data-original-height="219" data-original-width="350" height="250" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEjeqJniSB90osxKRE8ky9VbWkCNg5nJMAFREXkq8GxUlMLNClkIpaEqcxnWkAKVlKI2qQH5S36hYFfE-5E3M8i_m363hkWUXQ9jumolccKFk61fod7wxI_gHRwsYZsG7albfZOgJvwj16yHCLyNA0ix6iWyS7s489Y6JColXQ7eHrZx71Ub6PuWToVWew/w400-h250/Cup%C3%B3n%20de%20carne%20de%20cerdo%20de%20Shanghai.jpg" width="400" /></a></div><br /><div style="text-align: center;">Cupón para 250 gramos de carne de cerdo, para su uso en Shanghai durante el primer trimestre de 1964</div><div style="text-align: center;"><span style="font-size: x-large;"><br /></span></div><div style="text-align: justify;"><span style="font-family: arial; font-size: large;"><b>Sólo existía un caso en cual debía indicarse de forma clara que la carne tenía que ser vacuna, y éste era el la población musulmana.</b></span></div><div style="text-align: justify;"><span style="font-family: arial; font-size: large;"><b><br /></b></span></div><div style="text-align: justify;"><span style="font-family: arial; font-size: large;"><b>En concreto, se trataba de los habitantes <i>hui</i>, una de las principales de las más de 50 llamadas "minorías nacionales" que tiene China y que en total representan menos del diez por ciento de su población.</b></span></div><div style="text-align: justify;"><span style="font-family: arial; font-size: large;"><b><br /></b></span></div><div style="text-align: justify;"><span style="font-family: arial; font-size: large;"><b>Los <i>hui</i> son descendientes de poblaciones árabes, persas, turcas y de otras regiones de Asia central que comenzaron a llegar a China en la antiguedad, y que profesan el islamismo. La Región Autónoma Hui de Ningxia es una de las cinco que existen en China. En ella, los <i>hui </i>representan aproximadamente la tercera parte de su población. Sin embargo, se pueden encontrar habitantes <i>hui</i> en todo el territorio chino.</b></span></div><div style="text-align: justify;"><b><br /></b></div><div style="text-align: justify;"><span style="font-family: arial; font-size: large;"><b>Y para los <i>hui</i>, que no comían cerdo, existían cupones especiales como el que vemos a continuación, también con un dibujo:</b></span></div><div style="text-align: justify;"><span style="font-family: arial; font-size: large;"><br /></span></div><div style="text-align: justify;"><div class="separator" style="clear: both; text-align: center;"><a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEiUq5alS7CHS3LlsxcAcPawCe_cL_bQCZK7K25Vrzv2CdSCTjG55ulRNJZJ7JX1yCuFHgyoTjz6X55xS0Wyn9yEFvZ2MFEbke2Yo9bC_ybk_-FX5duescyDk9MxM5nBOSTGiYkRCZdkcR6jSwHdSo4d3KymCTh5AtNwVSzlxuS9NIog8sAQ7IAIspNuXQ/s1079/Huimin%20(002).jpg" style="margin-left: 1em; margin-right: 1em;"><img border="0" data-original-height="704" data-original-width="1079" height="209" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEiUq5alS7CHS3LlsxcAcPawCe_cL_bQCZK7K25Vrzv2CdSCTjG55ulRNJZJ7JX1yCuFHgyoTjz6X55xS0Wyn9yEFvZ2MFEbke2Yo9bC_ybk_-FX5duescyDk9MxM5nBOSTGiYkRCZdkcR6jSwHdSo4d3KymCTh5AtNwVSzlxuS9NIog8sAQ7IAIspNuXQ/s320/Huimin%20(002).jpg" width="320" /></a></div><br /><div style="text-align: center;"><span style="font-family: arial;">"Cupón de carne de vaca para los <i>huimin"</i></span></div><div style="text-align: center;"><span style="font-family: arial;"><i><br /></i></span></div><div style="text-align: justify;"><span style="font-family: arial; font-size: large;"><b>Como los <i>hui</i> no eran los únicos musulmanes en China -por ejemplo están los <i>uigures</i> que habitan la Región Autónoma Uigur de Xinjiang- también había cupones con el nombre de 清真, un sinónimo de "musulmán" usado muy frecuentemente en China.</b></span></div><div style="text-align: justify;"><span style="font-family: arial; font-size: large;"><br /></span></div><div style="text-align: justify;"><div class="separator" style="clear: both; text-align: center;"><a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEhTMsAC3UhLvb5VC_guXXGhHRBMPpQkt83BT2NYfjVSjqQOm4Fi_S-8jYP5KABuWumkF8JJeu_F7EK-B7pshLB8I8oMPg_KO3ynywuSp9txV-oljBB6k63TzXscjM8Nn7LkhrQ1qe_fto-pYXDVSGs5n-gkcTvFh5dQv9WOuBLscCdWvCtreuLlwwi1Cw/s1157/Musulman%20ultimo.jpg" style="margin-left: 1em; margin-right: 1em;"><img border="0" data-original-height="766" data-original-width="1157" height="212" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEhTMsAC3UhLvb5VC_guXXGhHRBMPpQkt83BT2NYfjVSjqQOm4Fi_S-8jYP5KABuWumkF8JJeu_F7EK-B7pshLB8I8oMPg_KO3ynywuSp9txV-oljBB6k63TzXscjM8Nn7LkhrQ1qe_fto-pYXDVSGs5n-gkcTvFh5dQv9WOuBLscCdWvCtreuLlwwi1Cw/s320/Musulman%20ultimo.jpg" width="320" /></a></div><br /><div style="text-align: center;"><span style="font-family: arial;">Cupón de carne de vaca para musulmanes de la municipalidad de Shanghai</span></div><div style="text-align: center;"><br /></div><div style="text-align: center;"><br /></div><div style="text-align: justify;"><span style="font-family: arial; font-size: large;"><span><b>Este tipo de cupones circularon en China hasta finales de la década de los 80 del siglo pasado. En efecto, a</b></span><b> partir del año 1979 el país comienza a aplicar una serie de reformas económicas, en especial en el campo. Entre esas medidas se permite a las familias criar cerdos más allá de los necesarios para sus propias necesidades y vender la carne excedente en lo que se llamaban "mercados libres agrícolas". </b></span></div><div style="text-align: justify;"><span style="font-family: arial; font-size: large;"><b><br /></b></span></div><div style="text-align: justify;"><span style="font-family: arial; font-size: large;"><b>Algo similar tiene lugar con la creación de "parcelas individuales" de tierra para que los campesinos pudieran cultivar verduras y frutas. En cuanto a los cereales, se fijaron cuotas de producción que las familias estaban obligadas a vender al Estado a precios fijados por éste; pero todos los excedentes podían entrar en la cadena de distribución, a precios que fijaba la oferta y la demanda.</b></span></div><div style="text-align: justify;"><b><span style="font-family: arial; font-size: large;"><br /></span></b></div><div style="text-align: justify;"><b><span style="font-family: arial; font-size: large;">Como consecuencia, se incrementó de forma destacada la producción agropecuaria, y hacia finales de la década de los ochenta desaparecieron los cupones, tanto para los cereales como para la carne. </span></b></div><div style="text-align: justify;"><b><span style="font-family: arial; font-size: large;"><br /></span></b></div><div style="text-align: justify;"><b><span style="font-family: arial; font-size: large;">En resumen, fue hace unas más de tres décadas cuando la población china pudo comenzar a comprar y comer carne sin limitaciones, aunque en un principio, ésta seguía siendo principalmente sinónimo de carne de cerdo.</span></b></div><div style="text-align: justify;"><span style="font-family: arial; font-size: large;"><b><br /></b></span></div><div style="text-align: justify;"><span style="font-family: arial; font-size: large;"><b>Es recién en los comienzos del siglo XXI cuando, gracias al espectacular desarrollo económico y social experimentado por China, y la mejora en las condiciones de vida de su población, paulatinamente productos como la carne vacuna o los lácteos comenzaron a ser importados por China para satisfacer las necesidades de sus consumidores. </b></span></div><div style="text-align: justify;"><span style="font-family: arial; font-size: large;"><b><br /></b></span></div><div style="text-align: justify;"><span style="font-family: arial; font-size: large;"><span><b>Esto produjo una especie de revolución agropecuaria en el mundo que</b></span><b> afectó positivamente primero a países como Estados Unidos, Australia o Nueva Zelanda, y posteriormente a Argentina, Brasil y por supuesto Uruguay que vieron cómo se abrían las puertas de un mercado nuevo, con un crecimiento exponencial en su demanda, que ha llevado a la República Oriental -siempre insisto que, con una población similar a la de un simple barrio de Beijing- a convertirse en uno de los principales provedores de carne vacuna de la República Popular.</b></span></div><div style="text-align: justify;"><span style="font-family: arial; font-size: large;"><b><br /></b></span></div><div style="text-align: justify;"><span style="font-family: arial; font-size: large;"><b>Esperamos poder seguir tratando temas relacionados con un posible TLC entre Uruguay y China en próximas "Reflexiones Orientales"</b></span></div><div style="text-align: justify;"><br /></div><div style="text-align: justify;"><span style="font-family: arial; font-size: large;"><b><br /></b></span></div><div style="text-align: justify;"><span style="font-family: arial; font-size: large;"><b>Pablo Rovetta Dubinsky</b></span></div></div></div><p></p>Unknownnoreply@blogger.com0tag:blogger.com,1999:blog-1444445772269538580.post-31607127380346777962022-07-24T08:54:00.018+02:002023-03-19T12:59:11.653+01:00Uruguay da un paso adelante hacia un Tratado de Libre Comercio con China<p><b><span style="font-family: arial; font-size: large;">Uruguay dió un gran paso adelante en su objetivo de alcanzar un Tratado de Libre Comercio (TLC) con China cuando el presidente Luis Lacalle anunció el pasado día 13, la finalización, con resultados positivos, del estudio de factibilidad sobre el mismo. "Ahora sí empezarán formalmente las negociaciones" indicó con satisfacción el mandatario de la República Oriental.</span></b></p><p><b><span style="font-family: arial; font-size: large;">El proceso "oficial" había comenzado en septiembre del año pasado cuando Luis Lacalle Pou informó que el gobierno uruguayo había recibido una respuesta formal de las autoridades chinas en la que se explicaba su disposición de "avanzar en un Tratado de Libre Comercio".</span></b></p><p><b><span></span></b></p><a name='more'></a><p></p><p><b><span style="font-family: arial; font-size: large;">Desde entonces, y más recientemente tras el anuncio de la pasada semana y la Cumbre de Mercosur en Asunción, ese posible TLC ha sido uno de los temas más tratados por la prensa nacional y sobre el cual se han generado más comentarios, críticas, elogios y polémicas, no sólo en el panorama político uruguayo, sino también entre sus otros socios de Mercosur (Argentina, Brasil y Paraguay).</span></b></p><p><span style="font-size: large;"><span style="color: #252525; font-family: arial;"><span style="background-color: white;"><b>Desde estas reflexiones, hoy más</b></span></span><b style="color: #252525; font-family: arial;"> doblemente orientales que nunca, creo que antes de empezar a analizar toda la complejidad relacionada con un TLC, es necesario partir desde lo más básico y hacerse la siguiente pregunta:</b></span></p><p><span style="font-size: large;"><b style="color: #252525; font-family: arial;"><br /></b></span></p><p><b style="color: #252525; font-family: arial;"><span style="font-size: large;"> <u>¿Han sido y son beneficiosas para Uruguay las relaciones con China?</u> </span></b></p><p><b style="color: #252525; font-family: arial;"><span style="font-size: large;"><br /></span></b></p><p><span style="color: #252525; font-family: arial; font-size: large;"><b>En marzo de 2023 se cumplirán 35 años del establecimiento de relaciones diplomáticas entre ambos países. En este período de tiempo, todos los principales partidos políticos uruguayos han estado al frente de diferentes gobiernos, y todos ellos han mantenido excelentes relaciones con la República Popular. Hasta la crisis de la Covid -que originó serias dificultades para los viajes internacionales, en especial hacia Beijing - todos y cada uno de los presidente de la República viajaron de forma oficial a China.</b></span></p><p><span style="color: #252525; font-family: arial; font-size: large;"><b>De esto podemos deducir que las relaciones con China han sido importantes para todos los gobiernos uruguayos desde el retorno de la democracia, independientemente del signo político y de la ideología de los mismos. Por lo tanto, creo que podríamos decir que el mantener unas buenas y estrechas relaciones con el país asiático puede ser, o debería ser, considerado como un tema de Estado para el Uruguay.</b></span></p><p><span style="color: #252525; font-family: arial; font-size: large;"><b>Estas buenas relaciones políticas y diplomáticas no sólo se limitan a la esfera del Poder Ejecutivo, sino que las hemos podido y las podemos ver en otros ámbitos como el parlamentario, en las Intendencias, organismos públicos, organizaciones sociales y partidos políticos. </b></span></p><p><span style="color: #252525; font-family: arial; font-size: large;"><b>Además, no sólo se han limitado al terreno político y económico, sino que de ellas se han beneficiado sectores como la ciencia y tecnología, el deporte y hasta la educación y cultura.</b></span></p><p><b style="color: #252525; font-family: arial;"><span style="font-size: large;">Pero si hay un sector en el cual las relaciones con China han sido y son muy favorables para Uruguay ha sido el del comercio exterior. Y creo que es por ahí por donde deberíamos empezar a analizar el tema.</span></b></p><p><span style="color: #252525; font-family: arial; font-size: large;"><b>Como una imagen vale más que mil palabras, el siguiente gráfico de Uruguay XXI nos puede dar una idea muy clara de la importancia del mercado chino para las exportaciones uruguayas.</b></span></p><p><span style="color: #252525; font-family: arial;"><b><br /></b></span></p><p><span style="color: #252525; font-family: arial;"></span></p><div class="separator" style="clear: both; text-align: center;"><span style="color: #252525; font-family: arial;"><a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEj4s3r4Ig4GnN7W3N73kByzoiwz8RSBfcJBQYVTtszAQkGjojUwJ_hFcWAZzqQ2zoUNAWyWzZctxCd7bvyNG9ww_jKHX9vaR0YJbYfYyQbb4bUZVtdRMibQZQtC_xkm4VxTZMuyWZ1ZP_oTKylIKMk7h9TZMRxbNpe8RwG5kCNCC8urosqNDo8NsMNKFA/s1996/Exportaciones%20primer%20semestre.JPG" style="margin-left: 1em; margin-right: 1em;"><img border="0" data-original-height="1996" data-original-width="1242" height="640" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEj4s3r4Ig4GnN7W3N73kByzoiwz8RSBfcJBQYVTtszAQkGjojUwJ_hFcWAZzqQ2zoUNAWyWzZctxCd7bvyNG9ww_jKHX9vaR0YJbYfYyQbb4bUZVtdRMibQZQtC_xkm4VxTZMuyWZ1ZP_oTKylIKMk7h9TZMRxbNpe8RwG5kCNCC8urosqNDo8NsMNKFA/w398-h640/Exportaciones%20primer%20semestre.JPG" width="398" /></a></span></div><span style="color: #252525; font-family: arial;"><br /><b><br /></b></span><p></p><p><span style="color: #252525; font-family: arial; font-size: large;"><b>China no es sólo, con una gran diferencia, el principal cliente de las exportaciones uruguayas, sino que lo que compra ese mercado es equivalente al total de lo que Uruguay exporta a Brasil, Argentina y toda la Unión Europea juntos.</b></span></p><p><span style="color: #252525; font-family: arial; font-size: large;"><b>Estas estadísticas corresponden al primer semestre de este año. Para tener una idea más amplia, veamos cuál ha sido la evolución, y la composición por rubros, de las exportaciones a la República Popular en los últimos años, siempre con información de Uruguay XXI.</b></span></p><p><span style="color: #252525; font-family: arial;"><b><br /></b></span></p><p><span style="color: #252525; font-family: arial;"></span></p><div class="separator" style="clear: both; text-align: center;"><a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEjveHK7dMhbErebl7SAbxz3s-puq2Oq8hz8troiM7TgglIhQ2APM5Un1m1IG8yMD9zQYANM_xs4ccpGPPSzIxiaog2iaUjOrd4Whl2uBDiKICfglxPWBfGCBBdi-82tj1ZLblSbnUE1-Pv8ApgN_dkFhm1hJ0bZ1Kjt4DD1ca2bLCcH67Mdy-aKcOOGAg/s1345/Evoluci%C3%B3n%20exportaciones%20a%20China.JPG" style="margin-left: 1em; margin-right: 1em;"><img border="0" data-original-height="504" data-original-width="1345" height="150" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEjveHK7dMhbErebl7SAbxz3s-puq2Oq8hz8troiM7TgglIhQ2APM5Un1m1IG8yMD9zQYANM_xs4ccpGPPSzIxiaog2iaUjOrd4Whl2uBDiKICfglxPWBfGCBBdi-82tj1ZLblSbnUE1-Pv8ApgN_dkFhm1hJ0bZ1Kjt4DD1ca2bLCcH67Mdy-aKcOOGAg/w400-h150/Evoluci%C3%B3n%20exportaciones%20a%20China.JPG" width="400" /></a></div><br /><div class="separator" style="clear: both; text-align: center;"><br /></div><span style="color: #252525; font-family: arial;"><br /></span><p></p><p><span style="color: #252525; font-family: arial; font-size: large;"><b>Parece claro, por lo tanto, que cuando hablamos del comercio exterior con China no nos estamos refiriendo a un hecho puntual sino a una tendencia al alza. Se puede ver claramente cómo el año pasado -muy difícil para el comercio internacional por los efectos de la Covid- el volumen de lo exportado al país asiático llegó a su mejor nivel en la historia, y seguramente batirá otro récord al final del presente.</b></span></p><p><b style="color: #252525; font-family: arial;"><span style="font-size: large;">Otro hecho destacable en la evolución de las exportaciones al país asiático ha sido la progresiva diversificación de los rubros. Es bueno recordar que hasta hace menos de dos décadas Uruguay "solo" vendía a China principalmente lana, y en segundo lugar cueros.</span></b></p><p><span style="color: #252525; font-family: arial; font-size: large;"><b>Ahora el país asiático es el principal comprador de carne uruguaya, aparte de un importante cliente para la soja y la madera y la celulosa. Al mismo tiempo, hay otros sectores, como el de los productos lácteos, donde China ya es uno de los principales clientes de Uruguay.</b></span></p><p><b style="color: #252525; font-family: arial;"><span style="font-size: large;">Para terminar con las gráficas, veamos -también gracias a la información de Uruguay XXI- la evolución de la balanza comercial entre Uruguay y China.</span></b></p><p><span style="color: #252525; font-family: arial;"><b><br /></b></span></p><p><span style="color: #252525; font-family: arial;"></span></p><div class="separator" style="clear: both; text-align: center;"><span style="color: #252525; font-family: arial;"><a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEj7Jeaj2KoZDQF4zva9sP5Pb38uZLXNwVHuCD39uvrCWAJnTU23TVnDolQzxflCUtSisuGKxhEpABokiL5E40bZDPRSeU26JzCdZYBGqGfuZUjde4CoSCrrvHa0APwb0LTMbZY_h2DzYlzZvbtbvf6o7cEOGTlsolDkiyuamvukoxvECNpPWzzG71yMdw/s768/Exportaciones%20por%20destino.JPG" style="margin-left: 1em; margin-right: 1em;"><img border="0" data-original-height="768" data-original-width="574" height="640" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEj7Jeaj2KoZDQF4zva9sP5Pb38uZLXNwVHuCD39uvrCWAJnTU23TVnDolQzxflCUtSisuGKxhEpABokiL5E40bZDPRSeU26JzCdZYBGqGfuZUjde4CoSCrrvHa0APwb0LTMbZY_h2DzYlzZvbtbvf6o7cEOGTlsolDkiyuamvukoxvECNpPWzzG71yMdw/w478-h640/Exportaciones%20por%20destino.JPG" width="478" /></a></span></div><span style="color: #252525; font-family: arial; font-size: large;"><b>Como se puede apreciar claramente, desde hace ya nueve años, y seguramente el presente será el décimo, la balanza comercial es netamente favorable a Uruguay, habiendo alcanzado en el 2021 un récord histórico.</b></span><p></p><p><span style="font-size: large;"><span style="color: #252525; font-family: arial;"><b>Volviendo entonces a la pregunta que nos hacíamos al principio:</b></span><b style="color: #252525; font-family: arial;"> ¿Han sido y son beneficiosas para Uruguay las relaciones con China? Creo que las cifras mostradas dan una respuesta clara.</b></span></p><p><b style="color: #252525; font-family: arial;"><span style="font-size: large;">Quedan aún muchos temas por tratar. Por ejemplo, ¿a qué se ha debido el cambio en la composición de las exportaciones uruguayas a China, y por lo tanto su incremento? ¿cómo un país como Uruguay -"chiquito" y con la población de un barrio de Beijing- se ha convertido en un importante suministrador de alimentos para el país más poblado de la tierra? ¿cómo han podido los productos uruguayos del sector agropecuario entrar en un mercado tan lejano, tan exigente, tan estricto en sus normas y con una competencia tan fuerte como lo es China? ¿cuál es la presencia de Uruguay hoy en China y como es percibido entre su población?</span></b></p><p><span style="color: #252525; font-family: arial; font-size: large;"><b>Como vemos, incluso antes de empezar a reflexionar sobre el posible TLC, son muchos aún los temas de interés a tratar y esperamos seguir haciéndolo desde estas Reflexiones Orientales.</b></span></p><p><span style="font-size: large;"><span style="color: #252525; font-family: arial;"><b>@Pablo Rovetta Dubinsky</b></span><b style="color: #252525; font-family: arial;"> </b></span></p>Unknownnoreply@blogger.com0tag:blogger.com,1999:blog-1444445772269538580.post-42687837642009909422022-05-26T12:23:00.003+02:002023-03-19T13:00:01.021+01:00Distancias geográficas - Distancias psicológicas<p><span style="font-family: inherit; font-size: x-large;">Leo en un diario de España un artículo que comienza con la siguiente frase: <i>Hay pocos países más alejados de España geográfica y culturalmente que China.</i></span></p><p><span style="font-size: x-large;">Me hizo acordar a tiempos que ya parecen lejanos, cuando se realizaban con mucha frecuencia en España seminarios empresariales sobre cómo entrar en el mercado chino y se indicaban cuáles eran las dificultades para acercase a la República Popular.</span></p><p><span></span></p><a name='more'></a><p></p><p><span style="font-size: x-large;">Casi siempre surgía la comparación con América Latina y la pregunta que se planteaba era ¿por qué las empresas españolas -"tan exitosas en América Latina"- tenían dificultades, en comparación con los países de "nuestro entorno", para "conquistar" el mercado chino?</span></p><p><span style="font-size: x-large;">Se mencionaba lo difícil que es el idioma chino. Y siendo esto verdad, nadie se preguntaba por qué los países del entorno de España tenían una presencia mayor en China, como si para los alemanes, británicos, italianos o franceses el chino fuese un idioma más fácil que para los españoles.</span></p><p><span style="font-size: x-large;">Otro de los tópicos era "la distancia". China quedaba "muy lejos" de España, como da a entender esa frase del medio de prensa.</span></p><p><span style="font-size: x-large;">Si uno se toma un taxi para el Aeropuerto de Madrid-Barajas y le dice al taxista que va a viajar a Buenos Aires, a éste le parecerá algo "normal", como quien viaja a Vigo. Pero si dice que va a volar a China, entonces casi siempre se asombra por lo "lejos" que va.</span></p><p><span style="font-size: x-large;">Aún hoy, la sensación en general es que China, como dice la frase del artículo está, geográficamente, muy lejos de España.</span></p><p><span style="font-size: x-large;"><br /></span></p><p></p><div class="separator" style="clear: both; text-align: center;"><a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEhFIgRiyeWCiiqv7HirXjGAkF0Xb31trgvND546kUo3bDl53ZKbD0MhRnt9ZbAZadpaaGUZ8HQP-VQckXTwXBS1GgWHQtZGWB5KmeXOy4h2db-lJNtMfxdzoRT6LyvskV-eSQQgkRY5szgKTK7TRANcLEflIaYFCjjgRM18nFKIrL9YXeYkPKCJbI3DdQ/s3072/AIr%20China.JPG" style="margin-left: 1em; margin-right: 1em;"><img border="0" data-original-height="3072" data-original-width="2304" height="640" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEhFIgRiyeWCiiqv7HirXjGAkF0Xb31trgvND546kUo3bDl53ZKbD0MhRnt9ZbAZadpaaGUZ8HQP-VQckXTwXBS1GgWHQtZGWB5KmeXOy4h2db-lJNtMfxdzoRT6LyvskV-eSQQgkRY5szgKTK7TRANcLEflIaYFCjjgRM18nFKIrL9YXeYkPKCJbI3DdQ/w480-h640/AIr%20China.JPG" width="480" /></a></div><br /><span style="font-size: x-large;"><br /></span><p></p><p><span style="font-size: x-large;">Es verdad que el país asiático no está cerca de la peninsula ibérica; pero desde el punto de vista geográfico también es verdad que hay muchos países de América Latina que están más alejados, aunque psicológicamente poca gente lo considere así.</span></p><p><span style="font-size: x-large;">La distancia en línea recta entre Madrid y Beijing, según Google, es de 9.222 kilómetros. Un viaje de vuelo directo de unas doce horas.</span></p><p><span style="font-size: x-large;">Según la misma fuente, Madrid está a 9.513 kilómetros de Lima, 9.941 de Montevideo, 10.039 de Buenos Aires y 10.695 de Santiago de Chile. Estos cuatro destinos están por lo tanto más lejos de Madrid que de Beijing (si consideramos sus capitales y no sus fronteras) sin que casi nadie mencione el tema de la distancia.</span></p><p><span style="font-size: x-large;">A esos destinos podríamos agregar Ciudad de México o Asunción, un poco más cercanas que de Beijing, pero separadas por más de 9.000 kilómetros de la capital española.</span></p><p><span style="font-size: x-large;">Por ello, en comparación con muchos países de América Latina, desde el punto de vista geográfico China está más cerca de España. Y así lo que separa a España de China, y lo que la acerca a América Latina no son las distancias geográficas, sino lo que podríamos llamar distancias "psicológicas".</span></p><p><span style="font-size: x-large;">Por otro lado, es verdad que desde el punto de vista cultural, España y China son países muy alejados entre sí. Pero, China ¿es uno de los "pocos"? ¿Y qué pasa con tantos países de Asia Central y Oriental, de África y Oriente Medio con formas de vestir, organización de la sociedad y hasta influencias religiosas tan diferentes y distantes no sólo de España, sino incluso de la propia China?</span></p><p><span style="font-size: x-large;">Sólo como ejemplo podríamos citar a India, países del Golfo o incluso algunos del norte de África, éstos últimos tan cercanos geográficamente a España. ¿Acaso no están culturalmente muy alejados de España, aunque geográficamente mucho más cercanos que China?</span></p><p><span style="font-size: x-large;">En el fondo de esto subyace un "eurocentrismo" que en cierto modo también se ve en los países latinoamericanos, donde, empezando por la eduación, ni se habla de la historia y cultura de miles de millones de habitantes (sólo entre China e India ya son más de 2.500) que representan demográfica y geográficamente la mayoría del planeta.</span></p><p><span style="font-size: x-large;">Y asi, lamentablemente, con mucha frecuencia cuando se habla de "el mundo", en el fondo no se está teniendo en cuenta a esa gran mayoria de la tierra.</span></p><p><span style="font-size: x-large;">Es una pena que, a pesar de los muy modernos medios tecnológicos que nos permiten acercarnos a los rincones más perdidos del planeta, en la práctica, el conocimiento de esos países fuera de la esfera de Europa y el llamado mundo "occidental" sea ahora mucho más pobre que cuando sólo teníamos los libros y las enciclopedias de papel.</span></p><p><span style="font-size: x-large;">@PabloRovetta</span></p><p><br /></p>Unknownnoreply@blogger.com0tag:blogger.com,1999:blog-1444445772269538580.post-86521361236711594942022-04-23T09:29:00.010+02:002023-03-19T13:03:25.476+01:00Los años setenta en China - Recuerdos de un oriental en Oriente (Prólogo)<span style="background-color: white; font-size: large;"><b style="text-indent: 14.2pt;"><span style="font-family: "Times New Roman", serif; line-height: 150%;"><div style="text-align: right;"><b style="text-indent: 14.2pt;"><span style="font-family: "Times New Roman", serif; line-height: 150%;">Oriental
</span></b><span style="font-family: "Times New Roman", serif; line-height: 150%; text-indent: 14.2pt;">«</span><span style="font-family: "Times New Roman", serif; line-height: 150%; text-indent: 14.2pt;">(del lat. <i>orientalis</i>) Adj. 1.
Natural del oriente o de</span></div></span></b></span><div style="text-align: right;"><span style="background-color: white; font-family: "Times New Roman", serif; line-height: 150%; text-indent: 14.2pt;"><span style="font-size: large;">Oriente (Asia y regiones inmediatas) […] </span></span></div><div style="text-align: right;"><span style="background-color: white; font-family: "Times New Roman", serif; line-height: 150%; text-indent: 14.2pt;"><span style="font-size: large;">5. <b>Uruguayo. Aplicado a personas. Usado
también como sustantivo</b>».</span></span></div><div style="text-align: right;"><i style="text-indent: 14.2pt;"><span style="background-color: white; font-family: "Times New Roman", serif; line-height: 150%;"><span style="font-size: large;">Diccionario
de la lengua española. Real Academia Española.</span></span></i></div><div><span style="background-color: white; font-family: "Times New Roman", serif; font-size: 12pt; text-align: justify; text-indent: 14.2pt;"><br /></span></div><div><span style="background-color: white; font-family: "Times New Roman", serif; text-align: justify; text-indent: 14.2pt;"><span style="font-size: large;"><b><br /></b></span></span></div><div><span style="background-color: white; font-family: "Times New Roman", serif; text-align: justify; text-indent: 14.2pt;"><span style="font-size: large;"><b>El avión de Swissair, casi vacío,
aterrizó la noche del siete de julio de 1975 en el aeropuerto «La Capital» de
Pekín. Cuando salí para bajar por la escalerilla, me golpeó una ola de calor
húmedo mientras, en medio de una mansa llovizna, un retrato de Mao Zedong me
miraba como dándome la bienvenida a la República Popular China.</b></span></span></div><div><span style="background-color: white; font-family: "Times New Roman", serif; text-align: justify; text-indent: 14.2pt;"><span style="font-size: large;"><b><br /></b></span></span></div><div><span style="background-color: white; font-family: "Times New Roman", serif; text-align: justify; text-indent: 14.2pt;"><span style="font-size: large;"><b>Yo tenía diecisiete años y viajaba
con mi hermana Laura, un año menor, y con mis padres, y desde entonces y
durante más de diez años fuimos los únicos uruguayos que vivimos en el país más
poblado de la Tierra. Ese día marcó para mí el comienzo de una relación directa
con China que ya lleva casi medio siglo.</b></span></span></div><div><span style="background-color: white; font-family: "Times New Roman", serif; text-align: justify; text-indent: 14.2pt;"><span style="font-size: large;"><span><a name='more'></a></span></span></span></div><div><b style="background-color: white; font-family: "Times New Roman", serif; text-align: justify; text-indent: 14.2pt;"><span style="font-size: large;">Venía de una ciudad como Montevideo
que está considerada la capital más alejada de Pekín en el mundo, del sur al norte,
de Occidente a Oriente, del Atlántico al Pacífico, del invierno al verano y del
capitalismo al socialismo.</span></b></div><div><span style="background-color: white; font-family: "Times New Roman", serif; text-align: justify; text-indent: 14.2pt;"><span style="font-size: large;"><b><br /></b></span></span></div><div><span style="background-color: white; font-family: "Times New Roman", serif; text-align: justify; text-indent: 14.2pt;"><span style="font-size: large;"><b>Estábamos justo del otro lado de la tierra
donde había nacido, y para mí fue como llegar a otro mundo, en el cual,
mientras mis padres trabajaban, mi hermana y yo dedicamos los primeros años a
los estudios.</b></span></span></div><div><span style="background-color: white; font-family: "Times New Roman", serif; text-align: justify; text-indent: 14.2pt;"><span style="font-size: large;"><b><br /></b></span></span></div><div><span style="background-color: white; font-family: "Times New Roman", serif; text-align: justify; text-indent: 14.2pt;"><span style="font-size: large;"><b>Ellos ejercieron como correctores de
estilo de español en Ediciones en Lenguas Extranjeras —organismo oficial
encargado de la publicación de revistas y libros en diferentes idiomas—, y
formaron parte de lo que los chinos llamaban «expertos extranjeros».</b></span></span></div><div><span style="background-color: white; font-family: "Times New Roman", serif; line-height: 150%; text-align: justify; text-indent: 14.2pt;"><span style="font-size: large;"><b><br /></b></span></span></div><div><span style="background-color: white; font-size: large;"><b><span style="font-family: "Times New Roman", serif; line-height: 150%; text-align: justify; text-indent: 14.2pt;">Mi hermana y yo estuvimos dos años
estudiando chino en el entonces llamado Instituto de Lenguas de Pekín (</span><span lang="ZH-CN" style="font-family: SimSun; line-height: 150%; text-align: justify; text-indent: 14.2pt;">北京语言学院</span><span style="font-family: "Times New Roman", serif; line-height: 150%; text-align: justify; text-indent: 14.2pt;">) —en la
actualidad Universidad de Lengua y Cultura de Pekín (</span><span lang="ZH-CN" style="font-family: SimSun; line-height: 150%; text-align: justify; text-indent: 14.2pt;">北京语言大学</span><span style="font-family: "Times New Roman", serif; line-height: 150%; text-align: justify; text-indent: 14.2pt;">)— y luego entr</span><span style="font-family: "Times New Roman", serif; line-height: 150%; text-align: justify; text-indent: 14.2pt;">é a
Qinghua ( </span><span lang="ZH-CN" style="font-family: SimSun; line-height: 150%; text-align: justify; text-indent: 14.2pt;">清华大学</span><span style="font-family: "Times New Roman", serif; line-height: 150%; text-align: justify; text-indent: 14.2pt;">), una de las dos universidades</span><span style="font-family: "Times New Roman", serif; line-height: 150%; text-align: justify; text-indent: 14.2pt;"> más prestigiosas
del país. Allí estuve cinco años cursando en chino la carrera de Informática, donde
obtuve mi licenciatura, y coincidí durante un tiempo con el actual presidente
Xi Jinping que entonces estaba en la facultad de Química.</span></b></span></div><div><span style="background-color: white; font-family: "Times New Roman", serif; text-align: justify; text-indent: 14.2pt;"><span style="font-size: large;"><b><br /></b></span></span></div><div><span style="background-color: white; font-family: "Times New Roman", serif; text-align: justify; text-indent: 14.2pt;"><span style="font-size: large;"><b>En plena Guerra Fría, había llegado a
una China donde aún vivía el Presidente Mao, que seguía convulsionada por la
Revolución Cultural y muy aislada del y por el mundo. Allí pude ser testigo de
acontecimientos históricos como la muerte del también conocido como «Gran
Timonel», tensas luchas políticas con multitudinarias manifestaciones, incidentes
en la famosa plaza de Tian’anmen, la caída de «La Banda de los Cuatro»,
liderada por la viuda de Mao, y el comienzo de la política de reformas y
apertura al exterior.</b></span></span></div><div><span style="background-color: white; font-family: "Times New Roman", serif; text-align: justify; text-indent: 14.2pt;"><span style="font-size: large;"><b><br /></b></span></span></div><div><span style="background-color: white; font-family: "Times New Roman", serif; text-align: justify; text-indent: 14.2pt;"><span style="font-size: large;"><b><br /></b></span></span></div><div><span style="background-color: white; font-family: "Times New Roman", serif; text-align: justify; text-indent: 14.2pt;"><span style="font-size: large;"><div class="separator" style="clear: both; text-align: center;"><div class="separator" style="clear: both; text-align: center;"><a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEhN5qNzsqgxIcbejrcCzSAl7Y-k8hyZfk86dAGsLttnWxtQypnBI7Ns27iDQpOEIKbU9eR2AfGKmLX9jBelEZTQ1mZFieas9zSg0EOESordpJeu_tZz2ur0vc0oAJpICtIBN_TztSZJEmATqW6qShVPqCajoudVZUsBb_CFtj2fJ7skfGennX89FrPSnA/s504/Portada%201.jpg" style="margin-left: 1em; margin-right: 1em;"><img border="0" data-original-height="504" data-original-width="360" height="320" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEhN5qNzsqgxIcbejrcCzSAl7Y-k8hyZfk86dAGsLttnWxtQypnBI7Ns27iDQpOEIKbU9eR2AfGKmLX9jBelEZTQ1mZFieas9zSg0EOESordpJeu_tZz2ur0vc0oAJpICtIBN_TztSZJEmATqW6qShVPqCajoudVZUsBb_CFtj2fJ7skfGennX89FrPSnA/s320/Portada%201.jpg" width="229" /></a><a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEiAiBKdBIh327HRDF1Vo9uO1IlG6RQCFkF14o5FTr8baKbp1V7LssNlpMXJql32HgHy3mTqdDGhEhYfXYUPwi02aK6LAIwtwOr0H4P0-EUfewgK8P_f3fRYUuFra2wj6eT879-DXRrYIrBXrJiPTaqK54fk3X1RS-m9ov-Y1EPzaYGsOWDCo1sD_Yq-BQ/s500/Portada%202.jpg" style="margin-left: 1em; margin-right: 1em;"><img border="0" data-original-height="500" data-original-width="348" height="320" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEiAiBKdBIh327HRDF1Vo9uO1IlG6RQCFkF14o5FTr8baKbp1V7LssNlpMXJql32HgHy3mTqdDGhEhYfXYUPwi02aK6LAIwtwOr0H4P0-EUfewgK8P_f3fRYUuFra2wj6eT879-DXRrYIrBXrJiPTaqK54fk3X1RS-m9ov-Y1EPzaYGsOWDCo1sD_Yq-BQ/s320/Portada%202.jpg" width="223" /></a></div></div><br /></span></span><p style="text-align: left;"><b style="background-color: white; font-family: "Times New Roman", serif; text-align: justify; text-indent: 14.2pt;"><span style="font-size: large;">También en la capital china viví el
primer terremoto de mi vida, el que está considerado uno de los movimientos
sísmicos más devastadores de la historia moderna del mundo.</span></b></p></div><div><span style="background-color: white; font-family: "Times New Roman", serif; text-align: justify; text-indent: 14.2pt;"><span style="font-size: large;"><b>En medio de una muy reducida colonia
extranjera, y sin los modernos medios actuales de comunicación e información —internet,
celulares, televisión por satélite— vivimos varios años prácticamente aislados
del mundo. Nada más llegar, y al ver que un barrio de Pekín tenía más
habitantes que todo el Uruguay, aprendí a relativizar las cosas y cambiaron las
nociones que hasta entonces tenía sobre lo que era grande o pequeño, mucho o
poco, viejo o nuevo. También añoré cosas en principio insignificantes a las que
no les había prestado atención en el pasado, como, por ejemplo, un buen café,
un limón, el olor y la vista del mar, el canto de los teros, o el sabor del
dulce de leche o de membrillo.</b></span></span></div><div><span style="background-color: white; font-family: "Times New Roman", serif; text-align: justify; text-indent: 14.2pt;"><span style="font-size: large;"><b><br /></b></span></span></div><div><span style="background-color: white; font-family: "Times New Roman", serif; text-align: justify; text-indent: 14.2pt;"><span style="font-size: large;"><b>Para mis padres, seguir tomando mate
fue uno de sus mayores retos, y más de una vez los llegué a ver usando
literalmente «la yerba de ayer secándose al sol», como dice el tango</b></span></span></div><div><span style="background-color: white; font-family: "Times New Roman", serif; text-align: justify; text-indent: 14.2pt;"><span style="font-size: large;"><b><br /></b></span></span></div><div><span style="background-color: white; font-family: "Times New Roman", serif; text-align: justify; text-indent: 14.2pt;"><span style="font-size: large;"><b>Mi vida y la de mi familia cambiaron
por completo en casi todos los aspectos; la comida, los horarios, las
costumbres, la vestimenta, y tuvimos que acostumbrarnos a muchas cosas nuevas,
como tomar agua caliente en pleno verano.</b></span></span></div><div><span style="background-color: white; font-family: "Times New Roman", serif; text-align: justify; text-indent: 14.2pt;"><span style="font-size: large;"><b><br /></b></span></span></div><div><span style="background-color: white; font-family: "Times New Roman", serif; text-align: justify; text-indent: 14.2pt;"><span style="font-size: large;"><b>Allí pasé por diferentes etapas,
desde la experiencia de estar siete años en dos universidades, trabajar como
periodista para la Agencia EFE, dedicarme a la promoción y a realizar estudios
de mercado para la Oficina Comercial de la Embajada de España, hasta trabajar
en una empresa muy relacionada directamente con un sector clave en la economía,
como es el mundo del petróleo.</b></span></span></div><div><span style="background-color: white; font-family: "Times New Roman", serif; text-align: justify; text-indent: 14.2pt;"><span style="font-size: large;"><b><br /></b></span></span></div><div><span style="background-color: white; font-family: "Times New Roman", serif; text-align: justify; text-indent: 14.2pt;"><span style="font-size: large;"><b>Mientras estudiaba en la universidad,
y como parte de los métodos de educación de esos años, trabajé en dos fábricas
y en una Comuna Popular en el campo. También me manifesté en dos ocasiones en
la plaza de Tian’anmen, la primera vez para condenar a Deng Xiaoping y la
segunda para celebrar la caída de «La Banda de los Cuatro».</b></span></span></div><div><span style="background-color: white; font-family: "Times New Roman", serif; text-align: justify; text-indent: 14.2pt;"><span style="font-size: large;"><b><br /></b></span></span></div><div><span style="background-color: white; font-family: "Times New Roman", serif; text-align: justify; text-indent: 14.2pt;"><span style="font-size: large;"><b>He podido vivir China bajo diversos
líderes, desde Mao Zedong, hasta posteriormente Hua Guofeng, Deng Xiaoping, Hu
Yaobang, Zhao Ziyang, Li Peng, Yang Shankun, Jiang Zemin, Hu Jintao, Wen Jiabao
y ahora Xi Jinping.</b></span></span></div><div><span style="background-color: white; font-family: "Times New Roman", serif; text-align: justify; text-indent: 14.2pt;"><span style="font-size: large;"><b><br /></b></span></span></div><div><span style="background-color: white; font-family: "Times New Roman", serif; text-align: justify; text-indent: 14.2pt;"><span style="font-size: large;"><b>Fui testigo directo de lo que pasó en
el país antes, durante y después del llamado proceso de reformas y apertura al
exterior que se inició a finales de diciembre de 1978. Para que un ciudadano
local en la actualidad haya vivido ese mismo período debería tener unos sesenta
años. Por lo tanto, me tocó vivir y ser testigo de acontecimientos que una gran
parte de la población china solo conoce hoy, en el mejor de los casos, por historias
familiares, películas o libros.</b></span></span></div><div><span style="background-color: white; font-family: "Times New Roman", serif; text-align: justify; text-indent: 14.2pt;"><span style="font-size: large;"><b><br /></b></span></span></div><div><span style="background-color: white; font-family: "Times New Roman", serif; text-align: justify; text-indent: 14.2pt;"><span style="font-size: large;"><b>Así tuve la oportunidad de vivir una
experiencia única, muy enriquecedora en muchos aspectos y que me generó una
forma de ver el mundo y las cosas desde otro ángulo y con otras dimensiones.</b></span></span></div><div><span style="background-color: white; font-family: "Times New Roman", serif; text-align: justify; text-indent: 14.2pt;"><span style="font-size: large;"><b><br /></b></span></span></div><div><span style="background-color: white; font-family: "Times New Roman", serif; text-align: justify; text-indent: 14.2pt;"><span style="font-size: large;"><b>Tras la muerte de Mao fui viendo los
pequeños y paulatinos cambios que iban teniendo lugar, desde la llegada de la
Coca-Cola hasta la transformación de varios aspectos de la vida diaria: la
vestimenta, el suministro en las tiendas, los servicios, la oferta cultural y
hasta las costumbres y hábitos de su población,</b></span></span></div><div><span style="background-color: white; font-family: "Times New Roman", serif; text-align: justify; text-indent: 14.2pt;"><span style="font-size: large;"><b><br /></b></span></span></div><div><span style="background-color: white; font-family: "Times New Roman", serif; text-align: justify; text-indent: 14.2pt;"><span style="font-size: large;"><b>Los cambios que ha experimentado
China en estos más de cuarenta años han sido tan espectaculares —cosa que nadie
en el mundo pone en duda— que podría decir, sin exagerar, que dentro de un
mismo territorio, en el fondo, he vivido en dos o más países diferentes.</b></span></span></div><div><span style="background-color: white; font-family: "Times New Roman", serif; text-align: justify; text-indent: 14.2pt;"><span style="font-size: large;"><b><br /></b></span></span></div><div><span style="background-color: white; font-family: "Times New Roman", serif; text-align: justify; text-indent: 14.2pt;"><span style="font-size: large;"><b>Si me hubiese quedado dormido a
finales de 1975 y despertara ahora, prácticamente no reconocería ni la ciudad
ni el país, salvo, quizás, por alguna imagen familiar como la plaza de
Tian’anmen; utilizaría expresiones que casi nadie entendería, y tampoco
comprendería muchas palabras de la actualidad.</b></span></span></div><div><span style="background-color: white; font-family: "Times New Roman", serif; text-align: justify; text-indent: 14.2pt;"><span style="font-size: large;"><b><br /></b></span></span></div><div><span style="background-color: white; font-family: "Times New Roman", serif; text-align: justify; text-indent: 14.2pt;"><span style="font-size: large;"><b>Para muchos, la experiencia vivida me
convertiría en un «experto». Sin embargo, a medida que ha ido pasando el
tiempo, he sido cada vez más consciente de la complejidad de todo lo
relacionado con el mundo chino y de lo difícil que es hablar o escribir sobre
el país.</b></span></span></div><div><span style="background-color: white; font-family: "Times New Roman", serif; text-align: justify; text-indent: 14.2pt;"><span style="font-size: large;"><b><br /></b></span></span></div><div><span style="background-color: white; font-family: "Times New Roman", serif; text-align: justify; text-indent: 14.2pt;"><span style="font-size: large;"><b>Llevaba décadas pensando en escribir
un libro, mientras que cuanto más pasaba el tiempo, más difícil se me hacía,
como le ocurre a mucha gente después de largas temporadas viviendo en China. Creo
que son una muy reducida minoría los que, después de haber residido décadas o
incluso nacido en Pekín, han escrito algo —muchas veces ni siquiera un artículo—
sobre su experiencia o aspectos del gigante asiático.</b></span></span></div><div><span style="background-color: white; font-family: "Times New Roman", serif; text-align: justify; text-indent: 14.2pt;"><span style="font-size: large;"><b><br /></b></span></span></div><div><span style="background-color: white; font-family: "Times New Roman", serif; text-align: justify; text-indent: 14.2pt;"><span style="font-size: large;"><b>Los pocos que conozco que lo han
hecho, ha sido después de muchos años y en algunos casos de una forma muy
particular, refiriéndose a etapas y casos muy concretos. Y conozco a muchas
personas, de todos los continentes, que hablan un chino perfecto y conocen
todas las costumbres locales, que han vivido experiencias mucho más
interesantes que la mía, pero que no han escrito ni una sola línea.</b></span></span></div><div><span style="background-color: white; font-family: "Times New Roman", serif; text-align: justify; text-indent: 14.2pt;"><span style="font-size: large;"><b><br /></b></span></span></div><div><span style="background-color: white; font-family: "Times New Roman", serif; text-align: justify; text-indent: 14.2pt;"><span style="font-size: large;"><b>En teoría, parece un país fácil de
entender tras una breve estancia —«los chinos son así», «a los chinos no les
gusta esto», «los chinos prefieren aquello», y un largo etc.—, pero, con el
paso del tiempo, estoy cada vez más convencido de lo complejo que es. Aparte de
ser una nación milenaria, los cambios han sido y son casi constantes, surgen
sin cesar cosas nuevas, al tiempo que otras desaparecen o regresan del pasado.
Lo que hoy es «bueno» hasta ayer podía ser «malo», o viceversa; lo blanco se
podía transformar en negro, para volver a ser blanco en algún caso, o gris en
otro. Si en muchos aspectos los cambios se producen a una velocidad
supersónica, en otros el país parece haberse quedado estancado en alguna de sus
milenarias dinastías.</b></span></span></div><div><span style="background-color: white; font-family: "Times New Roman", serif; text-align: justify; text-indent: 14.2pt;"><span style="font-size: large;"><b><br /></b></span></span></div><div><span style="background-color: white; font-family: "Times New Roman", serif; text-align: justify; text-indent: 14.2pt;"><span style="font-size: large;"><b>Por eso, cuando más tiempo se está
relacionado con China, más cuesta no solo escribir, sino, simplemente, hablar
del país. Por lo menos ese es mi caso y el de gente que conozco y que ya lleva
décadas —o toda una vida— como residentes. Al final, sin embargo, me he
decidido a dejar una constancia por escrito de lo vivido, para que aquellos
interesados en el gigante asiático tengan un testimonio de lo que fui testigo
en una etapa muy especial de su historia y que espero resulte de interés. Creo
que en español se pueden encontrar muchas versiones y análisis sobre la China
de hoy, o sobre el proceso de reformas que ya lleva más de cuatro décadas; pero
no sé si pasa lo mismo con la época anterior a ese proceso, que, en mi opinión,
abarcó, en un corto período de tiempo, los años de cambios más radicales y
espectaculares en la historia reciente de la República Popular.</b></span></span></div><div><span style="background-color: white; font-family: "Times New Roman", serif; text-align: justify; text-indent: 14.2pt;"><span style="font-size: large;"><b><br /></b></span></span></div><div><span style="background-color: white; font-family: "Times New Roman", serif; text-align: justify; text-indent: 14.2pt;"><span style="font-size: large;"><b>En las páginas que siguen lo que
intento reflejar es cómo era el país en los años setenta, cómo viví en él, las
cosas que veía y que en algunos casos no entendía o no me gustaban. Son
recuerdos, impresiones y reflexiones de esa época, intentando también hacer en algunos
casos una comparación con la actualidad.</b></span></span></div><div><span style="background-color: white; font-family: "Times New Roman", serif; text-align: justify; text-indent: 14.2pt;"><span style="font-size: large;"><b><br /></b></span></span></div><div><span style="background-color: white; font-family: "Times New Roman", serif; text-align: justify; text-indent: 14.2pt;"><span style="font-size: large;"><b>Para los lectores no familiarizados
con la historia de mi país me gustaría destacar que lo que hoy es la República
Oriental del Uruguay era conocida en la época de la colonia como la «Banda
Oriental» del Virreinato del Río de la Plata, por encontrarse al este del río
Uruguay, y por eso «oriental» ha sido y es también sinónimo de uruguayo o de
todo lo relacionado con Uruguay. De ahí que estos sean recuerdos doblemente
orientales: de un «oriental» uruguayo, y sobre este nunca mejor llamado lejano
Oriente.</b></span></span></div><div><span style="background-color: white; font-family: "Times New Roman", serif; text-align: justify; text-indent: 14.2pt;"><span style="font-size: large;"><b><br /></b></span></span></div><div><span style="background-color: white; font-size: large;"><b><span style="font-family: "Times New Roman", serif; text-align: justify; text-indent: 14.2pt;">Este libro ha sido escrito basado en
lo que me queda de memoria de esos años, y las fuentes utilizadas, en especial
para mencionar citas, fechas o nombres, provienen de mi archivo personal de
publicaciones de la época que aún conservo, aunque en algún caso he debido
recurrir a fuentes chinas para refrescar algunos episodios, entre ellas la hemeroteca
del </span><i style="font-family: "Times New Roman", serif; text-align: justify; text-indent: 14.2pt;">Diario del Pueblo</i><span style="font-family: "Times New Roman", serif; text-align: justify; text-indent: 14.2pt;">, el principal
órgano de prensa del país.</span></b></span></div><div><span style="background-color: white; font-family: "Times New Roman", serif; text-align: justify; text-indent: 14.2pt;"><span style="font-size: large;"><b><br /></b></span></span></div><div><span style="background-color: white; font-family: "Times New Roman", serif; text-align: justify; text-indent: 14.2pt;"><span style="font-size: large;"><b>Por último, en estos años repletos de fuentes de
información, pero paradójicamente de tanta amnesia y en muchos casos
mediocridad, me gustaría recordar, en especial para las nuevas generaciones,
que hasta hace unas pocas décadas atrás, solo el hecho de mostrar interés por
el país asiático, intentar acercarse o querer ser su amigo, podía tener en
muchos países, como el mío, consecuencias muy trágicas, que incluían la cárcel,
la persecución, atentados terroristas o, incluso, la muerte o «desaparición» de
personas como lo que vivimos en el Cono Sur. Creo que es bueno mencionarlo,
ahora que es muy fácil y está de moda hacerse amigo o acercarse a China.</b></span></span></div><div><span style="background-color: white; font-family: "Times New Roman", serif; text-align: justify; text-indent: 14.2pt;"><span style="font-size: large;"><b><br /></b></span></span></div><div><span style="background-color: white; font-family: "Times New Roman", serif; text-align: justify; text-indent: 14.2pt;"><span style="font-size: large;"><b>-----</b></span></span></div><div><span style="background-color: white; font-family: "Times New Roman", serif; text-align: justify; text-indent: 14.2pt;"><span style="font-size: large;"><b><br /></b></span></span></div><div><span style="background-color: white; font-family: "Times New Roman", serif; text-align: justify; text-indent: 14.2pt;"><span style="font-size: large;"><b>"Los años setenta en China-Recuerdos de un oriental en Oriente" puede conseguirse en papel, sólo en España, a través de <a href="https://libros.cc/Los-anos-setenta-en-China.htm?isbn=9788418233586" target="_blank">este enlace</a> y en las plataformas de Casa del Libro, FNAC u otras similares.</b></span></span></div><div><span style="background-color: white; font-family: "Times New Roman", serif; text-align: justify; text-indent: 14.2pt;"><span style="font-size: large;"><b><br /></b></span></span></div><div><span style="background-color: white; font-family: "Times New Roman", serif; text-align: justify; text-indent: 14.2pt;"><span style="font-size: large;"><b>En versión ebook (con un prólogo del embajador uruguayo en China, Fernando Lugris) está en <a href="https://www.amazon.com/Los-a%C3%B1os-setenta-China-Recuerdos-ebook/dp/B09GYFCK7H" target="_blank">Amazon</a> o plataformas similares en todo el mundo</b></span></span></div><div><i style="text-indent: 14.2pt;"><span style="font-family: "Times New Roman", serif; line-height: 150%;"><span style="font-size: large;"></span></span></i></div>Unknownnoreply@blogger.com0tag:blogger.com,1999:blog-1444445772269538580.post-87918751903274065712022-03-13T12:27:00.009+01:002023-03-19T13:06:08.569+01:00Hablando de Ucrania: las abreviaturas en el idioma chino<p><b><span style="font-size: x-large;">Reflexiones de un lector del "Diario del Pueblo"-1</span></b></p><p><span style="font-family: inherit; font-size: large;">En mis "Los años setenta en China" dedido un capítulo al idioma chino, indicando que "otra de sus características, buenas o malas, según se mire, es el uso o abuso de las abreviaturas....Un titular como 'Viva la amistad entre los pueblos de <i>Zhong </i>y <i>Wu ( </i>中乌人民的友谊万岁!)'<i> </i>podría referirse a la amistad del pueblo chino con el de Uruguay, con el de Uganda o con el de Uzbekistán ya que los nombres en chino de esos países empiezan por el mismo caracter: 乌 (Wu)."</span></p><p><span style="font-family: inherit; font-size: large;">El mismo ejemplo puede aplicarse para la palabra Ucracia 乌克兰 y desde hace semanas podemos ver con frecuencia el uso de 乌俄 o 俄乌 para referirse a Ucracia-Rusia o Rusia-Ucrania: 俄乌危机 俄乌冲突 乌俄战争 乌俄谈判. </span></p><p><span></span></p><a name='more'></a><p></p><p><span style="font-family: inherit; font-size: large;">Por lo tanto, en el contexto actual, si vemos en un titular lo de 中乌 o 乌中 lo más seguro es que no se esté refiriendo a Uruguay.</span></p><p><span style="font-family: inherit; font-size: large;">Si bien es verdad que para cualquier traducción o interpretación es necesario conocer el contexto de la palabra o frase a traducir, en el caso del chino la dificultad es mayor por ese uso generalizado de las abreviaturas.</span></p><p><span style="font-family: inherit; font-size: medium;"><br /></span></p><p></p><div class="separator" style="clear: both; text-align: center;"><a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/a/AVvXsEgBbepEr4t8lDzsHLHNuN_3F1HCsNn8y0vsZVVSK3WCd_uFaAz7qAfpRoPFy1Uji0Q5dhUzTECGrt-cY9UneGyKuPfMGrt9Zitsdf--V32GQZo9JVOMaxejYDStqAI5OZ5ZjR2gVTqVQ2JKvTVOrweHlRd2NzfsyFFYtY5sW29YChSGH-61yGotjs0sRQ=s889" style="margin-left: 1em; margin-right: 1em;"><img border="0" data-original-height="500" data-original-width="889" height="225" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/a/AVvXsEgBbepEr4t8lDzsHLHNuN_3F1HCsNn8y0vsZVVSK3WCd_uFaAz7qAfpRoPFy1Uji0Q5dhUzTECGrt-cY9UneGyKuPfMGrt9Zitsdf--V32GQZo9JVOMaxejYDStqAI5OZ5ZjR2gVTqVQ2JKvTVOrweHlRd2NzfsyFFYtY5sW29YChSGH-61yGotjs0sRQ=w400-h225" width="400" /></a></div><div style="text-align: center;">En este titular aparece una referencia a "Rusia-Ucrania" y otra a "Estados Unidos-Ucrania"</div><span style="font-family: inherit; font-size: medium;"><br /></span><p></p><p><span style="font-family: inherit; font-size: large;">Siguiendo con el ejemplo de los países -estando yo en la Universidad- los diarios, la radio y la televisión hablaban de "两伊战争" (la guerra de "las dos Yi", o "la guerra de las dos "I"; la guerra entre Irak-Irán) ya que el nombre en chino de ambos países comenzaba por el mismo caracter: 伊.</span></p><p><span style="font-family: inherit; font-size: large;">En otros casos se requiere un conocimiento más profundo. Por ejemplo, no sé si los intérpretes jóvenes entienden el significado de "两阿提案" (la propuesta de las dos "A"), que se refiere a la moción que Albania (阿尔巴尼亚) y Argelia (阿尔及利亚) presentaban todos los años -hasta 1971- a votación en la Asamblea General de las Naciones Unidas para que la República Popular ocupara el puesto oficial de China en el organismo internacional. Por ejemplo, podemos leer que "hasta el año X, Brasil siempre votó en contra de la moción de 'las dos A'".</span></p><p><span style="font-family: inherit; font-size: large;">Tampoco creo que sea fácil ahora conocer a qué se referían en la diplomacia china cuando se hablaba de las "三利", las tres "li" según la pronunciación en chino de la última sílaba de tres países (Italia -意大利; Austria - 奥地利 y Chile - 智利-). Se trataba de una estrategia de la diplomacia china a mediados de los años sesenta para probar en esos tres países la "táctica de los dos pasos" (establecer primero organismos no oficiales para el comercio, para luego, en un segundo paso, alcanzar el establecimiento de relaciones diplomáticas cuando las condiciones estuvieran maduras).</span></p><p><span style="font-family: inherit; font-size: large;">Otro ejemplo "divertido" lo encontramos cuando en China se hace referencia a los BRICS (el grupo de países que forman Brasil, Rusia, India, China y Sudáfrica). Como la palabra inglesa "bric" quiere decir "ladrillo", tanto en su traducción al español como al chino, en los medios de prensa este grupo de países es conocido como "金砖国家" (los países del ladrillo).</span></p><p><span style="text-indent: 28px;"><span style="font-family: inherit; font-size: large;">El uso de tantas abreviaturas -hoy sólo nos limitamos a hablar de países, pero podríamos dar una larga lista de ejemplos de uso en el lenguaje político y sólo como muestra recordar la mención a 两会 (las dos Sesiones) para referirse a las reuniones de la Asamblea Popular Nacional y del Consejo Consultivo Político del Pueblo Chino- dificulta así enormemente el trabajo de los intérpretes, y es un difícil reto cuando la interpretación tiene que ser simultánea.</span></span></p><p><span style="text-indent: 28px;"><span style="font-family: inherit; font-size: large;">En el caso del lenguaje escrito, los titulares en chino pueden resumir fácilmente una información o una idea, lo cual en español haría que ese titular fuese mucho más largo.</span></span></p><p><span style="text-indent: 28px;"><span style="font-family: inherit; font-size: large;">Con esta, comienzo una serie de "Reflexiones de un lector del 'Diario del Pueblo'" en las cuales iré comentando aspectos de interés en relación con el uso del idioma chino en la prensa oficial escrita del país.</span></span></p><p><span style="text-indent: 28px;"><span style="font-family: inherit; font-size: large;">Como siempre, cualquier comentario o crítica son bienvenidos, bien en este blog o directamente en pablo.rovetta@gmail.com</span></span></p>Unknownnoreply@blogger.com0tag:blogger.com,1999:blog-1444445772269538580.post-28376684455401081252022-01-25T09:09:00.006+01:002023-03-19T13:08:01.836+01:00Ante la llegada de la "Fiesta de la Primavera", llamemos las cosas por su nombre<p><span style="font-family: inherit; font-size: large;">Hoy, 25 de enero, el 小年 ("pequeño año") marca el comienzo de las actividades tradicionales para la celebración de la Fiesta de la Primavera en China, y ya he leido y escuchado fuera del país asiático menciones a que dentro de una semana, el 1 de febrero, comenzará el <span style="color: red;">"año del tigre de agua",</span> o que los chinos entrarán en el año cuatro mil y tanto (en concreto en el 4720).</span></p><p><span style="font-family: inherit; font-size: large;">En realidad ya hace varios años, y seguramente en los próximos días veremos cada vez más, en la prensa escrita, la radio y la televisión de nuestro mundo de habla hispana, esas palabras y fechas.</span></p><p><span></span></p><a name='more'></a><p></p><p class="MsoNormal"><o:p><span style="font-family: inherit; font-size: large;">De verdad no entiendo por qué en gran parte de los medios de comunicación, páginas web y redes sociales del mundo, por lo menos en español, se insiste en usar esos y otros términos <span style="color: red;">que en realidad no se utilizan en la República Popular.</span></span></o:p></p><p class="MsoNormal"><o:p><span style="font-family: inherit; font-size: large;">Sin necesidad de ser un experto o estudioso sobre China, y aplicando la sencilla lógica de<span style="color: red;"> "allá donde fueres haz lo que vieres"</span> podemos comprobar fácilmente cómo se refieren los chinos (desde el Presidente de la República hasta el más sencillo de los ciudadanos) a esta festividad tradicional.</span></o:p></p><p class="MsoNormal"><o:p><span style="font-family: inherit; font-size: large;">La primera "Fiesta de la Primavera" la pasé con mi familia en China a principios del año 1976. Entonces esa era su única denominación oficial y pública y no se hacía referencia al "animal" del año en el cual íbamos a entrar, ni había dibujos del mismo, aunque por tradición todos sabían y mencionaban qiue íbamos a entrar en el "Año del Dragón".</span></o:p></p><p class="MsoNormal"><o:p><span style="font-family: inherit; font-size: large;">Tras el comienzo de la política de reformas y apertura al exterior en 1979, poco a poco fueron retornando a la sociedad algunas costumbres y tradiciones, entre ellas las de hablar de "año nuevo" y el nombrar a cada uno de los doce animales que existen en ese calendario particular de algunos países de Asia Oriental. Sin embargo nunca se ha dejado de utilizar el término "Fiesta de la Primavera".</span></o:p></p><p class="MsoNormal"><span style="font-size: large;"><o:p><span style="font-family: inherit;">En todo caso nunca, desde 1976 hasta el presente, vi en el país</span></o:p><span style="font-family: inherit;"> referencias a animales "de metal", "de agua" "de fuego", "de madera", o "de tierra", como tampoco menciones a que, según su calendario tradicional, China estaba en el años cuatro mil y tanto.</span></span></p><p class="MsoNormal"><span style="font-family: inherit; font-size: large;">Creo que cualquier persona que haya podido estar aunque sea sólo una Fiesta de la Primavera en China podrá estar de acuerdo con esto. Pero incluso sin viajar a China, y sólamente con leer las felicitaciones de Año Nuevo -tanto las oficiales como las que figuran en las redes sociales-, la prensa del país o los discursos de los dirigentes, se podrá comprobar fácilmente cómo esos términos no se utilizan.</span></p><p class="MsoNormal"><span style="font-family: inherit; font-size: large;">Simplemente entrando en Google, Baidu o cualquier otro buscador y poner "año del tigre" aparecerán miles de imágenes en las cuales sólo se menciona al 虎年, "año del tigre" o "year of the tiger" y en todas ellas la fecha que aparecerá será 2022.</span></p><p class="MsoNormal"></p><div class="separator" style="clear: both; text-align: center;"><a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/a/AVvXsEjdV4wHvb3QQDtLgvIescCPQiNZwzqH2DSB4My8ffWbAbzitFvNrP9UwOTvf_QV4LysI_Nk5FgcOPyhGaCLc1VwvhOqwAweAE7sWRaVcExwoq3DLE92x2l_iPAhyj6H7NNyY-HdX8ZHyTxvm2LxdkbVaJzF9SksE4wC5WDpK75oEjhbS-Koq79M6cecVQ=s865" style="margin-left: 1em; margin-right: 1em;"><img border="0" data-original-height="434" data-original-width="865" height="322" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/a/AVvXsEjdV4wHvb3QQDtLgvIescCPQiNZwzqH2DSB4My8ffWbAbzitFvNrP9UwOTvf_QV4LysI_Nk5FgcOPyhGaCLc1VwvhOqwAweAE7sWRaVcExwoq3DLE92x2l_iPAhyj6H7NNyY-HdX8ZHyTxvm2LxdkbVaJzF9SksE4wC5WDpK75oEjhbS-Koq79M6cecVQ=w640-h322" width="640" /></a></div><span style="font-family: inherit;"> </span><p></p><p class="MsoNormal"><span style="font-size: large;"><span style="font-family: inherit;">Evidentemente los términos "de metal", "de agua", "de fuego", "de madera", o "de tierra" no se han inventado en Occidente, y tienen una base científica; </span>lo mismo pasa con la referencia al año 4720. P<span style="font-family: inherit;">ero eso daría para otro análisis. El hecho y lo principal es que son términos que no se usan de forma popular, y que sólo podemos encontrar en publicaciones o artículos más académicos.</span></span></p><p class="MsoNormal"><span style="font-family: inherit; font-size: large;">Otro de los términos que solemos encontrar es el de "Año Nuevo Lunar" o "Calendario Lunar" -incluso en publicaciones chinas. Es verdad que la entrada del nuevo año está directamente relacionada con la luna; sin embargo el <span style="color: red;">calendario chino</span> -lo mismo que el judío- <span style="color: red;">es en realidad luni-solar</span>.</span></p><p class="MsoNormal"><span style="font-family: inherit; font-size: large;">Por eso, en las fechas que figuran en los periódicos, en las declaraciones oficiales, en los calendarios, lo que se menciona es el <span style="color: red;">"Calendario Agrícola" (农历 )</span></span></p><p class="MsoNormal"><span style="font-family: inherit; font-size: large;">En un reciente discurso, el Presidente de la República Popular China, Xi Jinping hizo mención a que "中国农历虎年新春就要到来" ("Pronto se celebrará la Fiesta de la Primavera del Año del Tigre según el calendario agrícola chino".) Creo que ésta es la mejor prueba de cómo se debe hacer referencia a este nuevo año.</span></p><p class="MsoNormal"><span style="font-family: inherit; font-size: large;">Por último, si bien es verdad que los habitantes del país hacen referencia al "Año nuevo chino", no debemos olvidarnos que ésta festividad también se celebra en otros países de la región como Corea, Vietnam o Mongolia.</span></p><p class="MsoNormal"><span style="font-family: inherit; font-size: large;">En mi opinión las fiestas tradicionales de los diversos países y nacionalidades del mundo deberían ser nombradas según las costumbres propias de sus habitantes, lo mismo si se hace referencia a los años y por eso vuelvo al refrán del comienzo: "Allá donde fueres, haz lo que vieres". Lo mismo </span></p><p class="MsoNormal"><span style="font-size: large;">¿Por qué los uruguayos, mexicanos, españoles y demás hispanoparlantes tenemos que emplear -para referirnos a cosas de China- términos que no se utilizan en ese país? </span></p><p class="MsoNormal"><span style="font-family: inherit; font-size: large;">Este fenómeno es una muestra del gigantesco trabajo que aún queda por hacer para un mayor conocimiento de la cultura china en nuestros países. Y en ese sentido, los medios de comunicación chinos enfocados al exterior creo que deberían hacer más esfuerzos para aclarar estos temas y explicar al público extranjero todo lo relacionado con esta fiesta, empezando por lo más sencillo: qué términos se emplean en China para referirse a ella.</span></p><p class="MsoNormal"><span style="font-family: inherit; font-size: large;">@PabloRovetta</span></p>Unknownnoreply@blogger.com0tag:blogger.com,1999:blog-1444445772269538580.post-60000946095476191632022-01-04T20:17:00.018+01:002023-03-19T13:09:57.150+01:00China se consolida como principal cliente de Uruguay<p><span style="font-size: large;">En un año en el cual la crisis del Covid afectó gravemente a la economía y el comercio mundial, Uruguay alcanzó en el 2021 una cifra record de exportaciones, un 43 % más que el 2020 e incluso un 26 % superior a lo vendido en 2019, el año anterior a la pandemia.</span></p><p><span style="font-size: large;">La República Popular China -principal socio comercial de Uruguay desde el año 2013- se volvió a consolidar como el primer destino de las exportaciones uruguayas, superando incluso con holgura las cifras récord del 2019. La carne sigue siendo "el producto estrella" en las ventas de Uruguay al país asiático -el primer cliente uruguayo de este producto en el mundo- seguida por otros rubros como la celulosa y la soja. También hay que destacar que, teniendo en cuenta el volumen de lo exportado, China fue el año pasado el principal comprador de productos lácteos.</span></p><span><a name='more'></a></span><p><span style="font-size: large;">En comparación con otros mercados, las ventas uruguayas a China duplicaron el valor de lo exportado a toda la Unión Europea y fueron más de 700 millones de dólares más de lo vendido a los principales socios de Mercosur (Brasil y Argentina).</span></p><p><br /></p><div class="separator" style="clear: both; text-align: center;"><a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/a/AVvXsEjqpFkd_gc4T9F9lcyVm_143MnWwnoZzMckXBGCbP0rQLRlevaJIDdvyYmZJMlOzjXegap-cuQBwknyEspXmML4wKiJtOZrOjynBveyzfqENxmPevfcjLlFW_WTqfjMDNqp618_0fA_3v5xJKM5BKaxKvbKr-FyY-R4G9RtGnb1C2bAnDSTj7VI8qkKzg=s622" style="margin-left: 1em; margin-right: 1em;"><img border="0" data-original-height="386" data-original-width="622" height="398" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/a/AVvXsEjqpFkd_gc4T9F9lcyVm_143MnWwnoZzMckXBGCbP0rQLRlevaJIDdvyYmZJMlOzjXegap-cuQBwknyEspXmML4wKiJtOZrOjynBveyzfqENxmPevfcjLlFW_WTqfjMDNqp618_0fA_3v5xJKM5BKaxKvbKr-FyY-R4G9RtGnb1C2bAnDSTj7VI8qkKzg=w640-h398" title="Fuente Uruguay XXI" width="640" /></a></div><div style="text-align: center;">Fuente: Uruguay XXI</div><p><span style="font-size: large;">Un breve análisis de la evolución y de las cifras del comercio exterior uruguayo con China nos pueden llevar a las siguientes conclusiones:</span></p><p><span style="font-size: large;">- El desarrollo económico y social de la República Popular, y la mejora en el nivel de vida de su población, ha sido y es un factor fundamental en esta tendencia en el comercio Uruguay-China. Durante mi juventud en la China de los años setenta, la carne era un artículo casi de lujo en el país; su venta estaba racionada y una importante parte de su población sólo podía comerla en ocasiones muy especiales, como por ejemplo durante la Fiesta de la Primavera. Ha sido pues el desarrollo de China, lo que ha creado oportunidades de exportación para países como Uruguay (otro caso podría ser Chile) lo cual contradice a algunas voces que desde Occidente no dejan de hablar de "la amenaza china" y/o de su "colonización" en América Latina.</span></p><p><br /></p><div class="separator" style="clear: both; text-align: center;"><a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/a/AVvXsEgt5PnTNLJz0IMT8SIG3JloPC0ATxyt0nloo2C1p9kiBQn9vtr_4n-a0XtLU-AW7xbrlffwnR6pSssKYFIeR7tKbbrFOO30FqcN8HuzaNKGHe4nin0Fob8nlgc4kJtpENtsSv1FoV_uICfN2yT39mse99HuUf0tEGQklZ_isgAC-Vb3UnGYYOukU7VHGg=s320" style="margin-left: 1em; margin-right: 1em;"><img border="0" data-original-height="157" data-original-width="320" height="314" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/a/AVvXsEgt5PnTNLJz0IMT8SIG3JloPC0ATxyt0nloo2C1p9kiBQn9vtr_4n-a0XtLU-AW7xbrlffwnR6pSssKYFIeR7tKbbrFOO30FqcN8HuzaNKGHe4nin0Fob8nlgc4kJtpENtsSv1FoV_uICfN2yT39mse99HuUf0tEGQklZ_isgAC-Vb3UnGYYOukU7VHGg=w640-h314" width="640" /></a></div><br /><p><span style="font-size: large;">- En segundo lugar, hay que tener en cuenta que China es un mercado muy exigente y con medidas muy estrictas en todo lo relacionado con la importación de productos alimenticios. Además, la competencia en el sector de la carne es muy grande y Uruguay, en este sentido, parte de una posición en cierto modo "débil", debido a la gran distancia geográfica que lo separa de los puertos chinos y a que otros países gozan de beneficios arancelarios que no tiene la República Oriental. Por ello creo que es necesario destacar los esfuerzos y el buen trabajo realizado por la Embajada de Uruguay en Beijing para promocionar entre los consumidores chinos las ventajas de la carne uruguaya, aparte de otros productos alimenticios como los lácteos e incluso el vino. El embajador uruguayo Fernando Lugris, aparte de haber recorrido creo que todas las provincias de China, ha tenido una participación muy activa en todas las actividades relacionadas con la promoción de Uruguay y de sus productos en la República Popular, desde las grandes ferias del sector hasta actividades de promoción en la puerta de un supermercado. Esa promoción ha sido constante, a todos los niveles, y se ha apoyado, por ejemplo, en un inteligente uso de las redes sociales del país, y en una activa política de relación con los medios de comunicación chinos.</span></p><p><span style="font-size: large;">- China comenzó a ser un mercado importante para Uruguay durante gobiernos de los partidos Nacional y Colorado, y se convirtió en el primer socio comercial estando el Frente Amplio al frente del gobierno uruguayo.</span></p><p><span style="font-size: large;">- Tras asumir como Presidente de la República el 1 de marzo del 2020, Luis Lacalle Pou, lejos de abandonar la política de amistad y acercamiento a China de sus antecesores, ha dado pasos importantes para consolidarla, decidiendo explorar la posibilidad de firmar un Tratado de Libre Comercio (TCL) con la República Popular.</span></p><p><span style="font-size: large;">- Como otros aspectos de la política exterior, el tema de las relaciones de Uruguay con China, es o debería ser una política de Estado. El nuevo elemento introducido por Luis Lacalle Pou en relación a un posible TLC implica dar un salto cualitativo en esas relaciones. Por eso, es difícil de entender la tibieza, y en algunos casos oposición, que esa decisión provocó en sectores de una fuerza política como el Frente Amplio que estuvo durante 15 años al frente del gobierno uruguayo. </span></p><p><span style="font-size: large;">- En líneas generales, los exportadores de carne uruguaya a China en el presente son los mismos que la estuvieron vendiendo al país asiático en esos 15 años. Sin embargo, al estar ahora en la oposición, esas ventas, con cifras record en volumen y precios, ya no son vistas con buenos ojos por parte de algunos integrantes de esa fuerza política. Está claro que las mismas cosas no se ven de la misma manera si se está en el gobierno o en la oposición.</span></p><p><span style="font-size: large;">En resumen, el año chino del buey/vaca/toro fue muy positivo para el sector de la ganadería en Uruguay </span></p><p><span style="font-size: large;">@PabloRovetta</span></p><p><br /></p>Unknownnoreply@blogger.com0tag:blogger.com,1999:blog-1444445772269538580.post-54255026618479136502021-12-28T00:45:00.013+01:002023-03-19T13:11:27.556+01:00Dos años viendo a China desde afuera<span style="font-size: large;">Se acerca fin de año, y me gustaría reflexionar sobre algunas cosas que han pasado en China y que han tenido relación con ese país, en este 2021 tan raro y trágico que nos ha tocado vivir, continuación de un fatídico 2020 cuando la Covid comenzó a expandirse por el mundo.</span><div><span style="font-size: large;"><br />El próximo 21 de enero se cumplirán dos años desde mi último viaje a China. Nunca desde 1975 había estado tanto tiempo fuera de la República Popular. Y teniendo en cuenta la velocidad con la que se desarrollan los acontecimientos y se producen los cambios en el país asiático, dos años es mucho tiempo.</span></div><div><span><a name='more'></a></span></div><div><span style="font-size: medium;"><br /></span></div><div><span style="font-size: large;">En este período además, tuvo lugar en el país un acontencimiento histórico como el centenario de la fundación del Partido Comunista de China.</span></div><div><span style="font-size: medium;"><br /></span></div><div><div class="separator" style="clear: both; text-align: center;"><a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/a/AVvXsEiCIyJh6lU8yRuRc9rlnPd3MR70gZJTG9exquh3Tyx6_lEnuAz1OoUMtNerP9jm8xfnYAFt6NPQk86IZqLcfvD13q4QUnv3s65nHxuZ9Z5I3wo5Xgpi7d465MzCua9dUgSSXNHd9FdCgLFgKgqDhRjrg7ssgjvaDVSY0wJTRBIIayejoGbdjYEapZP4XA=s300" style="margin-left: 1em; margin-right: 1em;"><img border="0" data-original-height="168" data-original-width="300" height="179" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/a/AVvXsEiCIyJh6lU8yRuRc9rlnPd3MR70gZJTG9exquh3Tyx6_lEnuAz1OoUMtNerP9jm8xfnYAFt6NPQk86IZqLcfvD13q4QUnv3s65nHxuZ9Z5I3wo5Xgpi7d465MzCua9dUgSSXNHd9FdCgLFgKgqDhRjrg7ssgjvaDVSY0wJTRBIIayejoGbdjYEapZP4XA=w320-h179" width="320" /></a></div><br /><div><span style="font-size: large;">Acostumbrado desde los 17 años a un contacto directo con China, ahora, con más de sesenta, se me hace raro y difícil estar tanto tiempo fuera de un país al cual he estado tan ligado. Han sido dos años sin hablar con su gente, sin moverme por sus calles y ciudades, sin poder recibir esas sensaciones directas de la sociedad -a veces detalles en apariencia insignificantes pero que dicen mucho- y sin poder compararlas con el pasado.</span></div><div><span style="font-size: large;"><br /></span></div><span style="font-size: large;">Por eso, en este período he podido prestar mayor atención a cómo se ven y tratan los temas de China desde afuera, y volver a recordar anteriores reflexiones sobre lo que algunos llaman "China contra el mundo". Ya en julio del 2020 había escrito una entrada sobre este tema, que puede ser leída por aquellos interesados pinchando en el siguiente enlace: <a href="http://www.pablo-rovetta.com/2020/07/mis-reflexiones-sobre-las-afirmaciones.html" target="_blank">Mis reflexiones sobre las afirmaciones de "China contra el mundo"</a> Y aquí no voy a repetir algunos de los argumentos que expuse allí en su momento.</span></div><div><span style="font-size: large;"><br /></span></div><div><span style="font-size: large;">Una de las características de este 2021 ha sido cómo han crecido en cierta prensa occidental, hasta un nivel que no se veía desde la guerra fría, las críticas y ataques contra el gigante asiático. A pesar de que han sido algunos países occidentales los que han decretado sanciones <b>contra China</b>; a pesar de que ha sido EE.UU., el Reino Unido y Australia quienen han formado una alianza estratégica <b>contra China</b> (AUKUS); a pesar de que un pequeño grupo de países han declarado un boicot diplomático <b>contra China</b> durante la realización de los Juegos Olímpicos de Invierno, los titulares siguen siendo "China contra el mundo". Se habla de la "amenaza china", e incluso en una página deportiva he leído el titular "China también quiere colonizar la F1".</span></div><div><span style="font-size: large;"><br /></span></div><div><span style="font-size: large;">Al mismo tiempo que se habla de esta supuesta "amenaza" China, también se han agudizado los ataques contra el país en relación con el tema de los derechos humanos y la democracia.</span></div><div><span style="font-size: large;"><br /></span></div><div><span style="font-size: large;">¿Qué es lo que ha pasado en estos últimos años para que países, medios de comunicación, políticos que alababan años atrás el acercamiento a China, ahora se hayan convertido en tan beligerantes?</span></div><div><span style="font-size: large;"><br /></span></div><div><span style="font-size: large;">Se dice, como "argumento" para esos ataques, que en "China existe una dictadura de partido único sin interés alguno por los principios democráticos ni los derechos humanos".</span></div><div><span style="font-size: large;"><br /></span></div><div><span style="font-size: large;">Sin entrar en el fondo de la cuestión e intentando de forma sencilla utilizar la lógica y el sentido común, me pregunto, y le pregunto a los lectores: <b>¿qué es lo que ha cambiado en el sistema político de la República Popular en estos últimos años? </b>Le guste o no a la gente en el mundo, estén de acuerdo o no, <b>el sistema político de China ha sido y es en líneas generales el mismo que se estableció el 1º de octubre de 1949.</b></span></div><div><b><span style="font-size: large;"><br /></span></b></div><div><span style="font-size: large;">¿Cuándo, en este período de más de setenta años, el Partido Comunista dejó de estar en el poder y de dirigir los destinos del país más poblado de la tierra?</span></div><div><span style="font-size: large;"><br /></span></div><div><span style="font-size: large;">¿Por qué, desde el comienzo de las reformas y la apertura al exterior -políticas definidas por el Partido Comunista- varios de esos países y medios de comunicación que hoy critican a China elogiaban la trayectoria económica del país y animaban a sus empresas a "conquistar" ese gran mercado?</span></div><div><span style="font-size: large;"><br /></span></div><div><span style="font-size: large;">¿Acaso se mencionaba entonces el tema de la "democracia" y los "derechos humanos"?</span></div><div><span style="font-size: large;"><br /></span></div><div><span style="font-size: large;">Los que aún tengan memoria recordarán la famosa "teoría de la triangulación", impulsada por gobiernos españoles de diferente signo político, según la cual España sería "la puerta" o "el puente" ideal para que las empresas chinas entraran en América Latina. Desde hace un tiempo, sin embargo, la presencia empresarial china en la región es tachada de "colonialista" por algunos medios de comunicación, los mismos que por cierto alentaban a esas empresas a entrar en América Latina desde España.</span></div><div><span style="font-size: large;"> </span></div><div><span style="font-size: large;">¿Qué es entonces lo que ha cambiado?</span></div><div><span style="font-size: large;"><br /></span></div><div><span style="font-size: large;">- Que después de décadas de esfuerzos y sacrificios, y -le guste a la gente o no- bajo la dirección del Partido Comunista, el país ha alcanzado un muy alto nivel de desarrollo y poderío en todos los terrenos -económico, industrial, tecnológico, militar, espacial o social-. </span></div><div><span style="font-size: large;"><br /></span></div><div><span style="font-size: large;">- Que el desarrollo de China y la mejora del nivel de vida de su población ha abierto mercados para muchos países que veían y ven cómo la Unión Europea les cierra sus puertas y pone todo tipo de trabas a la entrada de sus productos. (Ejemplo: el sector agroalimentario)</span></div><div><span style="font-size: large;"><br /></span></div><div><span style="font-size: large;">- Que la capacidad financiera de China le ha permitido apoyar proyectos de infraestructuras o industriales en muchos países pobres -un ejemplo de ello es África- en territorios olvidados por Estados Unidos y los principales países europeos.</span></div><div><span style="font-size: large;"><br /></span></div><div><span style="font-size: large;">- Que China ya puede tratar "de tú a tú" a cualquier país del mundo y que mantiene excelentes relaciones con muchos países que hasta hace pocos años eran "el patio trasero" o mercados exclusivos de una minoría de potencias occidentales. </span></div><div><span style="font-size: large;"><br /></span></div><div><span style="font-size: large;">Y por eso desde hace un tiempo, esa China fuerte y poderosa, ha pasado a ser "la mala de la película", ya que es un "estorbo" para esas pocas potencias, cada vez más en decadencia.</span></div><div><span style="font-size: large;"><br /></span></div><div><span style="font-size: large;">Entonces, y recién entonces, es cuando surge la "preocupación" por la "falta de democracia" y la "violación de los derechos humanos" en China, argumentos que no se esgrimían durante las primeras más de tres décadas desde el comienzo de la política de reformas y apertura al exterior. Además, con una doble vara de medir, esos argumentos no se tienen en cuenta cuando otros países son aliados políticos o comerciales de EE.UU. y algunos países europeos. </span></div><div><span style="font-size: large;"><br /></span></div><div><span style="font-size: large;">Por cierto, creo que es bueno recordar que ya en el año 2000, diez millones de turistas chinos viajaron al exterior; en el 2013 rozaron la cifra de los cien millones y en el 2019, justo antes de la crisis de la Covid, llegaron a los 150 millones. No voy a entrar a valorar el sistema político de China -que tiene sus características particulares- pero me pregunto, y creo que el mundo debería preguntarse: ¿por qué un país que en teoría "oprime" a sus ciudadanos deja que 150 millones de sus habitantes viajen por todo el mundo y vean con sus propios ojos cómo se vive en otros países? Y, ¿por qué esos ciudadanos, después de haber visitado parte del mundo, regresan a su país de origen? </span></div><div><span style="font-size: large;"><br /></span></div><div><span style="font-size: large;">Soy consciente de que cuando esa prensa habla "del mundo" no tiene en consideración a países como Uruguay (mi verdadera tierra oriental). Y por eso no mencionan que un presidente de la República, elegido democráticamente, como Luis Lacalle Pou -al que nadie puede tildar de "izquierdista"- está intentando impulsar un Tratado de Libre Comercio con la República Popular China, por cierto el destino principal de las exportaciones uruguayas desde hace casi veinte años.</span></div><div><span style="font-size: large;"><br /></span></div><div><span style="font-size: large;">Y si lo hace, no es por motivos ideológicos o por afinidad con el sistema político de China, sino porque considera que es beneficioso para el país. Y lo mismo pasa con otros países de América Latina, que aunque gobernados por partidos de diferentes ideologías políticas -a veces antagónicas entre sí-, coinciden en señalar que las relaciones comerciales, económicas y políticas con la República Popular son, en general, beneficiosas para sus intereses nacionales. No hay, pues, entre los paises de América Latina, conflictos de interés con China; aunque en esos titulares que hablan de "el mundo" aquéllos no existan.</span></div><div><span style="font-size: large;"><br /></span></div><div><span style="font-size: large;">Por lo tanto, los factores ideológicos o políticos no son determinantes para que muchos países excluídos de ese "mundo" de los titulares, deseen mantener relaciones de amistad con la República Popular.</span></div><div><span style="font-size: large;"><br /></span></div><div><span style="font-size: large;">En todo caso, nos espera un 2022 creo que mucho más agitado que los últimos dos años en todo lo relacionado con la República Popular. Cuando más avance China, cuando más éxitos obtenga, cuando más fuerte sea, mayores serán los ataques que recibirá. Sólo me gustaría que los lectores reflexionen e intenten emplear la lógica que he expuesto aquí -no sé si con acierto o no- para explicar estos cambios de actitud hacia la República Popular; y también me gustaría -sé que es algo imposible- que cuando se hable del "mundo" no se refieran sólo a un puñado de países -que ni siquiera incluyen a los principales de la Unión Europea.</span></div><div><span style="font-size: large;"><br /></span></div><div><span style="font-size: large;">Para terminar estas reflexiones, considero modestamente que China debe realizar mayores esfuerzos para dar al mundo su versión de los hechos, en un estilo y formato dirigido al público de las diversas regiones del planeta, y no limitándose a traducir a otras lenguas textos pensados para los lectores chinos. </span></div><div><span style="font-size: large;"><br /></span></div><div><span style="font-size: large;">Es un hecho que estamos en medio de una batalla propagandística que se agravará con el tiempo; y que por ahora la están ganando varios de los grandes medios de prensa internacionales, en especial anglo-sajones y quienes les siguen en otros países. </span></div><div><span style="font-size: large;"><br /></span></div><div><span style="font-size: large;">China tiene los medios económicos, técnicos y profesionales para establecer sus propias plataformas de información, y cuando antes lo haga, mejor será para que la opinión pública mundial pueda por lo menos ver, escuchar y leer otra versión de China, ya que, como venimos diciendo desde hace ya décadas. nos guste o no, quiéramos o no, "China nos importa, China nos afecta".</span></div><div><span style="font-size: large;"><br /></span></div><div><span style="font-size: large;">@PabloRovetta</span></div>Unknownnoreply@blogger.com9tag:blogger.com,1999:blog-1444445772269538580.post-58921738126863095462021-11-14T18:52:00.011+01:002023-03-19T13:13:11.480+01:00Dirigentes chinos en la década de los años setenta<p></p><p style="text-align: left;"><span style="font-family: arial; font-size: large;">La reciente celebración de la VIª Sesión Plenaria del XIX Comité Central del Partido Comunista de China, creo que es una buena oportunidad para recordar la historia de los líderes de la República Popular en la década de los años setenta.</span></p><p style="text-align: left;"><span style="font-size: large;"><span style="font-family: arial;">Y</span><span style="font-family: arial;"> lo hago porque desde hace ya mucho tiempo, y muy especialmente con motivo de esa reunión celebrada del 8 al 11 de noviembre en Beijing, en gran parte de la prensa occidental se repite eso de que <i>Xi Jinping es, después de Mao, el dirigente con más poder en la historia de la República Popular.</i></span></span></p><p style="text-align: left;"><span style="font-family: arial; font-size: xx-large;"><span></span></span></p><a name='more'></a><p></p><p style="text-align: left;"><span style="font-family: arial; font-size: xx-large;"></span></p><div class="separator" style="clear: both; text-align: center;"><span style="font-family: arial; font-size: xx-large;"><a href="https://1.bp.blogspot.com/-ZRmoHCpW6hw/YZFMLhsEhTI/AAAAAAAADk0/cUjjoGJIBRIxm0H5d53KjdwiK8-XbD_sACLcBGAsYHQ/s470/Tiananmen%2B8.jpg" style="margin-left: 1em; margin-right: 1em;"><img alt="Manifestación en Bejing en Octubre de 1976" border="0" data-original-height="470" data-original-width="457" height="400" src="https://1.bp.blogspot.com/-ZRmoHCpW6hw/YZFMLhsEhTI/AAAAAAAADk0/cUjjoGJIBRIxm0H5d53KjdwiK8-XbD_sACLcBGAsYHQ/w389-h400/Tiananmen%2B8.jpg" width="389" /></a></span></div><p style="text-align: left;"><span style="font-family: arial; font-size: large;">Pido perdón por auto-citarme, pero en mi "Los años sesenta en China" considero que el período que va desde enero de 1976, cuando fallece Zhou Enlai, hasta el comienzo oficial de la política de reformas y económicas en diciembre de 1978, ha sido y es poco tratado cuando se analiza y se publican cosas relacionadas con la política china.</span></p><p></p><p></p><div><span style="font-family: arial; font-size: large;">Ese período, que podemos extender hasta 1981, y por lo tanto de cinco años, son obviamente parte de la historia de la República Popular y deberían, en mi modesta opinión, ser tenidos en cuenta cuando se habla del pasado reciente del país asiático. </span></div><div><span style="font-family: arial; font-size: large;"><br /></span></div><div><span style="font-family: arial; font-size: large;">En enero de 1976, tras la muerte del Primer Ministro Zhou Enlai, comienza para <b>Hua Guofeng</b> una carrera política, es verdad que corta, que lo pone incluso por encima del poder oficial que llegó a tener el Presidente Mao.</span></div><div><span style="font-family: arial; font-size: large;"><br /></span></div><div><span style="font-family: arial; font-size: large;">El 22 de enero, y contra todos los pronósticos, es nombrado "Primer Ministro interino" y poco más de dos meses después, y tras un movimiento político que vuelve a terminar con la vida política de Deng Xiaoping, el 7 de abril deja de ser "interino" para convertirse en el jefe de gobierno y en vicepresidente primero del Comité Central del Partido Comunista.</span></div><div><span style="font-family: arial; font-size: large;"><br /></span></div><div><span style="font-family: arial; font-size: large;">Tras el fallecimiento de Mao Zedong el 9 de septiembre de 1976, tiene lugar una de las luchas políticas más intensas en el seno del Partido Comunista en el período de la República Popular, que termina con el apresamiento, el 6 de octubre por la noche, de la llamada "Banda de los Cuatro". La situación era tan tensa que fue recién más de dos semanas después, un 21 de octubre, cuando la noticia se hace pública, y se anuncia oficialmente el nombramiento de Hua Guofeng como presidente del Comité Central del Partido Comunista y de su Comisión Militar, aparte de que aún seguía siendo Primer Ministro del Consejo de Estado.</span></div><div><span style="font-family: arial; font-size: large;"><br /></span></div><div><span style="font-family: arial; font-size: large;">Por lo tanto, entre octubre de 1976 y diciembre de 1978, <b>Hua Guofeng fue el líder máximo de la República Popular,</b> no sólo igualando los mismos puestos que tenía Mao Zedong, sino que sumando el de Primer Ministro del Consejo de Estado. En la práctica, y ya con el Partido y el Gobierno controlados por Deng Xiaoping, se mantiene como Primer Ministro hasta septiembre de 1980 y hasta 1981 como presidente del Comité Central y de su Comisión Militar. </span></div><div><span style="font-family: arial; font-size: large;"><br /></span></div><div><span style="font-family: arial; font-size: large;">El período durante el cual <b>Hua fue la figura número uno de China</b> estuvo además rodeado de un extremo culto a la personalidad e incluso el retrato del llamado "sabio dirigente" figuró al lado del de Mao Zedong en todos los lugares públicos con la sola excepción de la plaza de Tian`anmen. </span></div><div><span style="font-family: arial; font-size: large;"><br /></span></div><div><span style="font-family: arial; font-size: large;">Es precisamente en 1981, en el mes de julio, cinco años después de que Hua Guofeng comenzara su ascenso al poder, cinco años más tarde de la muerte de Mao, y dos años y medio después del comienzo de la política de reformas económicas y apertura al exterior, cuando se aprueba la "Resolución sobre ciertas cuestiones en la historia del Partido Comunista desde la fundación de la República Popular China". Esta es la "famosa" resolución que se menciona continuamente tras la reunión de principios de este mes.</span></div><div><span style="font-family: arial;"><span style="font-size: large;"><br /></span></span></div><div><span style="font-family: arial; font-size: large;">En la de 1981se hace un balance de la evolución política, económica y social del país desde el 1 de octubre de 1949, poniendo especial relieve en la figura de Mao, en la Revolución Cultural así como en la de Hua Guofeng.</span></div><div><span style="font-family: arial; font-size: large;"><br /></span></div><div><span style="font-family: arial; font-size: large;">Es verdad que lo de "tener el poder" es algo subjetivo. El propio Mao, estando en la presidencia del Comité Central, tuvo períodos donde su "poder" se vio limitado.</span></div><div><span style="font-family: arial; font-size: large;"><br /></span></div><div><span style="font-family: arial; font-size: large;">También podemos poner el caso de Deng Xiaoping, que tuvo mucho poder sin haber ocupado ningún puesto de relevancia en el gobierno y en el Partido, con excepción de su Comisión Militar. Y por eso, en esos años la prensa lo tenía que llamar "el hombre fuerte" de China.</span></div><div><span style="font-family: arial; font-size: large;"><br /></span></div><div><span style="font-family: arial; font-size: large;">En todo caso quería compartir esta parte de la historia de China donde hubo un Presidente del Comité Central (el cargo de Presidente de la República aún no se había restituido), de su Comisión Militar, y aparte Primer Ministro, que llegó a lo más alto del poder en el país asiático, y como tal fue venerado públicamente durante un período de tiempo. </span></div><div><span style="font-family: arial; font-size: large;"><br /></span></div><div><span style="font-family: arial; font-size: large;">El comunicado emitido por el Comité Central el pasado 11 de noviembre y la Declaración Histórica que esperemos se publique pronto, requerirán de un análisis profundo, poniendo atención a lo que se dice, cómo se dice... y a lo que se ha dejado de decir.</span></div><div><span style="font-family: arial; font-size: large;"><br /></span></div><div><span style="font-family: arial; font-size: large;">Pero eso será un tema a tratar en otras reflexiones.</span></div><div><span style="font-family: arial; font-size: x-large;"><br /></span></div><div><span style="font-family: arial; font-size: x-large;">@PabloRovetta </span></div>Unknownnoreply@blogger.com0tag:blogger.com,1999:blog-1444445772269538580.post-49256179108265334592021-10-01T17:48:00.010+02:002023-03-19T13:14:53.643+01:00Sobre la guerra contra China en los medios de comunicación<div style="text-align: left;"><span style="font-family: arial; font-size: large;">El hasta ahora delegado de la Agencia EFE en Beijing, Javier García, anunció días atrás que dejaba el periodismo debido a que "la bochornosa guerra informática contra China" se había llevado buenas dosis de su ilusión por el oficio.</span></div><div style="text-align: left;"><span style="font-family: arial; font-size: large;"><br /></span></div><div style="text-align: left;"><span style="font-family: arial; font-size: large;">El hilo público en Twitter del periodista, con más de treinta años de experiencia, tuvo una gran repercusión en las redes sociales entre aquellas personas relacionadas con la República Popular.</span></div><div style="text-align: left;"><span style="font-family: arial; font-size: large;"><br /></span></div><div style="text-align: left;"><span><a name='more'></a></span></div><span style="font-family: arial; font-size: large;">Al leerlo recordé un artículo que publiqué en julio del año pasado, titulado <a href="https://draft.blogger.com/#">Mis reflexiones sobre las afirmaciones de "China contra el mundo"</a> en el cual también trataba, desde mi posición como observador, el tema de la actitud de cierta prensa hacia el país asiático después de leer un titular en la página web de la Cadena Ser llamado "China contra el mundo".</span><div><span style="font-family: arial; font-size: large;"><br /></span><div><span style="font-family: arial; font-size: large;">La reflexión de Javier García me pareció de sumo interés para los seguidores de esta página y por ello, con su autorización, quiero compartirlas entre tantos seguidores interesados por los temas y la actualidad del país asiático.</span></div><div style="text-align: left;"><br /></div><div style="text-align: left;"><span style="font-family: arial; font-size: large;">Como dice el refrán, "a buen entendedor, pocas palabras bastan", y por ello paso directamente a reproducir su declaración que es lo suficientemente clara y con la cual coincido plenamente:</span></div><div style="text-align: left;"><br /></div><span style="font-size: large;"><i>"En pocos días dejaré el periodismo, al menos temporalmente, tras más de 30 años de profesión. La bochornosa guerra informativa contra China se ha llevado buenas dosis de mi ilusión por este oficio, que hasta ahora había sobrevivido a no pocos conflictos y otras lindezas.</i></span><div><span style="font-size: large;"><i><br />Llegué a China, como a cualquier otro destino, intentando mantener la mente abierta y libre de prejuicios e ideas preconcebidas. Siempre he creído que la curiosidad y la capacidad de asombro, junto al rigor y la lealtad a la verdad, son los mimbres básicos del periodismo.<br /><br />Lo que me encontré me sorprendió. Por un lado, un país enorme, diverso y en constante transformación, repleto de historias que contar. Un lugar innovador, moderno y tradicional a la vez, en el que se vislumbra el futuro y se juega de algún modo el destino de la humanidad.<br /><br />Por otro, un relato de la prensa extranjera -en su inmensa mayoría- profundamente sesgado, que sigue constantemente la estela de lo que los medios estadounidenses y el departamento de Estado de EE.UU. quieren contarnos, da igual lo que pase.<br /><br />En esa información, llena de lugares comunes, no hay casi espacio para la sorpresa, ni para un mínimo análisis veraz de lo que ocurre aquí. No hay lugar para profundizar en las claves históricas, sociales o culturales. Todo lo que hace China debe ser por definición negativo.<br /><br />La manipulación informativa es flagrante, con decenas de ejemplos a diario. Quien se atreva a confrontarla o a intentar mantener posturas medianamente objetivas e imparciales será acusado de estar a sueldo del gobierno chino o algo peor. No se tolera la menor discrepancia.<br /><br />Los poderes que promueven la muy peligrosa deriva de confrontación con China no dejan nada al azar. Sus aparentemente invisibles hilos llegan a los lugares más insospechados. Cualquiera que se salga de la senda marcada será apartado o marginado.<br /><br />El tan proclamado tótem occidental de “prensa libre” recibe así, paradójicamente reflejada, su más descarnada imagen en China: prensa libre para decir exactamente lo mismo, para no salirse del guion preestablecido, para recalcar una y otra vez lo malo que es el “comunismo”.<br /><br />Hasta políticas que deberían servir de ejemplo, como la reforestación, sin parangón, o la salida de la pobreza de 800 millones de personas, llevan siempre la sempiterna coletilla del “but at what cost”, que usan hasta la saciedad los medios anglosajones al informar sobre China.<br /><br />Se habla sin cesar de la propaganda china, que es evidente por tan obvia. Pero nada de la de EEUU, mucho más sutil, menos detectable y, por ello, más efectiva: el lector cree que se está formando una opinión en base a su propio criterio, sin que nadie le esté empujando a ello.<br /><br />En lugar de seguir buscando lo peor de China y el enfrentamiento, cuando no el racismo, deberíamos esforzarnos por conocerla mejor y aprender lo que pueda haber de positivo en su modelo, igual que China ha puesto en práctica lo mejor de Occidente, a todas luces con notable éxito.<br /><br />El conocimiento sin prejuicios ni manipulaciones tóxicas es el principal instrumento que tenemos frente al odio y la confrontación, que solo nos lleva a un conflicto de dimensiones inimaginables, capaz de acabar con </i>e<i>l planeta y con todos nosotros."</i></span><br /></div><div><span style="font-size: large;"><i><br /></i></span></div><div><span style="font-size: large;"><i>28 de septiembre de 2021</i></span></div></div><div><span style="font-size: large;"><i><br /></i></span></div><div><span style="font-size: large;">@PabloRovetta</span></div>Unknownnoreply@blogger.com1tag:blogger.com,1999:blog-1444445772269538580.post-18130572089481221512021-09-24T17:01:00.006+02:002023-03-19T13:16:05.146+01:00"Los años setenta en China" ya está disponible en todo el mundo<p><span style="font-family: arial; font-size: large;">En noviembre del año pasado, cuando anunciaba la publicación de <span style="color: red;">"Los años setenta en China-Recuerdos de un oriental en Oriente"</span> empezaba diciendo <i>"después de cuarenta y cinco años, ya está aquí"</i>.</span></p><p><span style="font-family: arial; font-size: large;">El libro había salido auto-editado después de varios esfuerzos infructuosos por conseguir una editorial para publicarlo. Y lamentablemente la experiencia no fue nada buena. El libro no llegó a estar físicamente en las librerías de España, y mucho menos en otros lugares del mundo.</span></p><p><span></span></p><a name='more'></a><p></p><p><span style="font-family: arial; font-size: large;">La única excepción -y aprovecho para agradecerlo- fue la librería <span style="color: red;">"Mil Gotas"</span> que sí lo tuvo, y tiene, disponible en versión papel en China.</span></p><p><span style="font-family: arial; font-size: large;"><br /></span></p><p></p><div class="separator" style="clear: both; text-align: center;"><a href="https://1.bp.blogspot.com/-Duj0jG4K7sA/YU3l-w-37UI/AAAAAAAADAo/mXyTwh5EHLAcxiv7pLe7Dv3PDJvF4H0UwCLcBGAsYHQ/s500/Portada%2B2.jpg" style="margin-left: 1em; margin-right: 1em;"><img border="0" data-original-height="500" data-original-width="348" height="640" src="https://1.bp.blogspot.com/-Duj0jG4K7sA/YU3l-w-37UI/AAAAAAAADAo/mXyTwh5EHLAcxiv7pLe7Dv3PDJvF4H0UwCLcBGAsYHQ/w446-h640/Portada%2B2.jpg" width="446" /></a></div><br /><span style="font-family: arial; font-size: large;"><br /></span><p></p><p><span style="font-family: arial; font-size: large;">A pesar de ello, debo agradecer a aquellos pocos -pero muy importantes para mí- que pudieron leerlo y dejarme sus comentarios.</span></p><p><span style="font-family: arial; font-size: large;">Sin embargo, seguía teniendo una deuda con mis compatriotas uruguayos -al fin y al cabo el libro trata sobre la historia de un "oriental"-, con personas de nuestra América y otros continentes que se habían interesado por conocer lo que yo había vivido en la segunda mitad de la década de los años setenta del siglo pasado. </span></p><p><span style="font-family: arial; font-size: large;">En el momento de sacar la edición en papel, no quise publicarlo en <i>ebook</i>, quizás porque como hijo de librero y alguien a quien le gusta oler los libros, llegué a pensar que eso sería un acto de traición.</span></p><p><span style="font-family: arial; font-size: large;">Con el paso del tiempo, sin embargo, me fui dando cuenta de que, como todo en la vida, lo de los <i>ebooks </i>tenía su lado negativo, pero también positivo.</span></p><p><span style="font-family: arial; font-size: large;">Y entre "el lado bueno" de un libro electrónico está la posibilidad de llegar a todas las personas interesadas en mi modesta obra, vivan donde vivan.</span></p><p><span style="font-family: arial; font-size: large;">Así, me dediqué a preparar la versión <i>ebook</i> y aproveché para corregir una cantidad de errores que -en unos casos por causas mías, y en otros debido al mal trabajo de la editorial con la cual lo publiqué- aparecían en el libro en papel.</span></p><p><span style="font-family: arial; font-size: large;">Esta edición sale por lo tanto corregida -lo cual no quiere decir que no siga teniendo errores-.</span></p><p><span style="font-family: arial; font-size: large;">Al mismo tiempo, es un verdadero honor para mi que <span style="color: red;">Fernando Lugris</span>, embajador de Uruguay en China, haya tenido la amabilidad de escribir un prólogo para esta nueva versión.</span></p><p><span style="font-family: arial; font-size: large;">Así, hoy puedo decir que <i>después de diez meses, la versión en ebook ya está aquí.</i></span></p><p><span style="font-family: arial; font-size: large;">Espero que este libro sea de interés para todas aquellas personas interesadas en China, y en especial en el período histórico de la última década de los años setenta del siglo pasado. </span></p><p><span style="font-family: arial; font-size: large;">Esa época fue para mí la más convulsa, decisiva e importante en la historia de la República Popular y abarca desde el final de la Revolución Cultural hasta el comienzo de la política de reformas.</span></p><p><span style="font-family: arial; font-size: large;">He incluido en esta edición mi dirección de correo electrónico - <span style="color: red;">pablo.rovetta@gmail.com</span> - y recuerdo que en FaceBook tengo una página con el nombre "Los años setenta en China".</span></p><p><span style="font-family: arial; font-size: large;">Nada me gustaría más que todos aquellos que hayan leído o lean el libro puedan dejarme sus críticas -positivas y negativas; de forma pública o privada- a través de esos canales, aparte de este blog.</span></p><p><span style="font-family: arial; font-size: large;">El <i>ebook</i> ya está disponible en las principales plataformas electrónicas, y poco a poco irá apareciendo en otras.</span></p><p><span style="font-family: arial; font-size: large;">Espero que esta vez la experiencia sea más positiva que con la edición de papel, y me de fuerzas para preparar "Los años ochenta en China".</span></p><p><span style="font-family: arial; font-size: large;"><a href="https://letrame.com/catalogo/producto/los-anos-setenta-en-china/" target="_blank">Disponible pinchando aquí</a><br /></span></p><p><span style="font-family: arial; font-size: large;">@PabloRovetta</span></p><p><br /></p>Unknownnoreply@blogger.com0tag:blogger.com,1999:blog-1444445772269538580.post-56825965636957309072021-09-08T20:28:00.008+02:002023-03-19T13:18:11.464+01:00Uruguay y China deciden avanzar hacia un Tratado de Libre Comercio (TLC) <div><span style="font-family: arial; font-size: large;">El presidente uruguayo, Luis Lacalle Pou, informó oficialmente que su gobierno había recibido una "respuesta formal" de las autoridades chinas en la que se explicitaba su disposición de "avanzar en un TLC" entre ambos países, primero con la realización de un "estudio de factibilidad" de aquí a fin de año.</span></div><span style="font-family: arial; font-size: large;"><br />Hoy Uruguay "empieza a abrirse al mundo" destacó el mandatario, quien informó personalmente de la decisión a los representantes de todos los partidos políticos con representación parlamentaria, tras la cual realizó un anuncio público a la población y una rueda de prensa.</span><div><span style="font-family: arial; font-size: large;"><br /></span></div><div><div class="separator" style="clear: both; text-align: center;"><div class="separator" style="clear: both; text-align: center;"><a href="https://1.bp.blogspot.com/-i5ra6EDnuf4/YTkADV3iUMI/AAAAAAAAC_s/i83QW_CWkDAYtN8O_NrqDIGu8tUzKcvVwCLcBGAsYHQ/s1200/Bandera%2BUruguay.png" style="margin-left: 1em; margin-right: 1em;"><img border="0" data-original-height="800" data-original-width="1200" height="133" src="https://1.bp.blogspot.com/-i5ra6EDnuf4/YTkADV3iUMI/AAAAAAAAC_s/i83QW_CWkDAYtN8O_NrqDIGu8tUzKcvVwCLcBGAsYHQ/w200-h133/Bandera%2BUruguay.png" width="200" /></a><a href="https://1.bp.blogspot.com/-q8f3Rro2V2M/YTkADXTfmbI/AAAAAAAAC_o/7rr4ysQjmX8iD8jcPiMw__kn_-r_UYG2gCLcBGAsYHQ/s236/Bandera%2BChina.jpg" style="margin-left: 1em; margin-right: 1em;"><img border="0" data-original-height="157" data-original-width="236" height="133" src="https://1.bp.blogspot.com/-q8f3Rro2V2M/YTkADXTfmbI/AAAAAAAAC_o/7rr4ysQjmX8iD8jcPiMw__kn_-r_UYG2gCLcBGAsYHQ/w200-h133/Bandera%2BChina.jpg" width="200" /></a></div></div><br /><span><a name='more'></a></span><div><div style="text-align: center;"><div style="text-align: left;"><span style="font-family: arial; font-size: large;">A pesar de que algunos medios de prensa de Buenos Aires hablan de "sorpresa total" por parte del gobierno argentino, lo que es un hecho es que el Presidente uruguayo había ya expresado tiempo atrás, de forma directa y pública, a sus socios de Mercosur la voluntad de negociar de forma individual acuerdos comerciales fuera del marco del "Mercado Común del Sur" que forman Uruguay, Argentina, Brasil y Paraguay.</span></div></div><div><span style="font-family: arial; font-size: large;"><br /></span><span style="font-family: arial; font-size: large;">Ya entonces, el presidente argentino, Alberto Fernández, fue quien más se opuso y criticó la decisión del Presidente Lacalle Pou.</span><div><span style="font-family: arial; font-size: large;"><br /></span></div><div><span style="font-family: arial; font-size: large;">Ahora les toca a los expertos en economía, comercio exterior y política internacional sacar sus conclusiones y valorar las implicaciones de esta decisión del gobierno uruguayo; y como es natural habrá opiniones para todos los gustos.</span></div><div><span style="font-family: arial; font-size: large;"><br /></span></div><div><span style="font-family: arial; font-size: large;">Por mi parte, me gustaría aportar algunos elementos para la reflexión sobre este tema tan importante para el futuro de Uruguay:</span></div><div><span style="font-family: arial; font-size: large;"><br /></span></div><div><span style="font-family: arial; font-size: large;">1) En América Latina, la República Popular China ya tiene firmados TLC con Chile (2006), Perú (2009) y Costa Rica (2010).</span></div><div><span style="font-family: arial; font-size: large;"><br /></span></div><div><span style="font-family: arial; font-size: large;">2) China es, desde el año 2012, el principal socio comercial de Uruguay y desde hace años el destino número uno de las exportaciones uruguayas. Si décadas atrás la lana era el principal rubro de las ventas uruguayas, ahora la carne se ha convertido en el "producto estrella", junto con la soja, la celulosa o los productos lácteos.</span></div><div><span style="font-family: arial; font-size: large;"><br /></span></div><div><span style="font-family: arial; font-size: large;">3) Más de la mitad de los aranceles que paga Uruguay por sus exportaciones se abonan a China. La República Oriental tiene, en este sentido, que competir con países que venden a China los mismos productos, pero que al tener en vigor Tratados de Libre Comercio, no pagan o pagan menos aranceles. </span></div><div><span style="font-family: arial; font-size: large;"><br /></span></div><div><span style="font-family: arial; font-size: large;">4) El presidente Lacalle Pou se ha pronunciado en más de una oportunidad que en esta "apertura al mundo" de Uruguay la firma de un TLC con un determinado país no excluye que no se pueda negociar y llegar a acuerdos con otros. </span></div><div><span style="font-family: arial; font-size: large;"><br /></span></div><div><span style="font-family: arial; font-size: large;">5) No está demás recordar que el Mercosur lleva ya veinte años negociando un acuerdo comercial con la Unión Europea, acuerdo que en principio no se va a materializar a corto plazo debido al proteccionismo de algunos de sus principales miembros en relación a sus productos agro-alimentarios. </span></div><div><span style="font-family: arial; font-size: large;"><br /></span></div><div><span style="font-family: arial; font-size: large;">6) Por último, para esa parte de la prensa occidental que habla de la "amenaza" china, de la "conquista" china en América Latina, habría que resaltar que fue el gobierno uruguayo quien propuso a China el inicio de negociaciones. También debería reflexionar sobre las políticas proteccionistas de la Unión Europa, que mientras piden a otros la apertura de sus mercados siguen manteniendo una serie de barreras comerciales y subsidios a su producción local (léase PAC) en detrimento de otros países. El mundo ya ha cambiado, y si países como Uruguay quieren abrir nuevos mercados para sus exportaciones lo harán con aquellos países que estén dispuestos a negociar y llegar a un acuerdo.</span></div><div><span style="font-family: arial; font-size: large;"><br /></span></div><div><span style="font-family: arial; font-size: large;">Espero que la crispación política que se vive en estos tiempos -donde o todo es blanco, o todo es negro- no haga olvidar las viejas tradiciones de Uruguay, y que la política exterior es un asunto de Estado. Así lo reflejó el presidente Lacalle Pou al convocar a los representantes de todos los partidos con representación parlamentaria para comunicarles la decisión adoptada.</span></div><div><span style="font-family: arial; font-size: large;"><br /></span></div><span style="font-family: arial; font-size: large;">Es importante recordar en este sentido que el presidente Tabaré Vazquez, antecesor de Lacalle Pou, ya indicó durante su mandato que "estamos convencidos de que Uruguay tiene que abrirse al mundo" y se refirió al problema de las ventajas de países como Australia o Nueva Zelanda que, vendiendo los mismos productos a China, no pagan o pagan menos aranceles que las exportaciones uruguayas.</span><div><span style="font-family: arial; font-size: large;"><br /></span></div><div><span style="font-family: arial; font-size: large;">La negociación de un TLC es un proceso largo, que no necesariamente se pueda finalizar durante el período de mandato de un gobierno determinado. El presidente Lacalle Pou, sin embargo, ya ha dado un paso importante que, ojalá, redunde en el bienestar de la República Oriental y todos sus habitantes.</span></div><div><span style="font-family: arial; font-size: large;"><br /></span></div><div><span style="font-family: arial; font-size: large;">@PabloRovetta</span></div></div></div></div>Unknownnoreply@blogger.com0tag:blogger.com,1999:blog-1444445772269538580.post-1249063203827108002021-07-25T18:53:00.011+02:002023-03-19T13:19:11.699+01:00El caso de Nicaragua y sus relaciones con Taiwán<p><span style="font-family: arial; font-size: large;">Como en tantos otros aspectos de la política, en la diplomacia se ven a veces extraños compañeros de viaje. El gobierno nicaragüense de Daniel Ortega, en este sentido, es un buen ejemplo de ello, por su amistad con Tsai Ing-wen y su negativa a reconocer a la República Popular China.</span></p><p><span style="font-family: arial; font-size: large;">Nicaragua tiene el extraño "honor" de pertenecer al grupo de quince Estados que en el mundo de hoy aún mantienen relaciones diplomáticas con la llamada República de China, cosa que no hacen ninguno de sus principales aliados ni los gobiernos que más apoyan al régimen actual de Managua.</span></p><p><span></span></p><a name='more'></a><p></p><p><span style="font-family: arial; font-size: large;"><br /></span></p><p></p><table align="center" cellpadding="0" cellspacing="0" class="tr-caption-container" style="margin-left: auto; margin-right: auto;"><tbody><tr><td style="text-align: center;"><a href="https://1.bp.blogspot.com/-cZMS68SXXcI/YP2V-1sN1LI/AAAAAAAAC6E/bGtxGLYWsfgS2xotYv1VYl98bUo2oMu-ACLcBGAsYHQ/s800/Ortega.jpg" style="margin-left: auto; margin-right: auto;"><img border="0" data-original-height="534" data-original-width="800" height="428" src="https://1.bp.blogspot.com/-cZMS68SXXcI/YP2V-1sN1LI/AAAAAAAAC6E/bGtxGLYWsfgS2xotYv1VYl98bUo2oMu-ACLcBGAsYHQ/w640-h428/Ortega.jpg" width="640" /></a></td></tr><tr><td class="tr-caption" style="text-align: center;">Tsai Ing-wen junto a Daniel Ortega en la toma de posesión de 2017</td></tr></tbody></table><span style="font-family: arial; font-size: x-large;"><br /></span><p></p><p><span style="font-family: arial; font-size: large;">A los pocos meses después de la llegada al poder, tras un proceso electoral, del primer gobierno Sandinista, Nicaragua estableció relaciones diplomáticas con la República Popular China en diciembre de 1985</span><span style="font-family: arial; font-size: x-large;">.</span></p><p><span style="font-family: arial; font-size: large;">Se trataba del primer país de América Central que daba ese paso, y lo hizo antes de que -en América Latina- Uruguay, Costa Rica, Panamá, República Dominicana y El Salvador reconociesen a la República Popular como al único representante de China en el mundo.</span></p><p><span style="font-family: arial; font-size: large;">Posteriormente, con la llegada al poder de la oposición, liderada por Violeta Chamarro, en 1990 el gobierno de Managua rompe sus relaciones con Beijing y las vuelve a establecer con la isla de Taiwán.</span></p><p><span style="font-family: arial; font-size: large;">Tuvieron que pasar muchos años hasta que en el 2007 Daniel Ortega regresara al poder. Sin embargo, como tantas de otras cosas que el actual presidente de Nicaragua cambió en relación a lo que fueron los primeros años del Sandinismo en el gobierno, el mandatario decidió mantener los lazos oficiales con Taiwán.</span></p><p><span style="font-family: arial; font-size: large;">Creo que es importante recordar que, el reconocer o no a la República Popular como el único representante legítimo de China, no tiene ninguna connotación ideológica.</span></p><p><span style="font-family: arial; font-size: large;">La abrumadora mayoría de los Estados del mundo, independientemente del color político de los gobiernos que tienen en el poder, mantienen relaciones oficiales diplomáticas con el país asiático, que además desde hace varias décadas es miembro oficial de los principales organismos internacionales.</span></p><p><span style="font-family: arial; font-size: large;">En la actualidad, solamente 15 estados en el mundo reconocen a la llamada "República de China". Dicho con respeto, creo que los lectores de estas reflexiones -al igual que yo- serían incapaces de localizar en un mapa y/o mencionar las capitales de la mitad de esos Estados, que son:</span></p><p><span style="font-family: arial; font-size: large;"><br /></span></p><p><span style="font-family: arial; font-size: large;">- Belice</span></p><p><span style="font-family: arial; font-size: large;">- Guatemala</span></p><p><span style="font-family: arial; font-size: large;">- Haití</span></p><p><span style="font-family: arial; font-size: large;">- Honduras</span></p><p><span style="font-family: arial; font-size: large;">- Paraguay</span></p><p><span style="font-family: arial; font-size: large;">- Nicaragua</span></p><p><span style="font-family: arial; font-size: large;">- San Cristóbal y Nieves</span></p><p><span style="font-family: arial; font-size: large;">- Santa Lucía</span></p><p><span style="font-family: arial; font-size: large;">- San Vicente y las Granadinas</span></p><p><span style="font-family: arial; font-size: large;">- Islas Marshall</span></p><p><span style="font-family: arial; font-size: large;">- Nauru</span></p><p><span style="font-family: arial; font-size: large;">- Palaos</span></p><p><span style="font-family: arial; font-size: large;">- Tuvalu</span></p><p><span style="font-family: arial; font-size: large;">- Esuatimi</span></p><p><span style="font-family: arial; font-size: large;">- El Vaticano</span></p><p><span style="font-family: arial; font-size: large;"><br /></span></p><p><span style="font-family: arial; font-size: large;">Desde el año 2007 el gobierno de Daniel Ortega mantiene unas estrechas y cordiales relaciones con Taiwán, de quien ha recibido todo tipo de ayuda, incluida militar. Uno de los últimos ejemplos fue la presencia de Tsai Ing-wen en la tercera toma de posesión de Daniel Ortega en el año 2017.</span></p><p><span style="font-family: arial; font-size: large;">De esta manera, Tsai Ing-wen compartió mesa en dicha ceremonia con los presidentes de Venezuela, Nicolás Maduro, y de Bolivia, Evo Morales. </span></p><p><span style="font-family: arial;"><span style="font-size: large;">En más de una oportunidad Daniel Ortega ha defendido "el derecho" de Nicaragua a tener relaciones con "las dos Chinas", y llegó a decir que </span><span style="font-size: large;"> <i>“debemos agradecer a quienes ayudan a un pueblo con necesidades”</i>, refiriéndose a la ayuda que ha ofrecido Taiwán, particularmente.</span></span></p><p><span style="font-family: arial;"><span style="font-size: large;">La relación Nicaragua-Taiwán no deja de ser, en este sentido, extremadamente kafkiana. El principal apoyo que tiene "el Comandante Daniel Ortega" -como le llaman sus principales aliados- en lo ideológico y político son Cuba, Venezuela, Bolivia y otros de los llamados "gobiernos progresistas" de la región.</span></span></p><p><span style="font-family: arial;"><span style="font-size: large;">Sin embargo, a diferencia del de Managua, todos esos gobiernos mantienen, a su vez, estrechas relaciones políticas y económicas con la República Popular China -al igual que los otros del continente con gobiernos de otro signo político-.</span></span></p><p><span style="font-family: arial;"><span style="font-size: large;">Y al mismo tiempo, aparte de esos quince estados -entre ellos Nicaragua- Taiwán recibe un apoyo cada vez mayor en lo militar y lo político por parte del gobierno de EE.UU., siendo esta una de las causas principales de la tensión que se vive entre Washington y Beijing.</span></span></p><p><span style="font-family: arial; font-size: large;">Tenemos así por un lado una línea Washington-Taipei-Managua, conviviendo con otra de Managua-Taipei-La Habana. Aquí no se puede aplicar aquello de que "los amigos de mis amigos, son mis amigos".</span></p><p><span style="font-family: arial; font-size: large;">Si hay un caso donde se puede demostrar la cuadratura de un triángulo creo que el de las relaciones Nicaragua-Taiwán es el mejor ejemplo. </span></p><p><span style="font-family: arial; font-size: large;">@PabloRovetta</span></p><p><br /></p>Unknownnoreply@blogger.com0tag:blogger.com,1999:blog-1444445772269538580.post-50317873449105272572021-06-08T19:57:00.005+02:002023-03-19T13:20:25.459+01:00Algunas reflexiones sobre el centenario de la fundación del Partido Comunista de China<span style="font-family: arial; font-size: large;">El próximo 1 de Julio se cumplen cien años de la fundación del Partido Comunista de China. Es algo indiscutible, y reconocido de forma general, que la China de hoy es una de las principales potencias económicas, comerciales, industriales y científicas del mundo, y va camino de convertirse en la número uno en todos esos campos, y muchos más. Nadie lo niega, independientemente de su posición política, y los principales organismos internacionales lo corroboran.</span><div><span style="font-family: arial; font-size: large;"><br /></span></div><div><div class="separator" style="clear: both; text-align: center;"><a href="https://1.bp.blogspot.com/-WiezpMoQR5U/YL-vDPb-v0I/AAAAAAAAC2U/VsB8m1_b3skkN_VzZM87iX1xpLQjdOCWgCLcBGAsYHQ/s2048/100%2Banos.jpg" style="margin-left: 1em; margin-right: 1em;"><img border="0" data-original-height="1449" data-original-width="2048" height="452" src="https://1.bp.blogspot.com/-WiezpMoQR5U/YL-vDPb-v0I/AAAAAAAAC2U/VsB8m1_b3skkN_VzZM87iX1xpLQjdOCWgCLcBGAsYHQ/w640-h452/100%2Banos.jpg" width="640" /></a></div><span style="font-family: arial; font-size: large;"><div><span><a name='more'></a></span></div>Pero independientemente de las frías cifras económicas –que en muchos casos no reflejan la realidad social de un país- hay aspectos muy importantes que cualquier visitante de China, o quien haya estado en el país años atrás y hoy regrese a él, podrá comprobar con facilidad. Y me estoy refiriendo al espectacular incremento del nivel de vida de su población, a la transformación industrial y tecnológica que está llegando hasta los últimos rincones del país, y a una red de modernas infraestructuras que han contribuido y lo siguen haciendo, a ese desarrollo económico y a la mejora en la calidad de vida de los habitantes del país más poblado del mundo. <br /><br />Y en el fondo, <span style="color: #2b00fe;">todos esos logros de la República Popular, son en definitiva logros del Partido Comunista de China. </span> Esta debería ser una conclusión sencilla y lógica; pero muchas veces, a algunos “se les olvida” y no lo mencionan. Es más, cuando una parte de la prensa internacional habla de esos éxitos no menciona al Partido Comunista; sin embargo, al criticar algún aspecto del país, entonces sí hablan despectivamente de “las autoridades chinas” o “las autoridades comunistas”<br /></span><br /><div><span style="font-family: arial; font-size: large;"><span style="color: #2b00fe;">Si China ha tenido ese gran desarrollo y ha obtenido todos esos logros habría que recordar que esto se ha debido y se debe a que es el Partido Comunista quien está al frente de la vida política y económica del país. </span><br /><br />Estas no son opiniones, sino que son hechos. <br /><br />Y también es un hecho que esta China que estamos viendo hoy es consecuencia directa de una revolución emprendida por el Partido Comunista desde su fundación un siglo atrás, revolución que llevó a la fundación de la República Popular China el 1 de Octubre de 1949. Este acontecimiento puso fin a más de un siglo de humillaciones, agresiones y desprecios por parte de potencias extranjeras que la llamaban despectivamente “el enfermo de Asia”, y de guerras civiles en un territorio que se disputaban los “señores de la guerra” para desgracia de su empobrecida población.<br /><br />No todo han sido éxitos en este largo recorrido de un siglo, durante el cual el Partido Comunista ha pasado por muchas dificultades y ha cometido errores –algunos de ellos reconocidos de forma pública por el mismo Partido-. Sin embargo, el balance general es el país que estamos viendo hoy: un Estado fuerte, un territorio donde ya no quedan colonias extranjeras, una población que ya no vive en la pobreza extrema y que tiene cada vez mayores posibilidades para mejorar su calidad de vida y desarrollarse personal y profesionalmente. <br /><br />Ni durante la revolución, ni en las primeras décadas desde el establecimiento de la República Popular, ni tras el comienzo del período de reformas después de 1978, el Partido Comunista tuvo un “modelo” a seguir que se adaptara exitosamente a la situación práctica (histórica, cultural, geográfica, demográfica, económica, y un largo etc.) de su país. Por eso, tuvo que ir buscando su propio camino –muchas veces después de haber pagado un alto precio por los errores cometidos-, y ese fue el de <span style="color: #2b00fe;">combinar los principios básicos del marxismo a la realidad concreta de China.</span> Ya lo planteó Mao Zedong en la fase de la revolución al lanzar la consigna de <span style="color: #2b00fe;">“rodear las ciudades con el campo”</span> y es lo que los dirigentes del país llaman desde hace tiempo <span style="color: #2b00fe;">“el socialismo con características chinas”. </span><br /><br />Desde que llegué a China en el año 1975 no he dejado de escuchar los pronósticos más pesimistas sobre la República Popular, en muchos casos refiriéndose al posible estallido de guerras civiles o incluso a la desintegración del país. <br /><br />Sólo por poner unos pocos ejemplos, lo vi en 1976 tras la muerte de Mao, entre 1989 y 1991 después de la desintegración del llamado bloque socialista de Europa del Este y de la URSS, o cuando la crisis financiera originada en el sudeste asiático en 1997. <br /><br />También leí y escuché los pronósticos más pesimistas cuando la crisis del SARS estalló en el 2002 y más recientemente con la pandemia del COVID. <br /><br />Es muy frecuente que después de cada cifra positiva que las autoridades anuncian sobre la economía china, parte de los analistas y de la prensa internacional pongan un “pero”. Las exportaciones han crecido, “pero…”; el PIB se ha incrementado, “pero…”. A veces la gente se olvida que estamos hablando del país más poblado de la tierra y que gestionarlo bien, hacer que “funcione” no es una tarea fácil. Y sino, veamos cuál es la situación en aquellos países que demográficamente pueden ser parecidos a China. <br /><br />Se van a cumplir cien años desde la fundación del Partido Comunista, y ya han pasado más de setenta desde la fundación de la República Popular y, a pesar de todas las dificultades, de los defectos que se puedan encontrar, la realidad es que China está más fuerte que nunca y que su desarrollo es imparable. <br /><br />A medida que China ha ido desarrollándose y fortaleciéndose, han ido creciendo las críticas y actitudes negativas y contrarias hacia el país asiático, por parte de algunos gobiernos y medios de prensa occidentales. Muchas de esas críticas que se hacen ahora son sobre aspectos que ya existían en el país en las últimas más de cuatro décadas –por acotar el tiempo al período que comienza en la etapa de las reformas y apertura al exterior. En este largo período de tiempo, y al igual que ahora, el país estaba gobernado también por el Partido Comunista, pero esos que ahora la critican no decían nada entonces ya que podían aprovecharse de los beneficios y oportunidades económicas que les ofrecía ese gigantesco mercado. En esos años China “no era mala”. Por decirlo de una manera coloquial, China se convirtió “en la mala de la película” cuando su capacidad económica, industrial y científica, entre otros aspectos, la fueron convirtiendo en el país poderoso que es hoy. <br /><br />Muchas de las cosas que se critican ahora de China, o ante las cuales se lanzan llamados de alerta, son exactamente las mismas que décadas atrás aplicaban esos países para entrar en el mercado chino: ventajas financieras, apoyo a empresas -no sólo públicas sino también privadas- o el respaldo institucional a sus empresarios. <br /><br />Se mencionan con frecuencia las frases <i>“China contra el mundo” </i>o <i>“reacción contra China en la comunidad internacional”</i>. Para empezar, los que las dicen tienen una visión muy limitada de lo que es “el mundo” o “la comunidad internacional”. Y además no se tiene en cuenta que, en la práctica, en muchas ocasiones es ese “mundo” el que está actuando contra China, alertando de “la amenaza” y “el peligro” de la República Popular. <br /><br />Leyendo algunos artículos da la impresión de que antes de la llegada de Xi Jinping a la secretaria del Partido Comunista a finales del 2012, ese Partido no era el que estaba al frente del gobierno desde 1949. Y se pasa por alto que China y el mundo en los últimos diez años no son lo mismo que en la década de los ochenta o noventa del siglo pasado.</span></div><div><br /></div><div><span style="font-family: arial; font-size: large;">¿Podemos comparar el mundo de entonces con el de los últimos diez años? Sinceramente, creo que no. Y al igual que no se puede usar de forma simple esta comparación cuando hablamos de China, tampoco la podemos usar cuando hablamos de otros países. <br /><br />En todo caso, aunque a algunos no les guste, habrá que acostumbrarse y adaptarse a un mundo multipolar, en el cual China ya juega y seguirá jugando un papel cada vez más importante.</span></div><div><span style="font-family: arial; font-size: large;"><br /></span></div><div><span style="font-family: arial; font-size: large;">Los cien años del Partido Comunista darían para muchas reflexiones de todo tipo (históricas, ideológicas, geopolíticas, económicas, culturales y un largo etc.) pero para eso no sirven las sencillas entradas de esta página.<br /><br />Y por eso termino destacando que, como en el siglo pasado se decía <span style="color: #2b00fe;">“sin el Partido Comunista no existiría la nueva China”</span>, hoy podemos decir que <span style="color: #2b00fe;">“sin el Partido Comunista no existiría la China próspera y fuerte de la actualidad”.</span></span></div><div><span style="font-family: arial; font-size: large;"><br /></span></div><div><span style="font-family: arial; font-size: large;">@PabloRovetta</span></div></div>Unknownnoreply@blogger.com3tag:blogger.com,1999:blog-1444445772269538580.post-22254964820049857972021-05-30T13:23:00.001+02:002023-03-19T13:22:43.508+01:00Leyendo "La China que viví y entreví" y el país asiático en las primeras décadas del siglo XX<span style="font-family: arial; font-size: large;">Reconozco que para mí ha sido una sorpresa muy agradable encontrarme con la reedición de <span style="color: red;">"La China que viví y entreví"</span>, que había sido publicado por primera vez en España en 1977.<br /><br />Para todas aquellas personas interesadas en China, en todos sus aspectos, me permito recomendar la lectura de esta nueva edición de <span style="color: red;">"La línea del horizonte" </span></span><p><span style="font-family: arial; font-size: large;">Y es que su lectura puede, en mi modesta opinión, ayudarnos a conocer o intentar comprender un poco más la China de hoy y de sus últimas décadas.</span></p><p><span style="font-family: arial; font-size: large;"><br /></span></p><p></p><div class="separator" style="clear: both; text-align: center;"><a href="https://1.bp.blogspot.com/-gjK53r2VaNg/YLN1LI1vjzI/AAAAAAAAC1Q/bfpC-E17klA0v5dW_nIpYl-cykeLy4QiwCLcBGAsYHQ/s336/La%2BChina%2Bque%2Bvivi.jpg" style="margin-left: 1em; margin-right: 1em;"><img border="0" data-original-height="336" data-original-width="229" height="400" src="https://1.bp.blogspot.com/-gjK53r2VaNg/YLN1LI1vjzI/AAAAAAAAC1Q/bfpC-E17klA0v5dW_nIpYl-cykeLy4QiwCLcBGAsYHQ/w273-h400/La%2BChina%2Bque%2Bvivi.jpg" width="273" /></a></div><br /><span><a name='more'></a></span><p></p><p><span style="font-family: arial; font-size: large;">El libro es una autobiografía y reflexiones de Huang Masai, cuyo nombre se convierte en España en <span style="color: red;">Marcela de Juan</span>, hija de padre chino y madre belga, que vivió su infancia en Madrid y quince años de adolescencia y juventud, entre 1913 y 1928, en el barrio de las legaciones extranjeras de Pekín.</span></p><p><span style="font-family: arial; font-size: large;">Ya se han escrito varias crónicas sobre esta joya literaria, enfocándolas desde diversos puntos de vista. Fernando Rodríguez Lafuente, en un resumen en el ABC de España, habla de "europea en China, china en Europa", centrándose en el aspecto multicultural de Marcela de Juan.</span></p><p><span style="font-family: arial; font-size: large;">Hoy me gustaría centrar mis reflexiones desde otro punto de vista, en concreto en las cosas de las cuales fue testigo directo la autora hace ya casi un siglo, y de lo que pensaban entonces ella y su padre.</span></p><span style="font-family: arial; font-size: large;">Marcela de Juan era hija de un diplomático y alto funcionario, o "mandarín". Una familia acomodada, que vivió con todos los lujos de esa época, en esa burbuja paradisíaca que era el barrio de las legaciones extranjeras de Pekín. Y sólo por las anécdotas de todo tipo que relata ya vale la pena leer el libro.</span><p><span style="font-family: arial; font-size: large;">Ella habla de "la China que yo viví, la época en que yo viví en Pekín. Era la época de los 'señores de la guerra'. Una época de grandes riquezas y de tremendas pobrezas" y de ahí el valor de su testimonio.</span></p><p><span style="font-family: arial; font-size: large;">Viviendo en el barrio de los europeos, pero siendo a su vez euro-asiática, sintió de cerca la discriminación racial. Por ejemplo cuando menciona que "íbamos a la zona francesa porque en la inglesa había un letrero muy grande que decía 'Dogs and chinese not admitted', y por eso no podía entrar al "Peking Club", ya que le dijeron que "los chinos no eran admitidos, por muy dignatarios que fueran".</span></p><p><span style="font-family: arial; font-size: large;">Su frase "Era mala cosa ser chino en China en aquel entonces", resumen perfectamente lo que se puede deducir leyendo libros de historia.</span></p><p><span style="font-family: arial; font-size: large;">Marcela de Juan relata cómo era la China que vió en medio de las luchas de los "señores de la guerra", la extrema pobreza, las matanzas, el papel de la mujer en esa sociedad.</span></p><span style="font-family: arial; font-size: large;">Y si me lo permiten, me gustaría decir que algunas de sus reflexiones o las que cita de su padre, coinciden con las que yo fui sacando en los más de cuarenta años de relación directa con el país al que llegué en 1975.</span><p><span style="font-family: arial; font-size: large;">Citando a un prestigio intelectual chino de esa época, menciona que "Los europeos no son capaces de comprender lo que era la vieja China. Les falta la base, el conocimiento de nuestro idioma y de nuestra civilización cinco veces milenaria".</span></p><p><span style="font-family: arial; font-size: large;">"Hay extranjeros -continúa- que pretenden penetrar y conocer en unos días o semanas a una nación que precisó muchos siglos para formarse y pulirse. ¡Qué ilusos!". Sobran los comentarios.</span></p><p><span style="font-family: arial; font-size: large;">No pretendo ni mucho menos compararme con ella, pero no puedo dejar de mencionar cómo esas y otras conclusiones son a las que yo llegué casi medio siglo después, y que relato en "Los años setenta en China".</span></p><p><span style="font-family: arial; font-size: large;">Yo también viví y vivo muchas cosas del país que no entendía y me parecían, y aún me parecen, contradictorias. Marcela de Juan al reconocer que no comprende alguna de las contradicciones que ve, dice que "mi padre nos dijo que en China todo era posible". </span></p><p><span style="font-family: arial; font-size: large;">Para no extenderme demasiado, Marcela de Juan regresa a China 47 años después de haber abandonado el país, en noviembre de 1975, cuando yo ya llevaba seis meses en la República Popular.</span></p><p><span style="font-family: arial; font-size: large;">Y lo que ve, las conclusiones a las que llega, hoy serían calificadas como "pro-comunistas", "pro-chinas". Por ejemplo,cuando regresa a Pekín, y hace una comparación con la China que vivió, dice lo siguiente:</span></p><p><span style="font-family: arial; font-size: large;">"Hay que haber conocido la China de mis tiempos -dice- dividida, destrozada, sojuzgada, con todas sus riquezas y todos los servicios en poder de los extranjeros ... donde en cada mala cosecha había millones de muertos. Donde para cientos de millones de seres, conseguir un tazón de arroz parecía, en millones de seres, una cosa imposible".</span></p><p><span style="font-family: arial; font-size: large;">Marcela de Juan no deja a entender en su libro cuáles son sus ideas políticas, pero está claro que no era lo que hoy se podría llamar una persona "de izquierda". </span></p><p><span style="font-family: arial; font-size: large;">Tras su viaje de 1975 otra de sus conclusiones es la siguiente: "Creo que el chino no es comunista. Tiene su propio comunismo, ya que en China el marxismo es algo diferente, es como si dijéramos un marxismo adaptado a la tradición china". </span></p><p><span style="font-family: arial; font-size: large;">Se podrá estar de acuerdo o no con esta reflexión, pero lo que en alguna medida está reflejando, y es lo que modestamente menciono en mis "Los años setenta en China", es "El socialismo con características chinas", uno de los lemas principales de los líderes actuales del país.</span></p><p><span style="font-family: arial; font-size: large;">Debido a lo que vio y vivió entre 1913 y 1928, la autora saca a relucir ya entonces ese carácter "nacionalista" del pueblo chino, tan criticado a veces y atribuido al Partido Comunista.</span></p><p><span style="font-family: arial; font-size: large;">Por último, y otro punto más en que cual coincido, Marcela de Juan, tras su viaje de 1975, indica que "China sigue siendo un inmenso enigma, ... es el país del mundo donde el pasado está y sigue estando presente".</span></p><p><span style="font-family: arial; font-size: large;">En definitiva, un libro muy instructivo -también desde otros puntos de vista- y recomendable que puede ayudar a comprender muchas de las cosas que han pasado y siguen pasando en China. </span></p><p><span style="font-family: arial; font-size: large;">Ocurre con otros países, naciones, civilizaciones, pero en el caso concreto de China, este testimonio directo de Marcela de Juan, es una muestra más de la importancia de conocer el pasado, la cultura, la historia de un país tan milenario para intentar -y destaco lo de intentar- comprender muchas de las cosas que ocurren en la actualidad.</span></p><p><span style="font-family: arial; font-size: large;"><span> </span><span> </span><span> ---<span> </span><span> </span><span> ---<span> </span><span> </span><span> ---<span> </span><span> </span><span> ---</span></span></span></span><br /></span></p><p><span style="font-family: arial; font-size: large;"><b>"La China que viví y entreví". Marcela de Juan</b></span></p><p><span style="font-family: arial; font-size: large;"><b>"La línea del horizonte. Ediciones"</b></span></p><p><span style="font-family: arial; font-size: large;"><b>ISBN: 978-84-17594-85-5</b></span></p><p><span style="font-family: arial; font-size: x-large;">@PabloRovetta</span></p>Unknownnoreply@blogger.com4