2015 fue un
año excepcionalmente activo para la diplomacia china, que parece haber dado un
gran salto adelante bajo el liderazgo de Xi Jinping con el objetivo de que el
papel de la República Popular en las relaciones internacionales tenga la misma
posición de fuerza que la ya alcanzada por el país asiático en el mundo en
campos como la economía o el comercio.
El
Presidente Xi se está destacando pues como el dirigente más activo de la
diplomacia en la historia de la República Popular. En los 33 meses que lleva en
el cargo, Xi ha realizado casi 40 visitas de Estado. El año 2015 en especial
fue particularmente fructífero para la diplomacia del gigante asiático habiendo
estado el líder chino casi un mes y medio (en total 42 días) en visitas fuera
del país.